(Minghui.org) Continúa de parte 1

Algunos practicantes de Falun Dafa saben que tener sexo afuera del matrimonio es una manifestación de la lujuria y es un pecado. Verse atraído por alguien y querer acercarse a él es un deseo lujurioso.

Hay muchas manifestaciones de la lujuria, como verse atraído por hombres apuestos o mujeres hermosas, admirar a estrellas televisivas y celebridades, tener envidia de la atracción que otros ejercen, o prestarle mucha atención a la propia apariencia.

Muchas cosas en el mundo secular pueden mover el corazón de una persona. Sin embargo, lo que parece ser un comportamiento aceptable para la gente común puede ser malo en los ojos de los dioses.

Lidiar con deseos lujuriosos es una prueba enorme para cultivadores. Si estos deseos no nos mueven, entonces Shifu y los seres divinos pueden protegernos, y prevenir que las viejas fuerzas nos interfieran. Si enviamos pensamientos rectos constantemente, los demonios de la lujuria y otros elementos negativos serán desintegrados. Si nos cultivamos diligentemente, nuestro yeli de pensamiento, lujuria, y otras cosas negativas no podrán controlar nuestros cuerpos, y así podremos superar esta prueba de cultivación.

Si los practicantes de Dafa pueden entender verdaderamente que Dafa es sagrado y solemne, no seremos indulgentes a deseos lujuriosos. No nos atreveríamos.

Los practicantes han venido de niveles muy altos. No es posible que alcancemos la consumación si no dejamos los deseos lujuriosos de la gente común. El proceso de cultivación es un proceso de eliminar la suciedad. Solo cuando podemos eliminar las nociones humanas y apegos obtendremos un nivel divino.

Tomando control de nuestros pensamientos y comportamiento

La diferencia entre humanos y dioses es que un dios controla todo en su mundo. Si permitimos que las nociones humanas nos controlen, entonces somos humanos. Si nuestros pensamientos rectos pueden dominar, entonces nos convertiremos en seres divinos.

Muchos antiguos cuentos chinos decían que el Cielo nos está mirando. Los que no pueden superar los deseos lujuriosos serán castigados, y aquellos que pueden serán recompensados.

No podemos no actuar sobre nuestros pensamientos y deseos, ya que una vez que un pensamiento sucio emerge, los dioses lo ven.

Shifu ha dicho:

“En el macro y microcosmos, todos los seres están observando de cerca todas estas cosas en la superficie de la Tierra. Conocen cada acción y cada pensamiento de los Dafa dizi. Todo lo que los Dafa dizi hacen se muestra claramente ante los ojos de seres más elevados. Por lo tanto, asegúrense de hacerlo bien y ganar su admiración”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de Boston, 2002)

Un practicante no debería tener ningún pensamiento lujurioso, ni mencionar tener sexo inapropiado. Debemos transitar rectamente el camino de cultivación, mantenernos puros, y cumplir la promesa histórica que una vez hicimos.

Shifu ha dicho:

“...mucha gente tiene comportamientos personales indecentes, no tratan a su cultivación de manera seria y solemne, esto causará problemas para ti, dificultades, incluso sufrimientos, y aun más, incluso perder la vida”. (Enseñando el Fa en el Día Mundial de Falun Dafa)

El apego a la lujuria puede tener serias consecuencias

El practicante A era soltero. Luego de que se enfermase y muriese, otros practicantes encontraron muchas fotografías pornográficas en su computador. Según uno de sus amigos, el chateaba con mujeres usando un lenguaje inapropiado. Hasta tuvo sexo con una de ellas.

La practicante B tuvo un amante antes de comenzar a practicar. Luego se enfermó. Cuando los practicantes enviaron pensamientos rectos para ella, una de ellas con el tianmu abierto vio la imagen de un hombre en su campo dimensional. Ella admitió que se trataba del amante que había tenido. No había podido quitárselo de su mente, y a menudo recordaba los momentos que habían pasado juntos. Finalmente ella murió.

La practicante C es de edad avanzada y ha enfermado gravemente. Cuando los practicantes enviaron pensamientos rectos para ella, una vio con su tianmu que un ser divino dijo que ella tenía sentimientos inapropiados hacia su yerno. Cuando lo negó, esta practicante le recordó que era inapropiado tener esos sentimientos, aun si solo le parecía que era atractivo. Ella admitió que le gustaba el aspecto de su yerno, pero que no se había dado cuenta de que era inapropiado.

El practicante D gustaba de una practicante. La invitó a salir y le expresó sus sentimientos. Le dijo que él era un practicante, y que todo lo que quería era abrazarla. Pero el abrazo los llevó al sexo. Luego él fue arrestado, puesto en prisión y torturado.

El practicante E dijo que después de haber tenido relaciones inapropiadas, pudo ver con su tianmu que los seres conscientes en su mundo estaban siendo comidos por demonios, y que los edificios estaban colapsando. Su cuerpo en esa dimensión estaba podrido.

Como practicantes de Dafa, nuestra misión es la de salvar a los seres consientes. ¿Cómo podemos dejar que sufran por nuestros errores?

Una practicante compartió su experiencia y dijo: “Miré un programa de TV y me sentí atraída hacia el actor principal. Sabía que era un deseo fuerte que debía eliminar, pero no podía dejar de pensar en él. Aun cuando meditaba o enviaba pensamientos rectos, seguía viendo su sonrisa. Un día, mientras conducía, comencé a fantasear que estaba con él, y choqué el auto contra un cerco. Las viejas fuerzas tomaron provecho de mis brechas. Si no fuese por la protección de Shifu yo podría haber perdido la vida”.

Tener pensamientos lujuriosos puede generar yeli de pensamiento lujuriosos. El yeli de pensamiento interfiere con los practicantes. También interfiere con nuestro estudio del Fa y con los ejercicios, haciendo que nos quedemos dormidos o distraídos.

Algunos practicantes pueden superar el apego a la lujuria

Los siguientes son dos ejemplos en donde los practicantes lograron superar la prueba de la lujuria.

Una practicante a menudo recibe mensajes de texto de un practicante; ella cree que él esta encubriendo sus sentimientos. Cuando ella leyó sus mensajes sintió que algo no andaba bien, y entonces luego borró su contacto.

Un día, el le dijo: “Tenemos una relación predestinada. Hemos sido tal y cual en la historia”.

“Aun si fuese real”, ella respondió: “ha sido arreglado por las viejas fuerzas. Yo no las reconozco. En el periodo de la Rectificación del Fa, yo solo sigo los arreglos de Shifu”.

Otra practicante en general no le presta mucha atención a su apariencia. En una ocasión en que iba a hablar con cierto practicante se puso un vestido bonito y se miró admirada en el espejo. Se dio cuenta de que su comportamiento era diferente, entonces volvió a ponerse su ropa simple.

Quería compartir su entendimiento del Fa con ese practicante, pero se detuvo y pensó: “¿Por qué quiero hablar con el? Puedo encontrar a una practicante mujer para hablar de esto”.

Decidió no visitar a ese practicante, pero aun no podía calmarse y se dijo: “Los dioses están mirándome. Debo controlarme”. Finalmente se calmó y la ansiedad desapareció.

Al día siguiente durante la meditación, vio un cúmulo de cosas rotando que se acercaban hacia ella. Se dio cuenta de que se trataba del universo de ese practicante, porque vio la imagen de él. Pasó por su cuerpo a una velocidad extremadamente rápida.

Tenía un deseo muy fuerte de verlo unos días después. Intentó restringirse, pero se le hacía difícil. Había una batalla en su mente; parte de ella aun quería ir a verlo. Se dijo firmemente: “Yo soy la conciencia principal. No escucharé a los sentimientos de mi cuerpo. No lo visitaré”.

Sintió mucha presión arriba de su cabeza. Se arrodilló frente al retrato de Shifu y dijo: “Shifu, las viejas fuerzas arreglaron mi relación con él en la historia, y no dejan de darme pensamientos sucios a propósito. Intentan destruirme. No quiero esas cosas. No me cultivaré en sus arreglos. Solo te sigo a ti. Por favor, ayúdame Shifu”.

Inmediatamente sintió un calor que fluyó por su cuerpo. Se relajó, y todas las cosas sucias y la pesada presión sobre su cabeza desapareció. Sabía que Shifu había purificado su cuerpo y eliminado las malas sustancias.

Sentimentalismo entre practicantes

La gente tiene relaciones históricas y predestinadas, y muchos practicantes sienten que son viejos amigos y se llevan muy bien. Sin embargo, necesitamos prestar atención a los sentimientos emocionales entre nosotros, porque pueden estar cubriendo la lujuria.

A una practicante le gustaba juntarse con cierto practicante, estudiar el Fa y compartir experiencias juntos. Ella dijo: “Disfruto hablando con él”. Pero muchos practicantes se dieron cuenta de que había lujuria y deseos detrás de esas palabras.

Otra practicante tenía una buena impresión de un practicante. Le gustaba pasar tiempo con él y dijo: “Aunque no habíamos hecho nada inapropiado, yo quería estar con él. Quería estudiar el Fa con él, compartir entendimientos, y hacer proyectos con él. Quería que él se siente a mi lado. También, yo le prestaba demasiada atención a mi apariencia. Detrás de mi comportamiento había un deseo fuerte y lujurioso. Aun si no hacíamos nada malo, mis pensamientos no se acercaban al criterio de los practicantes de Dafa”.

El artículo “Reconocer las formas en las que el demonio de la lujuria se esconde” publicado en Minghui en 2012 también habla de este asunto.

Una practicante sin saberlo desarrolló admiración hacia un practicante varón. A menudo lo llamaba para pedirle distintas cosas, pero en realidad ella solo quería hablar con él.

Su apego al sentimentalismo creció cada día. Finalmente, se dio cuenta que sus emociones la estaban controlando, y rápidamente comenzó a enviar pensamientos rectos para eliminarlos. Estudió el Fa más e intentó corregirse.

No obstante, estos sentimientos comenzaron a volver, y sintió que no tenía el poder para eliminarlos. Una practicante mayor le dijo que todas las vidas dentro de los Tres Reinos están inmersas en qing. Si los practicantes no lo hacen bien en ciertos aspectos, las viejas fuerzas pueden explotar sus brechas para perseguirlos.

Recuerda por qué estamos aquí

Como practicantes, ¿no deberíamos eliminar nuestro apego a la emoción? Los dioses nos están mirando. Las relaciones predestinadas entre nosotros, sin importar cómo han sido formadas, deberían verse como sagradas relaciones predestinadas por el Fa. No deberíamos actuar como gente común.

Si un practicante se ve atraído hacia otra persona, y se siente triste cuando es rechazado, ya está siendo indulgente con este apego. Estos pensamientos y comportamientos no son lo que los practicantes deberían tener, y nos causarán problemas.

Deberíamos cultivarnos y convertirnos en partículas puras en el Fa, y ser responsables hacia nuestros seres conscientes.

Shifu ha dicho:

“Dafa dizi: dije largo tiempo atrás que la lujuria es un obstáculo fatal para un cultivador que se deja mover y llevarse demasiado y fuertemente por este qing. Ni siquiera puede desprenderse de esta pequeñez. Cuando en aquel tiempo al comienzo las viejas fuerzas arreglaron ponerlos tras las paredes de la prisión en China continental, parece que sólo bajo tales circunstancias ellos se corregían a sí mismos, ¿verdad? Las viejas fuerzas piensan: veamos cómo te comportas en tal ambiente brutal. ¿No eres así debido a tu vida demasiado cómoda? Todos aquellos que no eliminan sus apegos y tratan de encontrar excusas, están simplemente engañándose a sí mismos. No he hecho ningún arreglo especial para ti”. (Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de los Estados Unidos, 2004)

A medida que nos cultivamos, deberíamos examinar cada pensamiento inapropiado, resistirlo y rechazarlo. Deberíamos constantemente limpiar nuestro campo dimensional. No deberíamos encubrir pensamientos lujuriosos. No estamos aquí para buscar la felicidad, sino para salvar a la gente.