(Minghui.org) Un hombre de 53 años de la ciudad de Shenyang fue sentenciado a 4,5 años de prisión y multado con 10.000 yuanes por negarse a renunciar a Falun Gong, disciplina espiritual que está perseguida por el régimen comunista chino. La madre juró que apelaría por su derecho a la libertad de creencia.

El 26 de junio de este año tomaron prisionero al señor Li Hongwei y su casa fue saqueada. Los agentes que lo detuvieron lo golpearon salvajemente mientras trataba de escapar. Había manchas de sangre en el departamento después del arresto. Sin embargo, la policía declaró que Li se había lastimado durante un accidente.

El hombre hizo huelga de hambre en el centro de detención de Hunnan como protesta por la ilegalidad de su reclusión; el 13 de julio fue trasladado al hospital local solo para ser alimentado por la fuerza. Dos uniformados y tres oficiales vestidos de civil estuvieron presentes, lo golpearon y abofetearon cuando protestó por el maltrato. El 3 de agosto la corte del distrito de Hunnan trató el caso y entregó el veredicto contra Li dos semanas más tarde.

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