(Minghui.org) Noté que algunos practicantes tienen tendencia a halagar y elogiar demasiado a otros practicantes. Alaban a otros por su mejor entendimiento del Fa, buena cualidad de iluminación, y logros.

Los que reciben esos elogios muchas veces desarrollan el apego a la exultación. Los halagos se les suben a la cabeza cuando otros les dicen lo bien que lo están haciendo. Así, se hace difícil que ellos acepten críticas cuando otros les señalan sus fallas.

Rechazar las críticas es un obstáculo principal en el camino de cultivación. Aquellos que elogian a los practicantes tal vez no se den cuenta que están agregando dificultades a la cultivación del practicante.

En el océano de Dafa, cada uno de nosotros es como una gota. Nuestras habilidades, talentos, y destrezas todas vienen de Dafa. Sin Dafa, no podemos hacer ni siquiera un chapuzón, ni hablar de olas.

Los que lo hacen bien tienen que tratar de mantener humildad y estar alertas de sus apegos de complacencia y ostentación. También deberíamos estar atentos de no halagar exageradamente a los practicantes.