(Minghui.org) La Sra. Duan Xiaoyan, practicante de Falun Gong, fue ilegalmente juzgada por la corte del condado de Qingcheng en la ciudad de Qingyang, prov. de Gansu, el 16 de agosto de 2016, aunque su salud no era buena y estaba paralizada de la cintura hacia abajo debido a las torturas sufridas.

Muchos oficiales de la policía se presentaron el día del juicio. Más de una docena de agentes de seguridad nacional accedieron a la sala de la corte, mientras que sólo se permitió el ingreso a la audiencia a dos familiares de la Sra. Duan.

El Sr. Wang Haijun, el abogado de la Sra. Duan, cuestionó al juez preguntando las razones de por qué él y la Sra. Duan no fueron notificados del juicio al menos con tres días de anticipación, como lo requiere la ley, pero el juez se negó a responder.

El juez repetidamente interrumpió al abogado en el juicio y se negó a hablar chino mandarín, haciendo que sea difícil para el abogado comprenderlo. El juez también criticó a la Sra. Duan cuando hablaba.

El Sr. Wang solicitó que el juez se auto-recusara por negar a la Sra. Duan sus derechos legales. La corte levantó la sesión por unos 30 minutos, pero se negó a la solicitud del abogado.

Abogado acosado

Personal del directorio político de la prov. de Gansu y la “oficina 610” intentaron presionar al Sr. Wang para que dejara la defensa de la Sra. Duan y lo amenazaron, diciéndole que no mencionara nada sobre su creencia espiritual en el juicio.

Antecedentes

La Sra. Duan, de 46 años, había presentado su querella penal en junio de 2015 contra Jiang Zemin, el ex dictador comunista chino que había iniciado e instigado la persecución a Falun Gong en 1999. Fue arrestada junto a otra practicante en julio de 2015 por agentes del directorio político de la ciudad de Xian, la “oficina 610”, la comisaría del distrito de Gaoxin y la comisaría del distrito de Changan.

La Sra. Duan detalló los hechos de la persecución que soportó: “En un mes, recibí descargas con picanas eléctricas cuatro veces en la cabeza, espalda y piernas. Mi espalda y rostro estaban cubiertos con quemaduras, pus de las ampollas, mi cuerpo estaba entumecido y mis extremidades débiles. Tenía dificultades para caminar y no podía levantarme”.

Antes del arresto de 2015, la Sra. Duan había sido arrestada y retenida varias veces en campos de trabajo forzado por su creencia en Falun Gong. Fue condenada a siete años en la cárcel de mujeres de Qinghai, donde fue gravemente torturada, incluso con picanas eléctricas. Como resultado, la parte inferior de su cuerpo quedó paralizada.