[Minghui Net] Los particulares sitios turísticos de Toronto atraen a un gran número de turistas chinos, y proporcionan oportunidades para que los practicantes expliquen la brutal persecución del partido comunista chino (PCCh) contra Falun Gong. Por medio de aclarar la verdad los practicantes pueden ayudar a que los turistas vean claramente al PCCh como lo que es, y los alientan a desvincularse del mal del partido por su propia seguridad.

En los últimos años el número de practicantes de China continental que han venido a vivir al extranjero ha ido en aumento. Si los practicantes veteranos en el extranjero pueden ser un ejemplo de cómo acercarse con eficacia a los chinos fuera de China, y cómo ayudarles a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas, estos practicantes recién llegados pueden rápidamente familiarizarse con la clarificación de la verdad en su nuevo entorno.

Esto asimismo construirá su confianza, los ayudará a superar las nociones mentales de que no son capaces, y los animará a participar en los esfuerzos locales para ayudar a los chinos a renunciar al partido en los sitios turísticos.

La Sra. Wang, una practicante veterana, es voluntaria en el Centro de Servicio para Renunciar al PCCh en el barrio chino de Toronto.

Ella vio cómo dos practicantes chinos recientemente llegados a Canadá entregaban materiales informativos pero no hablaban con la gente que pasaba por allí. Vio que se perdieron oportunidades para ayudar a los chinos a renunciar al PCCh.

La Sra. Wang se paró frente a una de las practicantes. Miraba a las personas que le pasaban cerca, las saludaba y hablaba con aquellos que se paraban a escucharla. En poco más de una hora ayudó a más de una docena de personas a renunciar al PCCh y sus organizaciones afiliadas. Muchas de las personas que renunciaron parecían felices y expresaron su gratitud.

La practicante recién llegada fue testigo de esto y dijo: "La gente pasa rápidamente por mi lado. Pensé que no había forma de poder hablar con ellos". Inspirada en la señora Wang esta practicante ganó confianza. Dijo que sentía que ella también podría atraer a los transeúntes. La practicante dijo que iba a ir a un sitio turístico para ayudar a más chinos a conocer la verdad y renunciar al PCCh.

De camino a casa, la otra practicante recién llegada y la señora Wang caminaron en la misma dirección. Ella fue testigo de cómo la señora Wang ayudó a dos hombres chinos que vieron en la calle a renunciar al PCCh.

Un hombre (de unos 30 años) renunció rápidamente a la liga de la juventud. El otro hombre (de unos 50 años) parecía recién llegado de China. Tan pronto como escuchó a la señora Wang hablar de renuncias al PCCh, se impacientó y dijo: "No me hables de esto, no me interesa".

Wang mantuvo la calma y dijo: "Veo que eres una buena persona. Quiero decirte algo acerca de cómo las personas buenas se pueden mantener a salvo. Sólo deseo lo mejor para ti". El hombre se calmó y aminoró el paso. Escuchó a la señora Wang, finalmente entendió y renunció a su membresía del PCCh.

Este hombre luego cruzó la calle y siguió caminando. Un rato más tarde regresó para darle la mano a la señora Wang y expresarle su gratitud.

La practicante recién llegada vio que no era tan difícil hablar con la gente y ayudarles a renunciar al PCCh. Le dijo a la señora Wang: "Es tan simple, creo que puedo hacerlo también". La practicante dijo que inicialmente había carecido de confianza y sintió ansiedad. Cuando más tarde trató de ayudar a las personas a renunciar al PCCh, mejoró gradualmente.

La ayuda de la señora Wang fortaleció la confianza de esta practicante. Más tarde, ambas fueron a un sitio turístico para ayudar a más turistas chinos a renunciar al partido.

Versión en inglés disponible en: http://en.minghui.org/html/articles/2014/8/24/2663.html