[Minghui Net]

1. La persecución empezó tan pronto como comencé a cultivarme

Fui a visitar a mi hermana mayor el 18 de febrero de 1999. Tomé un libro de encima de su escritorio y empecé a leer. Poco después de esto me sentía profundamente atraída por el libro y enormemente conmovida y quería terminarlo en seguida. Cuando se acercaba la hora de la comida, mi hermana se percató de que no podía dejar el libro y dijo: “Puedes llevarte el libro a casa”. Me llevé el libro, era Falun Gong.

Vi las imágenes de los movimientos de los ejercicios en el libro y empecé a aprenderlos pero no estaba segura de si los estaba haciendo bien o no. Alguien me dijo que había mucha gente haciendo los ejercicios los domingos en la plaza. Quería observar a los demás y aprender así salí sin mi estera para sentarme. Cuando llegué a la plaza había más de mil personas haciendo los ejercicios allí. Cuando empezó la música, me coloqué en línea y les seguí de forma natural.

El domingo siguiente fui allí de nuevo con mi esterilla para sentarme y vi a mucha gente marchándose, diciendo que ya no estaba permitido practicar los ejercicios. Me quedé perpleja y no sabía la razón. Pensé que era algo temporal.

2. Pensamientos y acciones rectas

Había obtenido el Fa nada más empezar la persecución. Los medios por toda China difamaban de manera abrumadora a Dafa y a Shifu. Estaba muy disgustada y no sabía qué hacer.

Al no tener otra alternativa, tuve que hacer las cosas a mi manera. Agarré los periódicos que mi lugar de trabajo pedía todos los días y arranqué las páginas que difamaban a Dafa. No quería que los demás leyeran dichos artículos. Escribí mi objeción a cada párrafo y también añadí un comentario junto con los periódicos y los devolví al autor. Escribí mis propios pensamientos sobre la situación y añadí fotos o un titular y pegué los posters en público. Todavía no sabía nada sobre la aclaración de la verdad y tampoco tenía otros materiales, mucho menos acceso a la página web Minghui. Me sentía muy animada cada vez que oía hablar a un portavoz de Falun Gong a través de Radio Free Asia.

Durante la persecución, la gente que traicionó a Dafa llevó a la policía a la casa de cada practicante y buscaron libros de Dafa y fotos de Shifu. Un día cuando llegué a casa un vecino me dijo que un policía local había estado buscándome y preguntó si practicaba o no Falun Gong. No estaba asustada ni pensaba en esconderme. Pensé, ya que me he beneficiado tanto de Dafa, tengo que levantarme por un Shifu y un Fa tan grandes. Fui a buscar al policía local. Me preguntó por qué seguía practicando Falun Gong. No le contesté directamente, sino que sonreí y le dije: “Mira todas mis enfermedades se han ido porque practico Falun Gong. Tenía muchos gastos médicos que mi lugar de trabajo no podía pagar. ¿Cómo puedo dejar de practicar Falun Gong?”. Él me dijo que había una orden de los altos mandos de que si cualquiera en su área iba a Beijing a apelar por Dafa, sería multado duramente. Me dijo que si alguien preguntaba no le dijera a nadie que practico. Le contesté: “No puedo hacer eso. Eso es mentir”. La conversación terminó y él no me ha buscado desde entonces. Sabía que era Shifu que me protegía, a un nuevo dizi.

Los compañeros practicantes más tarde me trajeron las nuevas lecciones de Shifu y los artículos de Minghui y solo entonces me di cuenta de que la persecución era un arreglo de las viejas fuerzas. Shifu no reconoce ninguno de sus arreglos. Trabajé con los compañeros practicantes para exponer la persecución. Pegamos carteles, colgamos pancartas, enviamos folletos e hicimos todo lo que pudimos.

Una vez, yo estaba trabajando para un agente de revistas. Recogía tarjetas de visita, artículos y cartas de toda China y les enviaba materiales de aclaración de la verdad y tarjetas de felicitación de vacaciones. Era relativamente fácil para mí usar sellos, sobres y tarjetas de felicitación de mi trabajo. Para una persona común era muy normal hacer eso. Sin embargo, yo soy un cultivador y no debería aprovecharme de este beneficio. Estoy haciendo la cosa más sagrada, que es salvar seres conscientes y mi corazón tiene que ser puro. Gasté mi dinero para comprar sobres y sellos para la aclaración de la verdad. Todos mis compañeros sabían que yo era una practicante de Dafa, así que siempre que recibían materiales de aclaración de la verdad de los compañeros practicantes, después de leerlos, me los daban a mí y no los tiraban como hacían anteriormente. Coloqué los materiales en un lugar fácil de ver para que los demás los pudieran leer cuando llegaran a la oficina. Después de un tiempo los enviaba por correo.

3. Memorizando el Fa

Mi razón para aprender Zhuan Falun de memoria era sencilla. Vi que a un practicante le confiscaron el libro. En particular los compañeros practicantes que estaban en prisión no tenían libros para leer, no podían estudiar el Fa y algunos habían sido “transformados” por el mal. Pensé que si memorizaba Zhuan Falun y lo guardaba en mi cerebro, el mal no tendría oportunidad de “transformarme”. Así que empecé a aprender el Fa de memoria. Al principio fue difícil. Olvidaba el contenido que ya había aprendido. Pensé que debía aprender el Fa simplemente con el propósito de recordarlo. Era también un proceso de cultivación.

Cuando eliminé mi pensamiento de tener poca memoria debido a mi edad y solo pensé en cuánto Shifu ha soportado para salvarnos y aquellos compañeros practicantes que han sido sometidos a tortura en prisión, pensé que debería superar cualquier dificultad. Cuando terminé por primera vez Zhuan Falun me sentí muy bien por dentro. Sentí que había hecho un gran progreso. La segunda ronda fue relativamente fácil. Memorizaba el Fa de camino para aclarar la verdad. Siempre que me atascaba recitando el Fa, lo anotaba para buscarlo esa noche y recordarlo bien.

Más tarde empecé a leer una lección del Fa y después la aprendía de memoria. A veces me resultaba más rápido aprender el Fa de memoria escuchándolo que leyéndolo. Esto incrementó mi tiempo de estudio del Fa y me resultó fácil prestar mucha atención. Si no lo hacía, entonces no recordaría nada, mucho menos memorizarlo. Todos los días tenía en mi mente el contenido de Zhuan Falun y siempre que me encontraba con dificultades o tribulaciones, el contenido del Fa me guiaba. Gracias a esto me beneficié mucho.

Una vez salí a distribuir materiales de aclaración de la verdad y me di cuenta de que mis compañeros practicantes ya habían cubierto el área. Entonces, cambié de ubicación y continué distribuyendo. Un practicante mencionó que una de sus amigas estaba en un viaje de negocios una semana y cuando regresó encontró no solo uno, sino varias copias de Los Nueve Comentarios  sobre el Partido Comunista en su buzón. Estos libros los hicieron los compañeros practicantes con su dinero duramente ganado y no deberían ser desperdiciados así.

Vivía sola así que me fue fácil ir a las zonas remotas que necesitaban materiales de aclaración de la verdad. Con el apoyo de Shifu iba  en bicicleta a lugares a más de 160 Km con facilidad. Después de varios años, el ambiente y las carreteras de los pueblos remotos  ya me eran más familiares. Mis áreas se expandieron. Incluso aunque estaba lejos, aprendía el Fa de memoria en el camino y cantaba canciones de Dafa y llegaba en muy poco tiempo.

4. Mejorar el xinxing y volviéndome más diligente

Con el apoyo de un compañero practicante en 2009, escribí un artículo de intercambio de experiencias y fue enviado a la web de Minghui pero no publicado. Mientras tanto la situación de mi cultivación cambió. Se volvió difícil enviar materiales de aclaración de la verdad, no había mucha gente que renunciara al partido comunista chino (PCCh) después de aclararles la verdad cara a cara, mi bicicleta se rompió y la gente me decía palabras hirientes. También me atacaron varias veces en un periodo corto de tiempo. Nunca había pasado por algo como esto en los últimos diez años. Estaba desilusionada, deprimida, llorosa y sabía que este no era un buen estado. Quería cambiar pero también quería llorar alto.

Supe que era la hora de mejorar mi xinxing. Miré dentro y encontré algunos apegos. Estaba sorprendida de que después de cultivarme por tantos años mi estado fuera de esa manera. A lo largo de los años siempre había usado la excusa de la crisis económica para no poder comprar un ordenador. También usaba la excusa de no saber cómo manejar un ordenador. Me sentía a gusto y justificaba el aceptar los materiales de información que los compañeros practicantes me proveían. Nunca había pensado en montar mi propio sitio de producción de materiales, de manera que tomara algunas cantidades del sitio más grande. Había apegos al miedo y al egoísmo. Me dije que no debía buscar excusas, sino en su lugar abrirme camino y mejorar desde este momento.

Tenía la idea de producir mis propios materiales, y con la ayuda de los compañeros practicantes, adquirí un ordenador y aprendí desde el principio. La primera vez ya pude abrir la web de Minghui y cuando la impresora empezó a funcionar me sentí profundamente conmovida. Desde ese momento en adelante mi estado de cultivación también cambió. Verdaderamente fue que “¡tras el verde oscuro del sauce, se hallan resplandecientes flores y otra nueva aldea!” (Zhuan Falun). Esos pensamientos de depresión y llorar se fueron todos. Estaba feliz y encantada.

 

5. Siendo testigo de las maravillas de Dafa

En abril de 2005, trabajaba de niñera cuidando a un niño. La abuela de este niño era una profesora de instituto y creía en el budismo de la tierra pura, pero tenía toda clase de enfermedades. Me vio llevando al niño mientras subía seis tramos de escaleras con facilidad y dijo: “Estás muy sana”. Contesté: “Practico Falun Gong. Antes de practicar tenía muchas enfermedades, como enfermedad del corazón, hipertensión y dolor en el cuello”. Sentió curiosidad y quiso leer Zhuan Falun así que le presté el libro.

Una semana después, me dijo: “Este libro es maravilloso. Cuando leí el libro, el incienso que quemo es el mejor, es el incienso que indica que el fo está presente. No sabía qué significaba eso y ella me dio un libro para que pudiera leerlo. De repente sentí el Falun girando rápidamente en mi abdomen. Había oído sobre esto por el intercambio de experiencias pero nunca lo había experimentado personalmente. ¿Por qué el Falun giró tan rápido de repente? Recordé inmediatamente lo que dijo Shifu sobre practicar una sola vía de cultivación. Aunque no quería aprender otras cosas, tenía curiosidad. De otra forma ¿por qué leí su  libro?

Le devolví el libro y todo volvió a la normalidad. Estoy muy agradecida por la pista de Shifu. Esta fue la primera vez que experimenté personalmente la rotación del Falun. Esta profesora también leyó los Nueve Comentarios y renunció al pcch y a sus organizaciones afiliadas.

Un día mi hermano, que tenía su propio negocio, tuvo una disputa con alguien y me llamó para que le ayudara. Durante la charla empezamos a discutir. Mis palabras eran fuertes y obstinadas. Durante la discusión sentí otra vez la fuerte rotación del Falun en mi abdomen. Me di cuenta inmediatamente de que estaba equivocada. Shifu dijo en Zhuan Falun:

“Si compites y peleas como la gente común, eres simplemente una persona común; si excedes sus acciones, ni siquiera puedes compararte con esa persona común”.

 Dejé de discutir inmediatamente cuando me di cuenta de que estaba equivocada. Un minuto antes era muy articulada y de repente estaba callada, y la otra parte confundida. Mi hermano le llevó a otra habitación. No riñeron, sino que resolvieron el problema. Más tarde miré dentro y encontré que esto no fue un accidente. Expuso mi apego de luchar y también mi sentimentalismo. Siempre quería interferir en las vidas de otros y tenía miedo de que mi hermano resultara herido.

Recordé una cosa claramente. Una noche tenía yeli de enfermedad. Estaba muy mareada y me sentía muy mal. Fue la experiencia de eliminación de yeli más dura que he soportado. Empecé a memorizar Zhuan Falun, me centré en aprender el Fa y me olvidé de los mareos. Sentía como si alguien estuviese operando mi cabeza. Después de un rato, de repente mis mareos se fueron y volví a la normalidad. Esa acción fue muy suave y apacible, como poner a un bebé en la cama. Me incorporé pero no había nadie alrededor, me di cuenta de que era el Fashen de Shifu ajustando mi cuerpo. Las lágrimas corrían por mi cara ya que mi gratitud estaba por encima de las palabras. Grité en el fondo de mi corazón: “¡Gracias Shifu! ¡Gracias Shifu!”

Como la mayoría de los chinos que han recibido las doctrinas ateas del PCCh desde la infancia, yo tampoco creía en la existencia de los dioses y fo, tal como está escrito en Zhuan Falun:

“Algunas personas simplemente son tercas hasta este grado: apenas mencionas el qigong, él se ríe de ti desde el fondo de su corazón, pues considera que estás siendo supersticioso y demasiado ridículo. Ni bien mencionas los fenómenos del qigong, te considera muy ignorante”.

Con el propósito de salvarme, Shifu limpió compasivamente mi memoria cubierta de polvo, abrió mi sabiduría y renovó mi vida. Ya no estaba perdida en la sociedad nunca más. El Fa de Zhuan Falun me volvió clara de mente e iluminada:

 “Si el hombre salta afuera de este qing, nadie es capaz de tocarlo, los corazones de la gente común ya no pueden moverte, y el qing se reemplaza con la misericordia, que es algo más noble”.

Esto abrió mi corazón y me volví una cultivadora feliz, amable, íntegra y digna. Encontré mi camino a casa en este mundo caótico. Verdaderamente sentí la existencia de los dioses y experimenté las maravillas de Dafa. ¡Puedo ser salvada en esta única e inapreciable oportunidad en la eternidad!