[Minghui Net] Liu Zhiqun trabaja para la comisaría de Bianfang en el Pueblo de Niangnianggong, Ciudad de Linghai, Provincia de Liaoning. Él siempre ha estado involucrado en la persecución a los practicantes de Falun Gong. En noviembre de 2005, sintió que no podía abrir los ojos, su vista disminuyó dramáticamente y pasados unos días la perdió. Le diagnosticaron una necrosis del nervio óptico en un hospital de Beijing. Lo que experimentó era como si una sombra negra descendiera de los cielos para cubrir sus ojos e impedir que controlara a las buenas personas que practican Falun Gong.

Los practicantes de Falun Gong nunca se regocijan con el infortunio de los demás pero siempre clarifican la verdad sobre Falun Gong y explican la relación entre la recompensa a los actos buenos y la retribución que trae los malos actos. Los practicantes le dicen esto a la gente para ayudar a esas personas que se olvidan de lo que es correcto ante el interés propio y desafían las leyes de cielo, sufriendo cierta retribución por sus crímenes en el futuro. Lao Zi dijo "La recompensa al bien y la retribución al mal son como la sombra que sigue continuamente a una persona; usted mismo se encontrará con el ye a corto plazo, o sus descendientes se encontrarán con el ye a largo plazo". Los occidentales podríamos decir "lo que sale de uno, se le devuelve" o "lo que siembres es lo que recogerás".

Bajo la supresión brutal de Falun Gong, los practicantes arriesgan sus vidas para contarles a los demás la belleza de Falun Gong y los hechos de la persecución. ¿Acaso están haciéndolo meramente por ellos mismos? No, ellos lo hacen porque sus esfuerzos pueden salvar a las personas, y ésta es la benevolencia.

La política de terrorismo empleada por el Partido Comunista Chino se ejecuta de forma persistente desde la cima hasta la base. El gobierno del país manipula la máquina de propaganda nacional para retorcer la verdad y moviliza los recursos más altos del sistema de inteligencia del país, de la tesorería y de la policía para perseguir a Falun Gong.

El Equipo Bianfang de la Ciudad de Linghai y la Comisaría Bianfang del Pueblo de Niangnianggong hacen todo esfuerzo posible para perseguir a Falun Gong con el propósito de recibir halagos de los líderes gubernamentales. El director de la comisaría Bianfang, Han Gang, el director secundario de la comisaría Bianfang, Chen Yang, y el policía Su Xudong, emplean a los indigentes de la sociedad para arrestar a los practicantes de Dafa. Entre ellos está Liu Zhiqun, un rufián local muy conocido. Bajo la instigación de policía en la comisaría Bianfang, y con su apoyo, Liu Zhiqun ha estado siempre a la vanguardia de perseguir a Falun Gong o de cometer otros hechos malos. Él nunca ha temido las consecuencias de sus malos actos.

Su familia es amable y a menudo intentaban disuadirle de cometer maldades. Sin embargo, él los ignoraba, y realmente empeoró. Siempre se ofrece para perseguir a los practicantes de Falun Gong y dañar cruelmente a los demás. Liu Zhiqun operó ilegalmente en coordinación con la policía para enviar a los practicantes a los campamentos de trabajo forzado. Él ayuda a confiscar las propiedades de los practicantes, impone multas y obliga a los practicantes a separarse de sus familias. Liu Zhiqun atormenta a los practicantes también en sus casas de forma regular. Ha robado el dinero de practicantes y posesiones valoradas en más de 1100 yuanes. Desde que se le premia con dinero, ha continuado cometiendo aún más hechos malos persiguiendo y arrestando a los practicantes irracionalmente y sin freno. También se están usando similares trucos malvados e ilegales sobre cristianos locales y otros creyentes religiosos. Liu Zhiqun ha golpeado, arrestado y multado a los creyentes para sacar provecho de ellos.

El 22 de noviembre de 2004, Liu Zhiqun estaba arrestando y atormentando a los practicantes de Dafa de nuevo con la policía. Sin embargo, se vieron involucrados en un accidente de automóvil. Cuando todo acabó, Liu Zhiqun se arrastró desde debajo del automóvil. Ya que su lesión no era seria, posiblemente los dioses le dieran una oportunidad más para despertar su mente. No obstante, Liu Zhiqun todavía desatendió las consecuencias, como de costumbre, y continuó haciendo cosas malas.

Por esta razón, a los funcionarios en la comisaría Bianfang del pueblo de Niangnianggong que ejercen el poder sobre la gente, que siempre han hecho lo que han querido y han reprimido salvajemente a la gente, los practicantes les aconsejan que despierten. La tribulación con la que Liu Zhiqun se encontró no es accidente ni casualidad. Un sufrimiento similar les espera a aquéllos que continúan cometiendo maldades contra Falun Gong. Todos los que participan persiguiendo a los Practicantes de Falun Gong recibirán la retribución.

Fecha de edición: 15/1/2006
Fecha del artículo original: 10/1/2006
Categoría: Noticias recientes desde China

(Versión en chino: http://minghui.ca/mh/articles/2005/12/25/117245.html)