(Minghui.org) Deseo compartir mi experiencia de cultivación en cuanto a mejorar mi xinxing, mirar hacia dentro y negar los arreglos de las viejas fuerzas, tanto en el ámbito familiar como en el laboral.

Obteniendo el Fa

Soy una practicante de 26 años, originaria de Bali, Indonesia. Obtuve el Fa en 2018, en un período de mi vida en el que enfrentaba serios problemas familiares y económicos. Un día le conté a mi prima —quien es practicante de Falun Dafa— acerca de mis dificultades. Ella me explicó: “Nuestra situación actual es el resultado de las deudas del yeli (kármicas) del pasado, tal como se expone en el libro principal de Falun Dafa, Zhuan Falun”.

Esto despertó mi curiosidad por el libro y un gran deseo de comprender el sentido de la vida. Al comenzar a leer Zhuan Falun, encontré respuestas a todas las preguntas que me habían inquietado y entendí lo valioso que es.

Después de una semana estudiando el Fa, comencé a hacer los ejercicios en un sitio de práctica cercano. Sentí una energía cálida que fluía de mis manos a todo mi cuerpo. En ese momento comprendí que los principios de Zhuan Falun eran realmente buenos para mí, así que intenté seguir Verdad–Benevolencia–Tolerancia en mi vida diaria. Cada vez que enfrentaba una dificultad, recordaba las enseñanzas de Shifu y mi corazón se calmaba.

Con el tiempo, mi salud mejoró. Antes solía padecer “calor interno” e incluso hemorroides, pero después de estudiar el Fa y realizar los ejercicios, esos problemas desaparecieron —un verdadero milagro. También mi familia y mi entorno se volvieron más armoniosos.

Al migrar a México tuve un nuevo ambiente de cultivación

Comencé a trabajar en México en febrero de 2023. Sé que no fue una coincidencia, sino parte de los arreglos de Shifu. Estoy profundamente agradecida por ello. Rápidamente me presenté con los practicantes locales y pude comenzar a hacer los ejercicios en grupo.

En Indonesia no había sabido valorar mi entorno de cultivación. Mi casa estaba muy cerca del sitio de práctica, donde se hacía la prácica a diario —tanto en la mañana como en la tarde—, sin embargo, por apego a la comodidad, a menudo prefería quedarme en casa en lugar de participar.

En ciudad de México, en cambio, los sitios de práctica están muy distantes y se requieren largos traslados en transporte público. Además, mi español limitado y mis horarios de trabajo a menudo no coinciden con los horarios de los sitios de práctica. En ocasiones solo puedo hacer parte de los ejercicios antes de salir apresurada al trabajo.

Esto me hizo darme cuenta de que en el pasado tuve un entorno muy conveniente, pero no lo valoré. Ahora, con un ambiente más demandante, me recuerdo que no debo quejarme ni relajarme, sino hacer lo que un practicante debe hacer.

Entiendo que este es un arreglo compasivo de Shifu para ayudarme a ser más diligente y aprovechar cada oportunidad. Los practicantes locales me animaron a dejar el apego a la pereza e invitaron a participar en diversas actividades de rectificación del Fa en México, como marchas, de esclarecimiento de la verdad frente al Consulado chino y apoyando en la venta de boletos de Shen Yun.

Vi Shen Yun por primera vez

En 2023 vi Shen Yun en vivo por primera vez. Me conmovió profundamente y sentí una gratitud inmensa por poder presenciar la obra maestra de Shifu.

Durante la función, una mujer sentada a mi lado se quedó dormida varias veces. La desperté suavemente para que no se perdiera el espectáculo. Abría los ojos unos momentos y volvía a dormirse. En el intermedio, me comentó lo hermoso que era el espectáculo y elogió los trajes coloridos de los bailarines.

Comprendí que quizás Shifu la estaba purificando, incluso mientras dormía, y que aun así recibía la belleza y el significado de la presentación. Muchos en la audiencia estaban visiblemente conmovidos y felices al final. Sentí la inmensa compasión de Shifu y recordé nuestra misión de salvar a los seres conscientes.

Superando la prueba del sentimientalismo (qing) a la familia 

Desde que empecé a practicar Falun Dafa, he recibido muchos beneficios: soy más calmada, más paciente, mi salud mejoró y mi familia vive en mayor armonía. Mis padres no son practicantes, pero siempre han tenido una actitud positiva hacia Dafa.

Mi padre se casó dos veces y mi madre fue su primera esposa. Cuando fui niña él no me cuidó, lo que me llevó a guardar resentimiento hacia él. En 2018 mi padre enfermó de diabetes. Al inicio vivía con mi madrastra, pero cuando se agravó su condición decidió mudarse con mi madre y conmigo. Me sentí agradecida de poder reencontrarme con él y experimentar su cariño.

Sin embargo, esto se convirtió en una prueba de xinxing. Mi padre estaba enfermo y tenía hábitos poco higiénicos, lo cual me ponía impaciente y resentida. A veces pensaba: “Sería mejor no vivir juntos, es demasiado problema”. Él notaba mi actitud seria y una vez me preguntó: “¿No quieres que viva aquí?”. Mi madre me recordó: “Deberías estar agradecida de tener aún a tus padres con vida”.

Un día, me dijeron: “Estás aprendiendo Verdad–Benevolencia–Tolerancia, pero a menudo te enojas”. Las palabras de mis padres tocaron mi corazón. Comprendí que Shifu los estaba usando para recordarme las enseñanzas de Shifu: “…en todos los ambientes hay que ser bueno y benevolente con los demás, y más aún con tus parientes” (Sexta Lección, Zhuan Falun), por lo que empecé a tratar a mi padre con más paciencia y esmero.

El fallecimiento de mi padre me ayudó a soltar los apegos

Cuando me mudé a México, mi padre me animó a no preocuparme por él. Más tarde supe que volvió a enfermar. Le pedí que recitara: “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”. Él me decía que cuando repetía estas frases su dolor se aliviaba y podía dormir bien.

En un tiempo en que descuidé mi cultivación, la salud de mi padre empeoró. Mi hermanastra lo llevó a su casa para cuidarlo. Al principio me sentí molesta y celosa, pero tras leer Zhuan Falun recuperé la calma, y pronto su salud mejoró.

Aun así, descubrí que guardaba resentimiento por el hecho de que mi padre había dejado a mi madre, y también cierto enojo hacia mi hermanastra. Como practicante, comprendí que debía soltar esos apegos. Cuando lo hice, mi relación con ella mejoró.

Un día recibí la noticia de que mi padre había fallecido. Fue el día más pesado y largo de mi vida. Envié pensamientos rectos para eliminar cualquier interferencia que intentara aprovecharse de mi apego al sentimentalismo. Recordar las enseñanzas de Shifu sobre el estado de la muerte me trajo sosiego:

“…en el instante de la muerte no sintieron miedo, justamente lo contrario, todos experimentaron repentinamente una sensación de liberación y un tipo de excitación latente; algunas personas se sintieron al instante libres de la atadura del cuerpo y flotaron ligera y maravillosamente en el aire, e incluso vieron sus propios cuerpos; hay gente que además vio seres vivos de otros espacios, algunos también fueron a tal o cual lugar. Todos hablaron de que en ese instante sintieron una especie de excitación latente y liberación, no tuvieron sensación de sufrimiento” (Novena LecciónZhuan Falun).

Las palabras de Shifu me tranquilizaron y me dieron paz interior.

Recuerdo que una vez, cuando mi padre tenía fiebre y no podía comer, lo invité a ver Shen Yun Zuo Pin conmigo. Durante la escena en que el Creador envía a los dioses a la Tierra para salvar a los seres, mi padre dijo: “¿Sabes? El cielo realmente es así”. Después de eso, mejoró y pudo volver a comer —un verdadero milagro.

Mi padre era conocido como un hombre amable y cordial. Siempre apoyó a Dafa y las actividades de esclarecimiento de la verdad.

Durante este proceso, algunos practicantes me animaron a ser diligente y superar la prueba del qing (sentimentalismo). En tres días recuperé la calma y solté mi aflicción. Cada vez que me invadía la tristeza, recuerdo las palabras de Shifu:

“Cuando atravieses una tribulación verdadera o una prueba, haz el intento; si es difícil de tolerar, trata de tolerar; si parece difícil de realizar y dicen que es difícil, entonces prueba un poco, a ver si realmente va o no va. Si de veras puedes llevarlo a cabo, descubrirás realmente que, ¡tras el verde oscuro del sauce, se hallan resplandecientes flores y otra nueva aldea!” (Novena Lección, Zhuan Falun).

Desde el fallecimiento de mi padre, mi madre ha sufrido tristeza e insomnio. La animé a leer Zhuan Falun. Después de hacerlo, me dijo que se sintió tranquila y pudo dormir bien. Desde entonces, lo estudia todos los días y hace los ejercicios en casa.

Shifu siempre nos guía para permanecer en el camino que Él ha dispuesto. Estoy profundamente agradecida por su compasión y por el apoyo de mis compañeros practicantes.

Lo anterior es mi experiencia personal de cultivación. Si algo de lo que he compartido no está de acuerdo con el Fa, por favor señálenmelo con benevolencia.

¡Gracias, Shifu!
¡Gracias, compañeros practicantes!

Los artículos en los que los cultivadores comparten sus entendimientos generalmente reflejan la percepción de un individuo en un momento determinado en función de su estado de cultivación, y se ofrecen con el espíritu de permitir la elevación mutua.