Cultivándome cuando los intereses personales están en juego

(Minghui.org) Tengo 70 años. Durante mis más de 20 años de cultivación en Falun Dafa, Shifu ha purificado mi cuerpo, eliminado mis enfermedades y limpiado mis pensamientos. Nunca he conocido a Shifu, pero siento que ha estado conmigo, protegiéndome y dándome consejos constantemente. Ha puesto todo su corazón en los practicantes de Dafa. Es Shifu quien me transformó de una persona egoísta a una altruista. Estoy infinitamente agradecido a Shifu y por la gracia ilimitada y la poderosa virtud de Dafa. Creo que la única manera de corresponderle es cultivándome bien y ayudando a salvar a más personas.

Aquí me gustaría informar a Shifu y compartir con los compañeros practicantes acerca de dos experiencias recientes en mi cultivación.

La chaqueta de plumas ha vuelto

A mediados de septiembre de 2022, llevé dos chaquetas de plumas antiguas a la tienda de ropa y les pedí que me hicieran una nueva con las dos viejas. Ambas estaban rellenas de plumón blanco y eran de buena calidad. La esposa del dueño sacó el relleno de las dos chaquetas y lo pesó. Les pagué más de 300 yuanes y quedamos en recogerla en 10 días.

Después de 10 días, tenía algunos asuntos que atender y no recogí la chaqueta. Era día festivo. Cuando fui a buscarla, la tienda de ropa estaba cerrada por vacaciones. Después de las vacaciones, volví a recogerla y vi que la fachada había cambiado y el letrero de la tienda de ropa había desaparecido. Me dio un vuelco el corazón. ¿Se habría llevado la esposa del dueño de la tienda las chaquetas y se había ido? Llamé al número que aparecía en el ticket de recogida, pero no me contestaron. En ese momento, estaba seguro de que las chaquetas habían desaparecido. Pensé: «Las dos chaquetas y el arreglo sumaron 700 u 800 yuanes, ¿y se perdieron así como así? ¿Debería denunciarlo a la policía? Sería bastante problemático, y por 700 u 800 yuanes, a nadie le importaría. Aunque encontrara a la esposa del dueño, no sería bueno para ella».

Cuando hablé con ella antes, me enteré de que su familia vivía en una zona rural y que su vida no era fácil. Le aclaré la verdad y renunció al Partido Comunista Chino (PCCh) y sus organizaciones juveniles. Quizás realmente tenía algunas dificultades. Soy practicante y debo pensar primero en los demás al actuar. Pensé: "¡Olvídalo! Si están perdidos, déjalos estar".

Nada de lo que les sucede a los practicantes es accidental. Así que, al regresar a casa, me miré a mí mismo con calma. ¿Por qué había sucedido algo así? ¿En qué me había equivocado? Tras buscar y buscar, lo encontré. Era como lo que decían los ancianos sobre ser derrochador y destructivo. Esas dos chaquetas aún se podían usar, pero yo quería destruirlas y de verdad lo hice. Gasté más de 300 yuanes además. ¿No fue un derroche desmesurado? Estaba completamente equivocado. Esta fue una lección. De verdad que no puedo desperdiciar tanto en el futuro. Aunque todavía sentía algo de arrepentimiento en mi corazón, poco a poco lo dejé ir.

Más de dos semanas después, al pasar de nuevo por la tienda, levanté la vista y vi el letrero de la tienda de ropa. Me quedé bastante desconcertado. Pensé: "Voy a casa a buscar el ticket de ropa para ver si puedo recuperar las chaquetas". En cuanto entré, vi mi chaqueta de plumas colgada. Le pregunté a la esposa del dueño: "¿Te has mudado de tienda?".

Ella lo negó rotundamente, solo dijo: «Obtener una nueva licencia me costaría más de 1000 yuanes». No dije nada más. Me alegré de que me devolvieran mi chaqueta. Las cosas que me pertenecen no se pierden.

El dinero que le presté a un vecino hace 12 años regresó

Mi vecina y yo llevamos muchos años interactuando, ayudándonos mutuamente. En 2011, me contó que su familia había sufrido un accidente y me pidió prestados 15.000 yuanes. Sin dudarlo, saqué el dinero del banco y se lo presté, sin pedirle un pagaré. Ni siquiera me planteé si podría devolverme el dinero, a pesar de que no tenía pensión y vivía de una prestación por bajos ingresos. Solo pensé en ayudarla con su emergencia. Vivía con su madre, que tenía más de 80 años y una pensión, lo que les bastaba para sobrevivir.

Un año después, mi vecina me dijo: «Había ahorrado suficiente dinero para pagarte, pero mi madre lo usó para ir al médico». Pasó otro año, y me dijo: «Volví a ahorrar suficiente dinero, pero mi hijo lo usó». Más tarde, empezó a hacer negocios, y cuando me vio, me dijo que le había prestado dinero a alguien y que me lo devolvería cuando recuperara el suyo.

Así que, después de algunos años, sentí que ella realmente no quería devolverme el dinero. Al principio, me sentí molesto y pensé: "¿Cómo puede ser así? No ha dicho ni una sola palabra sincera. No debe estar dispuesta a devolverme el dinero". Sentí que se estaban aprovechando de mi confianza y que me estaban intimidando. Ni siquiera quise hablar con ella cuando la volví a ver.

Más tarde comprendí que, como practicante, debía seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y siempre priorizar a los demás. Quizás no me devolvió el dinero porque realmente le costaba hacerlo. Si tenía dinero y simplemente no quería devolvérmelo, quizá le debía en una vida anterior y ya se lo había devuelto. Si ninguno de los dos casos fuera cierto, entonces el principio de "sin pérdida no hay ganancia" que menciona Shifu en Zhuan Falun rige a las personas. También fue una prueba de mi apego a los intereses personales. Como cultivador, no debería ser como la gente común. Así que dejé pasar el asunto.

Cuando la volví a ver, me dijo que me devolvería el dinero en un plazo determinado. Le dije: «Ya no lo quiero». Más tarde, volvió a ocurrir lo mismo. Me prometió una fecha, pero no me lo devolvió. Esto ocurrió más de diez veces. Sin embargo, lo dejé pasar por completo y no volví a pensar en ello. Cuando volví a verla, le hablé con normalidad, como si nada hubiera pasado. Habían pasado más de diez años y nunca la critiqué.

Durante el Año Nuevo Chino de 2024, ella vino a mi casa con un paquete envuelto en papel de periódico. Contenía 18.700 yuanes. Vino a devolverme el dinero. Le dije: "Ya no lo quiero". Pero insistió. Cuando le pregunté por qué tanto, dijo que incluía los intereses de los últimos 12 años. Le dije que no quería los intereses y que apreciaba su intención. Ella no estuvo de acuerdo e insistió en dejármelo todo. Después de que se fue, pensé: "Su madre falleció y ahora no tiene pensión, vive solo de su prestación por bajos ingresos y lleva una vida difícil. Si le devuelvo todos los intereses, no lo aceptará. Entonces déjame devolverle 2.000 yuanes". Cuando se los di, los aceptó felizmente.

Previamente les había aclarado la verdad sobre Falun Dafa a ella y a su hijo, quienes renunciaron al PCCh. Sin embargo, aún albergaba ciertas barreras contra Falun Dafa en su corazón. Por eso, aproveché la oportunidad para darle los 2000 yuanes para aclararle más la verdad. Entonces lo comprendió por completo. Me sentí agradecido de que ya no tuviera dudas persistentes sobre Falun Dafa y de que yo pudiera liberarme del apego al interés personal. Al liberarme del apego, gané tras perder. También experimenté la extraordinaria naturaleza de Dafa a través de esto.

Creo que esto fue el resultado del refuerzo de Shifu, y también una prueba de mi apego al interés personal. Cultivaré firmemente este corazón mío, me cultivaré y me mejoraré continuamente en Dafa, eliminaré la mentalidad de egoísmo e interés propio, y regresaré a casa con  Shifu.