Recitar el Fa me ayudó a superar la persecución financiera

(Minghui.org) ¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Hace unos tres años, las cosas no me iban bien. No encontraba trabajo, mi familia dejó de enviarme dinero y, cuando abrí un pequeño negocio, fracasó y perdí todo el dinero. Mi salud no era buena y no paraba de toser y enfermarme. Si me quedaba en casa, los síntomas desaparecían. Era muy extraño. Tuve una reacción alérgica a un pegamento en el trabajo. Seguí haciendo las tres cosas y miré hacia dentro, pero la situación se repetía y no tenía solución. Sentía que el Shifu seguía a mi lado, pero no podía encontrar la razón fundamental por la que no podía encontrar un trabajo para ganarme la vida, ni siquiera el más común, como trabajar de cajera en un supermercado. Lo peor era la tortura mental de ser un fracaso entre mis parientes y primos, que eran ricos y exitosos.

Sentía que mi cultivación debía estar estancada en algún punto, así que me decidí memorizar el Fa. Pero mi mente no estaba preparada para memorizar Zhuan Falun, así que decidí estudiar una enseñanza más corta en Escrituras esenciales para mayor avance (III). En este jinwen, me iluminé a una sola cosa: necesito encontrar y cambiar mis nociones, porque las nociones son la fuente de los apegos.

El Shifu dijo:

“Lo que, es más, los Dafa dizi se están cultivando en esta así llamada sociedad materialista que rebosa de tentaciones, así que es aún más difícil –pero aún más importante– cambiar esas nociones.” (Cuanto más se acerca el final, más diligentes deben ser, Escrituras esenciales para mayor avance (III)).

Solo entendí un punto muy pequeño del inmenso significado de esta escritura, pero Shifu me dio sabiduría e iluminación a través de asuntos familiares. Poco a poco, reconocí mis propios conceptos erróneas sobre el dinero, el trabajo y el amor. Me impactó darme cuenta de que mis nociones me hacían confundir el amor, el dinero, la fama y la cultivación. Todo se volvía extremadamente confuso y complicado.

Descubrí que tenía las siguientes nociones erróneas que se desviaban del Fa: dar atención lo material y lo superficial en lugar de al amor y a la verdadera benevolencia.

Desde pequeña, mi madre siempre usaba cosas materiales para demostrarles cariño a sus hijos, pero no estaba presente para enseñarnos. A menudo culpaba a mis padres por ser fríos, por solo darme dinero y por no cuidarme como otros padres lo hacen. Aunque amo a mi madre, sigo amargada. A menudo se resentía cuando sus hermanos se aprovechaban de ella, pero ella seguía apoyándolos económicamente. Empecé a mirar dentro de mí. Me di cuenta de que yo también tenía ese apego. A menudo usaba cosas materiales para complacer a mis amigos, pensando que eso significaba cuidar de quienes me rodeaban.

Cuando me di cuenta de esto, Shifu inmediatamente me puso una prueba para ayudarme a mejorar. Una amiga de la infancia que vivía en Inglaterra dijo que me visitaría en Toronto. Desde pequeña, me sentía muy triste y a veces incluso resentida con esta amiga porque a menudo se aprovechaba de mi bondad, se llevaba mis pertenencias y siempre tenía que pagarle cuando salíamos. Aunque éramos muy cercanas, me di cuenta de que nunca me importaron realmente sus tribulaciones. Me dije a mí misma que si aún le debía algo, con gusto se lo pagaría cuando nos viéramos. En cuanto me di cuenta de mis propias deficiencias, la prueba desapareció. Me envió un mensaje diciendo que cambiaba su horario y que no vendría a Toronto. Le escribí con sinceridad para preguntarle sobre su vida; de verdad me importaba y le deseé lo mejor. Nuestra relación se resolvió. También tengo una mejor relación con mi madre.

Ahora puedo entender los sentimientos de mi madre. No se trata del dinero, pero nunca me importaron sus sentimientos. Nunca aprendí a escuchar de verdad las tribulaciones de la gente ni a preocuparme de verdad. Solo veía mi propio sufrimiento. Si mis ingresos se estabilizaran, mi madre tendría paz en su mente.

Gracias a ese pensamiento recto, Shifu me ayudó a encontrar trabajo como intérprete. Sin querer, presioné el botón de "Solicitar" y me llamaron para una entrevista. Aprobé algunos exámenes y me contrataron. Luché mucho para encontrar un buen trabajo, e incluso trabajé con un trabajador social para perfeccionar mi currículum y conseguir recomendaciones, pero no recibí ni una sola respuesta. Ahora, sin querer, encontré trabajo. Entendí que era la compasivo arreglo del Shifu después de deshacerme de esa noción errónea.

Una experiencia desgarradora y profundamente angustiosa

Cuando por fin conseguí trabajo y todo parecía mejorar, mi esposo me contó que había estado apostando y había pedido prestado un montón de dinero a amigos para comprar bitcoins. Debía muchísimo dinero, había agotado el límite de todas nuestras tarjetas de crédito y planeaba suicidarse. Usó el dinero que le envió mi familia para pagar la deuda del negocio la última vez, para comprar bitcoins y lo perdió todo. La deuda anterior se sumó a muchas otras deudas. Dijo que pensó en morir porque ya no podía verme. Esta situación llevaba muchos años, pero hace poco llamó a la línea de ayuda para el suicidio y su mejor amigo le aconsejó que me contara la verdad.

Cuando escuché esto por primera vez, le dije con calma que solo era dinero y que habría una solución. Pero cuanto más lo pensaba, más traicionada y triste me sentía porque me mentía repetidamente. Sentía que perdería prestigio si volvía a pedirles dinero a mis padres. Para mí, mentir es una gran traición. Tengo muchas características taoístas y siempre me concentro en la verdad, así que ser engañada de esa manera me desgarraba el corazón. Me preguntaba por qué tenía que sufrir así. Parecía que, después de mudarme a Canadá, perdía dinero continuamente. Me engañaron, fracasé en los negocios y tuve cada vez más tribulaciones financieras. Ahora que tenía otra deuda enorme, me preguntaba si tendría que vivir así de ahora en adelante. Calculé la deuda que debía pagar con mi escaso salario y me sentí aún más triste.

De niña, mi situación económica era cómoda. De mayor, aunque no tenía grandes ambiciones, mi vida estaba libre de preocupaciones financieras. Me preocupaba mi reputación y quedar mal con mi familia. Era muy difícil aceptar estar tan endeudada, y más aún que parecía que nunca terminaría.

Cerré la puerta de mi habitación y leí el Fa. Lloré mientras leía durante tres días. De repente, me di cuenta de que esto sucedía muchas veces y cada vez empeoraba. La deuda seguía creciendo, y también sufría constante persecución financiera, hasta el punto de quedarme sin dinero. Me di cuenta de que siempre había usado métodos de la gente común para resolver los problemas, y que todas las veces anteriores había sido una buena persona entre la gente común. Esta vez necesitaba actuar conforme al Fa.

Tras tranquilizarme, decidí no usar más métodos comunes para resolver el problema. No llamé a casa para pedir dinero a mi familia, ni calculé cuánto de mi salario debía aportar cada mes para pagar la deuda de mi esposo. En cambio, me concentré en dejar atrás el resentimiento y la envidia hacia la cómoda vida de mi familia. Cuando estaba en el Fa, mi compasión creció. Me volví menos egoísta y más considerada con los sentimientos de mi madre. Vi cuánto debieron sufrir y preocuparse mis padres al tener que enviar dinero a su hija adulta con tanta frecuencia.

Durante esos tres días, estudié el Fa y tuve muchos entendimientos claros sobre lo que debía hacer. Necesitaba anular los planes de las viejas fuerzas. Quien tuviera deudas de yeli debía saldarlas él mismo. Soy practicante de Falun Dafa, y esta vida es para salvar a la gente y cultivarme, no para venir a este mundo humano a pasar la mayor parte del tiempo trabajando para pagar deudas. Le dije sinceramente a mi esposo que ya no podía llamar a casa para pedirle dinero a mi familia. Solo podía estar a su lado. Le dije: Me quedaría con él y sería una esposa recta. No dejaría que pasara hambre ni frío. Sin embargo, el necesitaba pagar esta enorme deuda que había creado, usando su salario para saldarla gradualmente.

Mi esposo me dio las gracias. Dijo que se sentía aliviado cuando habló y que tenía suerte de que siempre lo comprendiera y no lo abandonara. No quiso hablar para que yo pudiera ayudarlo a pagar su deuda. En ese momento, mi mente estaba muy tranquila porque entendí claramente que ganar dinero para pagar la deuda de mi esposo no podía resolver la raíz del problema y que tenía que confiar en el Fa. También le conté muchas cosas y le aconsejé que escuchara las conferencias del Shifu.

Cuando confiamos en el Fa para actuar, las cosas cambian rápida e inesperadamente. Como esta vez ya no pagaba a escondidas sus deudas de juego y mejoré en mi cultivación, el problema de mi esposo con el juego finalmente se resolvió. Acudió a un especialista. Le aconsejaron que dijera la verdad. Mi esposo se lo contó a sus dos hermanas y ellas lo ayudaron a pagar gran parte de la deuda. Tras descubrir que ya había pagado una deuda enorme, tuvieron una opinión muy diferente de mí. Hace unos años, cuando mi esposo tomó el dinero para comprar bitcoins, solía enojarse, maldecía constantemente y me gritaba en público; sin embargo, yo seguía respetándolo a él y a sus padres sin decir una palabra. Creo que les mostré a las hermanas de mi esposo lo buena que es una practicante de Dafa.

Después de este suceso, mi esposo y sus hermanas recompusieron su relación. Mi esposo solía decir que sus hermanas eran egoístas. Esta vez, sin pensarlo, gastaron mucho dinero para ayudarlo, y él las quería aún más.

Después de solo tres días de actuar según mi entendimiento de los principios de Dafa, la situación cambió rápidamente. La gran deuda se resolvió, mi esposo decidió dejar de jugar y pagó sus deudas personalmente cada mes. Ya no me maldecía ni me gritaba. Iba a ver a un consejero dos veces por semana. Ya no maldecía mientras conducía y estaba más feliz. A menudo, usaba pequeños detalles para hablar con mi esposo sobre el yeli, las ganancias y las pérdidas, y la relación entre la virtud y el yeli acumulado a lo largo de muchas vidas. Él escuchaba atentamente. Esperaba poder cambiar gradualmente el pensamiento ateo de mi esposo.

Al mirar mi pasado, veo que muchos de los apegos humanos que alimentaba influyeron en el comportamiento de mi esposo. Realmente no sabía cómo cuidar ni amar a alguien. Solo sabía usar cosas materiales y regalos para demostrar mi amor. Esto se reflejaba en todos los aspectos de mi trato con mi esposo, con los practicantes y con mis amigos. Si usamos cosas materiales para cuidar a alguien o sufrimos una pequeña pérdida económica, no podemos saldar nuestras deudas de yeli de muchas vidas ni escapar del nivel de la gente común. Al contrario, sentían que yo tenía un corazón frio. Comprendí que esta frialdad y crueldad no estaban de acuerdo con los principios de Dafa. El verdadero amor y la benevolencia deben ser cálidos, indulgentes y armoniosos.

Pensé que no estaba apegada a la fama y la fortuna, pero en el futuro seré más humilde al mirar las cosas.

Solía odiar la riqueza y enriquecerme. De joven, creía que el éxito en los negocios arruinaba la felicidad de mi familia. Tener mucho dinero hacía que mi padre descuidara a la familia, y mi madre siempre trabajaba para ganar dinero y me descuidaba a mí. Después de empezar a practicar Falun Dafa, pensaba que los practicantes ricos se daban demasiados gustos, lo cual fortalecía su naturaleza humana.

Así que cuando me estafaban o apenas tenía dinero, pensaba que esto era bueno. No tener mucho dinero me permitía cultivar mi adicción a las compras, renunciar a las cosas materiales y vivir una vida más sencilla. Cuando veía a mi familia siempre divirtiéndose y disfrutando de la vida, pensaba que las cosas materiales les hacían aún más ilusos. Debido a mi noción de que no tener demasiado dinero era bueno para mejorar mi xinxing, las viejas fuerzas se agarraron firmemente a esta noción y crearon repetidamente interferencias y lo hicieron cada vez más difícil. Mi búsqueda de una vida pacífica en este mundo humano es la razón por la que las viejas fuerzas me impusieron todas las tribulaciones. Estaba ocupada resolviendo las situaciones de mi persona común, en lugar de dedicar tiempo a salvar a la gente.

Mediante el proceso de mirar hacia adentro y memorización del Fa, pude mejorar mi cultivación y corregir mis pensamientos por completo. Ya no actuaba como una buena persona en apariencia. Pude rectificar mis nociones sobre el dinero y las finanzas según Dafa. Pude liberarme de la esclavitud del dinero y las cosas materiales, así que las viejas fuerzas ya no tenían excusa para perseguirme económicamente.

Rápidamente mis finanzas parecieron volver a la normalidad. Antes de necesitar el dinero, ya lo tenía, ni mucho, ni poco, milagrosamente suficiente para vivir, estudiar y participar en proyectos de Dafa. Mi esposo recibió un ascenso y, milagrosamente, dos aumentos de sueldo ese mismo año. Pudo pagar sus deudas de juego por sí solo.

Durante el último año, mi mente se volvió gradualmente más tranquila y ya no me preocupa el dinero. Obtuve mi certificado de estilista y encontré un buen trabajo. Cuando estaba en la escuela, Shifu me dio la sabiduría para aprender muy rápido. No les oculté lo que aprendí a mis amigos, sino que lo compartí todo con ellos. Aunque el ambiente es complejo y difícil, la mayoría de la gente en la escuela sabía que practicaba Falun Dafa y decían que era muy bondadosa y de buen corazón. Algunos comprendieron lo malvado que es el comunismo, otros fueron a ver Shen Yun y mi profesor renunció al Partido Comunista Chino. También dejé atrás el resentimiento hacia mis padres y nuestra relación mejoró mucho.

Eliminando nociones sobre el éxito y la fama y encontrando un trabajo

En cuanto al trabajo, pasé de un extremo a otro durante muchos años. Empecé odiando a la sociedad y solo quería hacer un trabajo sencillo y humilde para ganar unos dólares e irme a la montaña a vivir sola. Todo se debe a mi miedo a la fama y a ser envenenada por la sociedad común. Luego cambié a la lucha por el éxito, y pensé que el éxito en la sociedad significaba validar Dafa. De hecho, estaba persiguiendo la fama.

Este año, comencé a memorizar lo que dijo el Shifu sobre cultivarse entre la gente común, ya que esto es para que el espíritu principal obtenga verdaderamente el gong, que es la parte de "Quien refina gong es quien obtiene el gong" (Octava Lección, Zhuan Falun). Entiendo con mayor claridad que ir a la escuela y trabajar en la sociedad es el mejor entorno para mejorar y validar el Fa. Esta vez, estoy decidida a encontrar un trabajo.

En cuanto entiendo Dafa, la prueba llega de inmediato. Después de terminar un año de formación en la escuela de comercio, mis profesores elogiaron mi talento y me aconsejaron que emprendiera mi propio negocio. incluso me enseñó cómo hacerlo sin prácticas y conseguir antes una licencia. También me aconsejo que no trabajara en tiendas de lujo, ya que en esos lugares me explotarían. Le dije que no haría nada deshonesto para obtener la licencia.

Desde muy joven, mi familia se dedicó al negocio, y yo también abrí pequeñas tiendas de zapatos y cosméticos. Siempre me liberé de la jornada laboral corporativa de 9 a 5 y sus estrictas normas. Trabajar para alguien más nunca me gustó mucho. Cuando el profesor me dijo que podía ser mi propio jefe y no tener que seguir las órdenes de nadie, me emocioné muchísimo. Esta vez, la prueba del xinxing me ofrecía cosas tentadoras como tomar atajos, ganar mucho dinero, ser mi propio jefe, que todo saliera como yo quería... justo lo que había estado buscando.

Pero esta vez, sin pensarlo, busqué trabajo como aprendiz para superar el miedo a encontrar trabajo. Cada vez que solicitaba un puesto en una estética, quería ver cómo era el sitio en internet. Temía que una estética de alta gama no me dejara peinarme, y que un lugar de mala calidad desperdiciara mi talento. El sentimiento de inferioridad, el miedo a no tener tiempo para cultivarme mientras trabajaba a tiempo completo, todo afloro para que pudiera deshacerme de ellos. Esta vez, estudié bien el Fa, así que pude corregir rápidamente mis pensamientos: simplemente dejar que las cosas sucedieran con naturalidad, sin ninguna búsqueda. Si necesito hacer algo o salvar a alguien, Shifu lo arreglara. Ya no miro las críticas en internet ni presento solicitudes de acuerdo con mi experiencia.

En menos de dos meses, encontré trabajo rápidamente. El lugar de trabajo estaba cerca de casa y era fácil de llegar. Mi jefe y orientador eran realmente amables y simpáticos. Tanto los superiores como los mentores me enseñaron el oficio y me apoyaron. Era un lugar lujoso y usaban los productos más caros. Sin embargo, mi orientador no me pedía que hiciera mucha limpieza; yo ayudaba un poco y me quedaba atrás para verlo cortar el cabello a los clientes. Me pagaban y también aprendí el oficio; mi jefe hacía la mayor parte del trabajo duro y yo estaba a su lado y aprendía.

Así que pasé la prueba. No fui exigente, sino que seguí un camino muy recto según los principios del Fa que entendía. El mes pasado, me dije a mí misma que si encontraba trabajo, terminaría de escribir este artículo. El Shifu dijo:

“Decimos que lo bueno o lo malo surgen de un pensamiento de la persona.” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Nuestros pensamientos y apegos humanos provienen de las nociones que nos acompañaron durante muchas vidas. Es como otra fina capa de nuestra piel. Pero con Dafa, nada es imposible.

Durante estos 7 años de altibajos, Shifu siempre está a mi lado. Me ha cuidado para que nunca me quedara sin dinero. Nunca tuve que cancelar mi suscripción a La Gran Época. Shifu esperó pacientemente a que mejorara, me enseñó pequeñas lecciones y luego me puso una gran prueba cuando estuve lista. Con su guía, puedo liberarme de mis nociones humanas.

Una iluminación que obtuve al recitar las Escrituras de Shifu cambió mi vida. Sin Dafa, ¿puedo soportar estas tribulaciones sin amargura ni resentimientos? ¿Puede mi esposo tolerar su propia culpa? ¿Puede nuestra familia seguir unida? Al recitar el Fa, puedo encontrar la raíz del problema y eliminar mis nociones humanas; entonces, los apegos son solo cabos sueltos que cortar. Mis relaciones con todos mejoran a medida que utilizo un corazón puro y benevolencia. Con Dafa, no solo superé las tribulaciones y la persecución de las viejas fuerzas, sino que también he cultivado una benevolencia aún mayor. Mi campo está lleno de cálida compasión y es un estado celestial en este mundo humano.

Gracias Shifu por tu inmensa compasión.
Gracias compañeros practicantes.

Heshi

(Presentado en el Fahui de Canadá 2025)