(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa con mis padres en la adolescencia y he continuado hasta el día de hoy. Bajo la protección compasiva de Shifu, he seguido madurando en el Fa.
Shifu dijo:
“Algunas personas sostienen que solamente es necesario tener fe para ir al Cielo. Tener fe es sólo una base. El entendimiento de mucha gente se detiene en el significado superficial de las palabras. Ellos dicen: “Mientras yo tenga fe, seguramente iré al Cielo cuando muera”. Déjame decirte que tú no podrás ir allá. ¿Por qué no? Piensa sobre ello: ¿qué es la fe verdadera? Tú simplemente estás diciendo con tu boca que tienes fe, pero en tu corazón no tienes realmente fe. ¿Por qué digo esto? Es porque cuando tú realmente tienes fe, tus acciones deben coincidir con tus palabras” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Europa).
Aunque había estudiado esta lección muchas veces, no la tenía realmente en mi corazón. Cuando recientemente estudiaba el Fa, este pasaje me llamó la atención. De repente, pensé que compartía los mismos pensamientos que los creyentes de aquí: si creías en él, podrías ir al cielo. Por lo tanto, creí que cultivar Dafa era como tener un seguro. Pensaba que había estado practicando durante muchos años y que había pasado de una comprensión superficial a una comprensión racional. Sin embargo, si solo conocía los principios del Fa, pero no seguía las enseñanzas, en realidad no tenía fe en él.
Cuando pude seguir las enseñanzas, fue solo porque acepté esa parte. Esto se debió a que mis apegos me habían impedido mejorar. Me di cuenta de que sería una pérdida de valioso tiempo de cultivación si no lograba unificar el estudio con mis acciones. Después de estudiar el Fa durante mucho tiempo, seguía actuando a mi manera, lo cual no era señal de diligencia. Desde que entendí esto, me he recordado constantemente ser coherente con mis palabras y acciones.
Hace poco tuve una prueba de xinxing. La profesora de uno de mis cursos se graduó de una prestigiosa universidad extranjera y se pasaba la mayor parte del tiempo hablando de sus estudios en el extranjero. El tiempo dedicado al contenido del curso fue muy limitado y, debido a la organización caótica de las actividades en clase, no pudimos aprender mucho. Las dos primeras semanas fueron así. Pensé en esperar a la tercera semana para ver cómo iba, pero la tercera semana siguió así y no aprendí nada.
Cuando tuve que hacer las preguntas del examen después de clase y ver mis calificaciones, empecé a sentirme ansiosa. Si no había aprendido lo que debía aprender en clase, necesitaba encontrar tiempo para aprender por mi cuenta después de clase. Estaba muy enojada mientras buscaba un tutorial para aprender por mi cuenta. Me quejaba constantemente con mi esposo (un compañero practicante). Un día, una voz me dijo: "¿Por qué no entiendes a la profesora?". Inmediatamente pensé: «Sí, ¿por qué miro hacia afuera? ¿Por qué culpo a la profesora? ¿Acaso Shifu no nos pidió que miráramos hacia dentro? Ahora que lo pienso, Shifu debió iluminarme».
Empecé a pensar en eso, pensando que la profesora definitivamente no quería causar caos, que tal vez no tenía experiencia docente, o que tenía esa personalidad, etc. La ira en mi corazón disminuyó gradualmente en un 80%. Me preguntaba cuál era el motivo de mi enojo. ¿Por qué me hizo perder el tiempo? ¿Por qué no daba clases sistemáticas como yo creía que debía y no aprendí nada? Pero todos estos pensamientos partían del "yo" y de que debía considerar a los demás antes que a mí misma en cualquier situación. Eso era egoísmo. Los principios del viejo universo son egoístas. Para cuando me di cuenta de esto, toda mi ira se había desvanecido. Sí, si hubiera podido abordar este asunto con amabilidad y paciencia en la primera clase, sin mirar hacia afuera ni dejarme llevar por la ira, tal vez habría tomado la iniciativa de buscar un tutorial para aprender después de la primera clase.
Aunque encontré este problema y aprendí que estaba mirando hacia afuera y siendo egoísta, sentí que la causa de este incidente parecía ser otra. Tenía un apego que no quería admitir. Al profundizar, vi mi envidia. Como esta profesora se doctoró en una universidad a la que yo realmente quería ir, habló mucho en la primera clase sobre lo buena que era esa universidad, lo adinerada que era, etc., y fue esto lo que me disgustó, y comencé a criticar sus preguntas, es decir, a mirar hacia afuera. Este resentimiento se debía a mi envidia. Me di cuenta de que esa era la raíz de todo el problema. Gracias a la iluminación de Shifu, muchos de mis apegos quedaron expuestos.
Cuando descubrí mi envidia y pensé en las enseñanzas de Shifu, estos malos pensamientos nunca volvieron a mi mente. Me tomé el tiempo de seguir el tutorial y estudiar por mi cuenta. Esta semana, hubo algunos pequeños problemas. Hubo problemas en la clase de la profesora, pero esta vez no tuve pensamientos negativos sobre ella y esperé pacientemente a que terminara. Participé activamente en las actividades de la clase.
Después de reflexionar sobre mi interior para mejorar mi xinxing, finalmente pasé la prueba de xinxing con éxito.
Los cultivadores se enfrentarán a todo tipo de problemas, pero mientras crean verdaderamente en Shifu y Dafa, y cumplan fielmente lo que Shifu les pide, podrán resolver cualquier problema que se les presente, y las cosas malas pueden eventualmente convertirse en cosas buenas. Así que, como cultivador, poder obtener Dafa es una verdadera suerte.
Al principio de mi cultivación, no entendía la importancia de cultivar el xinxing, por lo que mis relaciones familiares eran tensas. Poco a poco comprendí lo que Shifu decía sobre reflexionar sobre mi interior y comencé a exigirme hacer un buen trabajo. Cuando pensé en los demás con anticipación, mi familia se armonizó y no hubo más conflictos. Todo esto se debe a que no solo debemos centrarnos en estudiar el Fa, sino que debemos ser capaces de ponerlo en práctica, y eso es la verdadera creencia y cultivación.
Aunque todavía hay muchas cosas que no he hecho bien, en el futuro me esforzaré por seguir el Fa enseñado por Shifu para mejorar mi xinxing, cultivarme, validar Dafa con mis acciones y compartir con más personas la belleza de Dafa.
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