Verdad-Benevolencia-Tolerancia cambiaron mi vida

(Minghui.org) Me encantaba la caligrafía y la pintura desde que era niña, así que decidí ser artista cuando creciera. Durante décadas perseguí la fama y el dinero y me agoté física y mentalmente. Después de que empecé a practicar Falun Dafa, aprendí que los seres humanos están aquí para un propósito más elevado, y no para hacerse ricos o famosos.

Cuando leí la conferencia de Shifu a los practicantes que trabajan en las artes, comprendí la mentalidad que debe tener un artista: para expresar compasión a través de nuestras obras de arte, primero debemos purificar nuestras mentes. Si creamos nuestras obras con apego a la fama y a las ganancias, las sustancias negativas que emitimos dañan a los demás. Cuando abandonamos nuestro egoísmo y deseamos ayudar a los demás, nuestras obras están llenas de compasión y tienen el poder de salvar a la gente. Esto significa que los estándares para los cultivadores son muy altos. Todo lo que hacen los practicantes de Falun Dafa tiene sentido, por eso es importante que nos cultivemos bien.

Falun Dafa también abrió mi sabiduría, y mis habilidades mejoraron mucho. Sé que mis habilidades son otorgadas por Shifu. Cuando pinto, me exijo estrictamente y tomo a Shen Yun como ejemplo. Cada cuadro que pinto debe ser de gran calidad y estar lleno de compasión y belleza. A veces vuelvo a pintar un cuadro varias veces antes de estar satisfecha. Quiero que cada cuadro irradie energía positiva y ayude a salvar a los seres conscientes.

Antes de empezar a practicar Falun Dafa sólo pensaba en cómo hacerme famosa y ganar dinero. Cuando empecé a practicar, me desprendí de estos apegos y gané más. Pasé de ser egoísta y egocéntrica a convertirme en alguien que pone a los demás en primer lugar. Verdad-Benevolencia-Tolerancia me guiaron y me ayudaron.

Me gustaría compartir contigo mi camino de cultivación de veinte años.

Encontrando Falun Dafa

Tenía 35 años en 2004 cuando por casualidad conocí a dos practicantes de Falun Dafa. Su amabilidad y rectitud me conmovieron profundamente. Dijeron que habían tenido que abandonar su ciudad natal porque Falun Dafa estaba siendo perseguido, y aclararon la verdad sobre la persecución. Mientras hablaban, las mentiras que me había inculcado el Partido Comunista Chino (PCCh) fueron eliminadas. Admiraba su determinación.

Nos hicimos buenos amigos y pronto empecé a practicar Falun Dafa. Aprecié mucho esta oportunidad y leía el Fa (enseñanzas) siempre que tenía tiempo. Mi mente y mi cuerpo experimentaron grandes cambios. La enfermedad gástrica, la insuficiencia de riego sanguíneo al cerebro y el dolor de espalda que me preocuparon durante años desaparecieron en un mes.

Aunque no había aprendido a hacer los ejercicios, Shifu eliminó las sustancias negativas de mi cuerpo. Experimenté personalmente la naturaleza milagrosa de Dafa y la felicidad de estar libre de enfermedades. Realmente no hay palabras para expresar mi gratitud al benevolente y gran Shifu.

Mientras me cultivaba, comprendí que el verdadero propósito de la vida es asimilarme a los principios universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y volver a nuestra verdadera naturaleza. Al seguir estrictamente las normas de Falun Dafa, sentí compasión por mi suegro en lugar de resentirme con él como en el pasado. Mi hermano y mi cuñada no querían cuidar de él, así que vivió con nosotros durante veinte años. A menudo recitaba «Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno». Se benefició mucho de Dafa y falleció cuando tenía 95 años.

Cuando tengo conflictos con otros, también soy capaz de mirar hacia dentro para ver qué apegos los causaron. A medida que mejoraba mi xinxing, mi familia se volvía armoniosa.

Mis vecinos, parientes y amigos fueron testigos de mis cambios positivos después de que empecé a practicar y todos sabían que Falun Dafa es bueno.

Rectificarme a mí misma

Antes de empezar a cultivarme, pensaba que era una buena persona. En apariencia, parecía amable y tenía autocontrol, por lo que mucha gente me elogiaba. Esto infló mi ego.

Hace poco pasé por una experiencia desgarradora que me ayudó a deshacerme de muchos de mis apegos. Después de empezar a practicar, medí las cosas con los principios de Falun Dafa y comprendí lo que motivaba mis pensamientos y mi comportamiento. Todos mis apegos y defectos, como el egoísmo, el egocentrismo, la avaricia, etc., estaban ocultos por mi superficie altisonante. Vi mis defectos cuando comparé mi comportamiento con los principios del Fa. Lo que es verdaderamente bueno y malo no puede medirse con los criterios morales modernos.

Shifu dijo: «Por ejemplo, una botella llena de cosas sucias, cerrada con una tapa ajustada, al ser arrojada al agua se hunde inmediatamente hasta el fondo. Tú vuelcas las cosas sucias que tiene adentro y cuanto más vuelcas, tanto más alto flota la botella; al vaciarla por completo, la botella sube flotando completamente hasta la superficie del agua». (Primera Lección, Zhuan Falun)

Después de que empecé a cultivarme de verdad, sentí como si el barro que me cubría se limpiara al eliminar mis malos apegos. Mi verdadera naturaleza está apareciendo gradualmente y siento que mi xinxing está mejorando.

Como profesora, a menudo me enfrento a pruebas relacionadas con mi apego a las ganancias porque los padres de los alumnos suelen traernos regalos. Miro en mi interior y veo que todavía tengo avaricia, así que me recuerdo que soy una practicante. También miro en mi interior cuando surgen conflictos. Mi apego a la fama y a las ganancias fue desapareciendo poco a poco.

Ahora dirijo mi propia galería de arte y doy clases a muchos alumnos. Me siento feliz y realizada cada día. También siembro las semillas de  Verdad-Benevolencia-Tolerancia en los corazones de los niños y hago hincapié en cultivar en ellos buenas virtudes morales para que puedan cosechar indirectamente los beneficios de Dafa. Los padres de mis alumnos son mi verdad. Me esforzaré por cultivarme bien.

Gracias, Shifu, por su benevolente salvación. En esta gran era en la que Dafa se está extendiendo por todas partes, tener la suerte de ser un practicante de Dafa y ayudar a Shifu a salvar a los  conscientes es el mayor honor de mi vida.