Aclarando la verdad reparando la carretera

(Minghui.org) Soy una practicante de Falun Dafa de 62 años que comenzó a practicar Dafa en 1999. Durante los últimos ocho años, he estado aclarando la verdad a la gente cara a cara y me gustaría compartir algunas de mis experiencias durante este tiempo con Shifu y mis compañeros practicantes.

Reparando la carretera

Solía llevar y traer a mi nieto del jardín de infancia de una aldea vecina y noté que había muchos baches en varios tramos de la carretera en un tramo de dos kilómetros (1,2 millas) debido al mal estado y al tráfico de camiones. Esta carretera principal conecta varios pueblos donde muchas familias tienen invernaderos, cerezos y campos de fresas. Muchas familias adineradas viven en estos pueblos, pero nadie estaba interesado en reparar la carretera.

Decidí rellenar los baches. Traje varias bolsas de tierra del campo de mi familia en mi triciclo eléctrico, pero no fue suficiente. Un día, vi una excavadora sacando un montón de tierra y escombros de un campo de montaña lejano. Le expliqué al dueño lo que quería hacer y accedió de inmediato a darme la tierra.

De camino a casa, después de llevar a mi nieto a la escuela, recogí piedras de la zanja junto al camino para forrar el fondo de los hoyos. Luego los rellené con la tierra y los escombros de la zona montañosa. Soy una mujer delgada y el trabajo me costó mucho. A menudo sudaba profusamente.

Me llevó una semana reparar un pequeño tramo del camino. Luego, la lluvia arrasó con todo lo que había hecho. Pero aprendí de este contratiempo e insistí en terminar las reparaciones.

La gente que pasaba, ya fuera trabajando, caminando, conduciendo, llevando a sus hijos a la escuela o yendo al mercado de la ciudad, me miraba con sorpresa y admiración. Algunos conductores detuvieron sus coches, se asomaron, me saludaron con el pulgar y dijeron: "¡Genial!". Algunos dijeron: "Muchas gracias". Los padres de los niños estaban aún más asombrados.

Entre mi trabajo en el campo y las tareas domésticas, tardé tres semanas en reparar la carretera. Un padre de la escuela de mi nieto comentó: "Creo que los practicantes de Falun Dafa son los mejores y más amables. Durante 10 años, toda la carretera ha estado llena de baches. A nadie le importó, ni ricos ni pobres. Prefieren que se estropeen las cerezas y las fresas antes que reparar la carretera. Una practicante de Falun Dafa se encargó de ello. ¿Quién no la respetaría?".

Mucha gente de esta aldea había sido engañada por la propaganda del Partido Comunista Chino (PCCh) que difamaba a Dafa. Se negaron a escuchar los hechos y atacaron a los practicantes de Dafa. Durante los cuatro años que mi nieto estuvo en la escuela, después de reparar la carretera, aclaré la verdad a la gente del pueblo. Además, otros practicantes distribuyeron materiales de aclaración de la verdad. Esto cambió su comprensión y les ayudó a conocer la verdad. Cuando los animamos a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas, la mayoría se mostró entusiasmada.

Aclarando la verdad: Trabajos a tiempo parcial

Encuentro trabajos a tiempo parcial en plantaciones de cerezas y fresas. A menudo trabajo en un invernadero, y el dueño no suele estar presente. Todos los días empiezo a trabajar 10 o 15 minutos antes y trabajo 5 o 10 minutos más tarde por la mañana y por la tarde. Eso significa que trabajo de 40 a 50 minutos extra cada día.

La gente común jamás haría eso. Nunca empezarían a trabajar antes de la hora programada y pedirían una compensación si trabajan horas extra, ni siquiera cinco minutos. A veces, cuando veo que la familia del dueño está demasiado ocupada para comer, les doy los bollos al vapor que preparé en casa. Luego, cuando les doy una memoria USB con información para aclarar la verdad, la aceptan con gusto.

No trabajo por dinero, sino para ofrecer salvación. Así que, después de que la familia de un empleador comprende la verdad y renuncia al PCCh, me voy con la siguiente familia y les aclaro la verdad. Más tarde, trabajo para otra familia.

Validando Dafa en la vida cotidiana

Nuestras palabras y acciones reflejan la imagen de un practicante de Dafa, y la gente nos observa. Eso significa que los pensamientos, acciones y bondad rectos son cruciales. A menudo les doy verduras, frutas, bollos al vapor, etc., a personas mayores y discapacitadas que se sienten solas y no pueden trabajar, y les ayudo con cualquier trabajo que pueda hacer.

Durante la cosecha de trigo del año pasado, visité a una practicante una tarde y vi que el trigo que se secaba en su cabaña no estaba cubierto. Le recordé que lo cubriera, pero me dijo que había estrellas en el cielo para que no lloviera. Alrededor de las dos de la mañana, me despertó un trueno y una lluvia torrencial. Me vestí y corrí a su casa.

En la oscuridad, vi a un hombre apoyado en una pala, mirando con impotencia el trigo. Era alguien de nuestro pueblo que estaba enfermo y no podía trabajar, y estaba tan angustiado que ni siquiera podía respirar. En lugar de ir a casa de la practicante, agarré su pala y comencé a amontonar el trigo. Su hijo llegó pronto y terminamos el trabajo juntos. Estaba empapada. No perdí tiempo en recuperar el aliento y corrí a casa del practicante.

Ese hombre les dijo más tarde a todos los que conoció: «La gente que practica Falun Dafa tiene un corazón bondadoso». Él, su hijo y su nuera renunciaron al PCCh.