(Minghui.org) Me llevaron en un centro local de lavado de cerebro en julio de 2013 porque me negué a renunciar a Falun Dafa. Dejé de practicar un mes más tarde después de ser puesto en libertad. Mi insomnio empeoró y me despertaba con frecuencia por la noche. El más mínimo ruido me despertaba y a veces no podía volver a dormirme. Como consecuencia, me sentía cansado y mareado todo el día, debido a que estaba muy irritable, la familia sufrió mucho estrés.
Un día reflexioné acerca de que no podía seguir así, Todo el día me sentía amargado, cansado y arremetía contra mi hijo. Finalmente me di cuenta de que la única solución era reanudar la práctica de Falun Dafa.
Entré en el sitio web oficial de Falun Dafa y me descargué todos los audios, vídeos y libros. Estudié el Fa sin parar y poco a poco recuperé los pensamientos rectos. Me di cuenta de que en los últimos dos años había desarrollado una comprensión deformada del Fa. Busqué en mi interior cuál era el motivo por el que me habían llevado al centro de lavado de cerebro.
En el año 2000, poco después de que comenzara la persecución, aflojé y dejé de practicar con tanta diligencia. Como mi esposa no aprobaba que yo practicara, leía menos el Fa, y cuando lo hacía, era a escondidas. Sólo practicaba el quinto ejercicio por la mañana, y no seguía el Fa. Mis enfermedades afloraron de nuevo. Cuando me sentía incómodo, culpaba a mi esposa por no dejarme cultivarme. Le guardaba rencor y a menudo me desquitaba en casa. Me dolía admitir que me habían detenido porque no me había cultivado de forma verdadera y no merecía ser llamado discípulo de Falun Dafa.
No tenía ni idea de cómo buscar en mi interior, así que memoricé lo que dijo Shifu:
«El xiulian genuino requiere cultivarse hacia dentro del corazón, cultivarse hacia el interior, buscar hacia el interior; no hay búsqueda externa» (Novena Lección, Zhuan Falun).
Repetía esta frase todos los días, con la esperanza de cambiar mi hábito de mirar siempre hacia fuera. Para eliminar el rencor contra mi esposa y mi padre, recité repetidamente lo que dijo Shifu:
«Una persona malvada es dominada por el corazón de la envidia. A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente.
«Una persona virtuosa siempre mantiene un corazón de compasión. Sin ninguna queja ni odio, toma la dificultad como alegría.
«Un ser iluminado no tiene ningún apego en el corazón. Él contempla tranquilamente a la gente mundana extraviándose en las ilusiones» (Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance).
Estas enseñanzas de Falun Dafa disminuyeron gradualmente mi apego a la envidia, las peleas, el resentimiento y mi temperamento también mejoró.
Un día pensé que debía dejar de estar resentido con mi mujer y que debía tratarla con amabilidad. Ella no quería que practicara porque le preocupaban los efectos negativos de la persecución sobre nuestro hijo. Era una persona amable y se sacrificaba mucho por nuestra familia. Mi mente se calmó y se tranquilizó. Al día siguiente, oí a mi mujer decirle a nuestro hijo: «Ya no estoy enfadada con tu padre». Sabía que era porque mi xinxing había mejorado.
Ahora me he acostumbrado a buscar mis apegos en mi interior. Cuando descubro alguno, lo elimino rápidamente. Mi mujer y yo casi nunca nos peleamos, y si lo hacemos, nuestros tonos son más suaves. Sabemos ser considerados. Ahora, ambos gozamos de mejor salud.
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