Difundiendo la verdad y la bondad a pesar de la adversidad

(Minghui.org) Mis compañeros practicantes y yo a menudo distribuimos materiales informativos sobre Falun Dafa en nuestra comunidad residencial. Durante la pandemia de COVID, cuando la mayoría de la gente se quedó en casa, preparamos y distribuimos materiales como «Deseándote paz» y «Bendiciones del cielo». Estos materiales son visualmente atractivos y el público los recibió bien.

Ideamos una forma sencilla de colgar los materiales con cuerdas, para que los transeúntes pudieran verlos fácilmente. En el caso de los carteles adhesivos, los preparamos raspando una esquina de antemano, lo que facilitó y agilizó su colocación cerca de las puertas o las entradas de los ascensores. Cuando se levantaron las restricciones de COVID y pudimos salir de la comunidad, distribuimos los materiales en los barrios cercanos o durante las pruebas obligatorias de COVID. Cuando no podíamos salir de la comunidad, distribuimos los materiales puerta a puerta y, sorprendentemente, poca gente los desechaba. Cuando se reanudaron las pruebas obligatorias, la mayoría de los residentes ya comprendían algo de la verdad, y casi todas las personas con las que hablamos acordaron renunciar al Partido Comunista Chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas.

El apoyo de un administrador de propiedades le trae bendiciones

El administrador de nuestra comunidad conoce a un compañero practicante y nos ha ayudado. Me propongo pagar todas mis cuotas por adelantado cada año, evitando así que el personal tenga que recordármelo, lo que también ayuda a establecer una relación positiva para futuras conversaciones.

Un día, después de enviar pensamientos rectos, fui a pagar mis cuotas. El administrador sonrió y me dijo: «Si todos los residentes fueran como usted, no tendríamos que perseguirlos para recordarles que paguen». Le contesté: «Yo practico Falun Dafa. Nuestro Shifu nos enseñó a pensar primero en los demás. Siempre pago pronto para que tenga menos problemas. Hoy en día todo el mundo lo tiene difícil».

Dijo que era difícil cobrar las cuotas. Algunos residentes se negaron a pagar durante años y se mostraban groseros cuando él se lo recordaba. Aproveché la ocasión para explicarle la importancia de renunciar al PCCh por seguridad y tranquilidad. Me escuchó atentamente y accedió a renunciar a sus vínculos con el PCCh.

Le regalé un amuleto de Falun Dafa. Se emocionó mucho. Dijo que era precioso y me pidió más para compartirlo con su familia. Le di más amuletos unos días después, y me lo agradeció con alegría porque comprendía perfectamente su significado.

Durante la pandemia, le di al administrador de la propiedad una unidad USB que tenía contenido de esclarecimiento de la verdad, y le insté a que lo compartiera con los demás. Lo vio y expresó críticas hacia las acciones del PCCh y su papel en la pandemia. Su influencia positiva se extendió al personal de seguridad, que también aceptó el material y llevó los amuletos como protección.

Una anécdota memorable fue que un residente me pidió un amuleto, pero no me quedaba ninguno. Le pregunté a un guardia de seguridad si podía prestarme el suyo, pero se negó diciendo: «¡No puedo regalarlo! Interactúo con mucha gente todos los días; ¡lo necesito para mantenerme a salvo!». Sentí que su seriedad reflejaba el sentimiento de los residentes de que los amuletos los protegían.

La familia del administrador también llegó a comprender la verdad, y el negocio de su hijo prosperó.

Tratar a todos con amabilidad

El personal de limpieza de la comunidad también llegó a comprender la verdad. Los tratamos como si fueran de la familia, dándoles ropa y pequeños regalos, lo que hizo que estuvieran más abiertos a conocer sobre Falun Dafa. Tras comprender la verdad, se negaron a retirar los carteles o materiales que distribuíamos, y algunos permanecieron intactos durante años.

Durante los estrictos confinamientos, los guardias de seguridad nos permitieron entrar y salir libremente. Su apoyo y respeto por nuestros esfuerzos les ayudó a sobrevivir a la pandemia.

Innumerables personas que han abrazado la verdad han sido bendecidas, mientras que quienes continúan persiguiendo a la gente buena a menudo enfrentan tragedias. Cada individuo tiene una elección: alinearse con la moral y la bondad o permanecer cómplice de un régimen que daña a la gente.

Espero que más personas reconozcan la verdad, renuncien a sus vínculos con el PCCh y elijan un futuro más brillante y seguro. Un solo pensamiento de bondad hacia Falun Dafa puede traer a la gente bendiciones y paz.