​Mi entendimiento sobre la eliminación de un apego fundamental

(Minghui.org) En el artículo Hacia la perfección, Shifu señala algunos de los apegos fundamentales de los Dafa dizi. Creo que mi propio apego fundamental es que quería practicar Dafa porque las enseñanzas están en línea con lo que yo creía que eran los principios correctos y los valores universales.

Me he dado cuenta de que si los cultivadores piensan que sus creencias en este mundo humano son el máximo estándar de medida, esto es un problema. Si un día perciben que los principios del Fa en un cierto nivel, o algo que el Fa requiere que hagamos, no concuerda con los principios humanos en los que creen, es muy posible que le den la espalda al Fa.

Si los Dafa dizi usan valores humanos para juzgar a Shifu y a Dafa, entonces no se han deshecho de sus apegos fundamentales. La cultivación de Fo Fa trasciende el reino humano, por lo que los practicantes no deben usar principios humanos para juzgar asuntos en la cultivación.

Shifu nos dijo:

“Les he enseñado la cultivación, pero eso no quiere decir que me esté cultivando como ustedes. Si ese fuera el caso, y nos hubiéramos vuelto malos, entonces ¿ustedes simplemente dejarían de cultivarse? ¿Es así como funciona? Nada en el Fa que enseñé dice que Shifu debe pasar por la ardua cultivación igual a como lo hace un cultivador. La maldad me ha atacado porque he estado sufriendo por los seres conscientes. Y cuando se trata de la cultivación de Dafa –donde las personas no dejan el mundo secular para cultivarse y los dizi son de todos los estratos de vida– ¿cómo podría Shifu ser igual a todos sus dizi? ¿Y por qué debería él vivir como aquellos estudiantes que tienen más yeli o las dificultades más duras?” (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional del Fa del Oeste de los Estados Unidos, Colección de enseñanzas del Fa, Volumen VII)

Cuando leí “…y nos hubiéramos vuelto malos, entonces ¿ustedes simplemente dejarían de cultivarse?”, me estremecí. La fe de un verdadero discípulo en Shifu debe ser incondicional.

El mal está creando tribulaciones fuera de China para poner a prueba a los discípulos de Dafa. Me di cuenta de que Shifu los está derrotando en su propio juego para eliminar el 15 por ciento restante del yeli entre los discípulos y ayudar a los discípulos de Dafa a alcanzar la perfección.

Por lo tanto, sin importar cuáles sean las circunstancias superficiales y sin importar quién sea el culpable en esas circunstancias, como cultivadores debemos permanecer comprometidos con Shifu y Dafa. Debemos continuar cultivándonos como siempre lo hemos hecho, creyendo firmemente en Shifu, mientras también salvaguardamos a Dafa, incluso en medio del caos.

Shifu nos lo dejó claro:

“De hecho, Dafa no es sólo para salvar a los seres humanos; también es enseñado a todos los seres vivientes en diferentes dimensiones. Tu naturaleza original iluminada sabrá naturalmente qué hacer. Yo aprecio tu parte humana para que puedas subir por medio del entendimiento del Fa. Dafa está armonizando a todos los seres vivientes y todos los seres vivientes también están armonizando Dafa. Les he dicho la solemnidad y lo sagrado del Fa para así eliminar vuestra confusión y entendimiento incorrecto sobre el Fa” (Dao y Fa, Escrituras esenciales para mayor avance).

No podemos ser cultivadores para siempre, permaneciendo entre los humanos durante mucho tiempo bajo el cuidado de Shifu. Debemos iluminarnos verdaderamente y comprender que tenemos la responsabilidad de ayudar a Shifu en la rectificación del Fa y salvar a los seres conscientes.

Una de nuestras responsabilidades es enviar pensamientos rectos. Durante mucho tiempo, tuve una idea errónea sobre enviar pensamientos rectos: mientras pudiera reconocer el mal y aferrarme a los pensamientos rectos, no necesitaba molestarme con esos seres malvados.

Me inspiró lo que otro practicante escribió en un artículo: “No es suficiente distinguir entre el bien y el mal. No es suficiente separarnos del mal. Debemos darnos cuenta de que el mal no debería existir y debemos hacer todo lo posible para eliminarlo”.

Cuando surgió esta determinación, mis pensamientos rectos se volvieron tan sólidos como el diamante. Realmente sentí que mis pensamientos rectos tenían el poder de “partir una montaña” (Enseñando el Fa en el Fahui de Nueva York de 2010, Colección de enseñanzas del Fa, volumen XI)

Este es mi entendimiento a mi nivel. Por favor, tengan la amabilidad de señalar cualquier cosa que sea inapropiada.

Los artículos en los que los cultivadores comparten sus entendimientos generalmente reflejan la percepción de un individuo en un momento determinado en función de su estado de cultivación, y se ofrecen con el espíritu de permitir la elevación mutua.