​Experiencias de cultivación de Chichi, de ocho años de edad

(Minghui.org) Mi nombre es Chichi. Soy estudiante de tercer grado de primaria. Esta es la primera vez que escribo mis experiencias.

«Quiero aprender más»

Tenía poco más de dos años cuando empecé a aprender el Fa. Entonces no sabía leer, así que mi madre tuvo que ayudarme. Pero también me ayudó con un proyecto para hacer llamadas telefónicas de aclaración de la verdad. Un día, después de haber estudiado un rato, mi madre dijo: «Vamos a parar aquí». Yo no respondí, así que tuvimos que seguir estudiando. Al cabo de un rato, mi madre dijo: «Bien, voy a hacer llamadas telefónicas para aclarar la verdad». Yo lloraba ansiosamente y decía: «¡Quiero aprender más! ¡Quiero aprender más!». Mi madre no tuvo más remedio que seguir estudiando conmigo. Con mi madre ayudándome a estudiar el Fa, me sentía muy feliz.

Atropellada por una moto

El 13 de agosto de este año, a eso de las seis de la tarde, volvía a casa después de una clase de inglés cuando, al cruzar la calle, una mujer en moto me tiró al suelo. Inmediatamente se bajó de la moto y me preguntó: «¿Estás bien? ¿Necesitas que te lleven al hospital?». Le respondí: «No, estoy bien». En ese momento, los transeúntes empezaron a increpar a la mujer. Uno dijo que había llamado a la policía y otro que la cámara de su coche había grabado el accidente.

Un agente de policía llegó poco después de que llegara mi madre. El agente me hizo muchas preguntas, me tomó declaración y luego se fue a un lado con el papeleo. En ese momento, mi madre le dijo a la mujer: «Somos practicantes de Falun Dafa. Nuestro Shifu nos enseñó a ser buenas personas de acuerdo con Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y a ser considerados. No se preocupe, no le causaremos ningún problema». La mujer siguió dándole las gracias. Mi madre también aclaró la verdad al policía. Después, mi madre me contó que la mujer y el agente estaban allí, destinados a escuchar la verdad.

El golpe fuesevero, me sangraban las rodillas y quería llorar, pero luego pensé: «No puedo llorar, porque si lo hago la mujer se pondrá nerviosa». Así que contuve las lágrimas.

Shifu dijo:

«Decimos que lo bueno o lo malo surgen de un pensamiento de la persona, y la diferencia de este pensamiento también trae distintas consecuencias». (Cuarta Lección, Zhuan Falun)

Mi estado mental mejoró al llegar a casa, y pronto volví a estar hablando alegremente. Mi padre dijo: «Es porque Shifu te protegió que puedes saltar y jugar tan rápidamente [después de un accidente]. Ve a inclinarte ante Shifu». Mi madre y yo nos inclinamos ante Shifu, agradeciéndole su compasión y su salvación. Shifu eliminó gran parte de mi yeli. Gracias, Shifu.

Repartiendo pequeños lotos

Los colgantes de loto de origami llevan las palabras «Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno».

No he dejado de regalar pequeñas flores de loto a la gente desde que era muy pequeña. Aunque sólo me encontrara con alguien una vez, me gustaba llevarle la belleza de Dafa. He regalado los colgantes a profesores y compañeros de guardería, a profesores y compañeros de primaria y a transeúntes. Siempre que me encuentro con alguien, le doy una pequeña flor de loto.

He regalado flores de loto a tres maestras de guardería. Una de ellas colgó el colgante en un ordenador, y las otras lo colgaron en sus bolsos. Todas las colgaron en lugares muy llamativos.

Cuando le di el pequeño loto a mi maestra de segundo grado, aunque la maestra no lo aceptó, me sentí muy feliz cuando la maestra leyó las nueve palabras: «Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno».

Una vez quise dar un pequeño loto a una compañera de clase, y cuando vio el pequeño loto en mi mano se puso muy contenta. La mayoría de la gente ha aceptado los pequeños lotos que les he ofrecido. Repartir pequeños lotos me hace sentir muy feliz.

Desprenderse del apego a ser falso

Tomé el bolígrafo de mi hermano mayor. Cuando mi hermano se dio cuenta de que le faltaba el bolígrafo, pensó que yo lo había tomado. Yo lo negué, así que mi hermano se quejó a mi madre. Mi madre me creyó y yo me regodeé de la desgracia de mi hermano.

Tenía hambre y fui a buscar algo de comer. Di un paso y me caí. Estaba bien y no me dolía, así que me levanté, di dos pasos y me volví a caer. Me pregunté qué estaba pasando, di dos pasos más y me volví a caer. Entonces supe que me había equivocado y que no debía tomar las cosas de mi hermano. Lo que hice fue en contra de la Verdad-Benevolencia-Tolerancia. En el futuro eliminaré el apego a la mentira.

Participar en ejercicios de grupo y en el estudio del Fa

Empecé a ir al parque con mi madre para practicar Falun Dafa todos los domingos cuando estaba en segundo grado. Para ello tenía que levantarme sobre las 4 de la mañana. Las tres primeras veces pude aguantar, pero a la cuarta me quedé dormida. Sentía mucho sueño después de levantarme por la mañana, pero quería estudiar el Fa, practicar los ejercicios y compartir las experiencias de cultivación con otros practicantes.

Recuerdo que cuando empecé a estudiar el Fa por la mañana, me quedé dormida después de leer un párrafo. Más tarde, mi madre me dijo que no debía dormir mientras estudiaba el Fa, porque era una falta de respeto al Fa. Si tenía mucho sueño, tenía que levantarme y ella me acompañaría. Yo no quería levantarme porque me parecía raro estar de pie mientras estudiaba. Mi madre me pidió que sostuviera el libro en la mano mientras leía el Fa. Acepté, y así superé la barrera de dormirme mientras leía el Fa. A veces todavía me duermo ocasionalmente, pero creo que puedo superar definitivamente la somnolencia. Estoy agradecida a Shifu por ayudarme a conseguirlo.

¡Gracias, Shifu! ¡Gracias, compañeros practicantes!