(Minghui.org) Shifu ha explicado la importancia de contarle a la gente la verdad sobre Falun Dafa:
“Los Dafa dizi del mundo juntos abarcan todo el mundo, cada persona tiene cierto alcance. Todo con lo que se encuentran y enfrentan se debe a los factores presentes dentro de vuestra expansión. Si pueden tener suficientes pensamientos rectos, entonces pueden ser enormes y masivos dentro de vuestra propia expansión y reprimir cualquier cosa mala que pueda existir allí. Si cada Dafa dizi fuera capaz de lograr esto, el mundo entero cambiaría, ya que cada uno de ustedes asume la responsabilidad de una gran expansión en este mundo y representa un cierto segmento de seres conscientes. A menudo les digo que se cultiven hacia dentro y que busquen dentro suyo cuando surgen problemas. Cuando se limpian a ustedes mismos al momento de enviar pensamientos rectos, eso sirve para purificar y rectificar vuestro pensamiento y también para limpiar vuestro propio pedazo, el dominio por el cual son responsables” (Enseñando el Fa en la reunión de La Gran Época, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. X).
Hay muchas maneras de hablar con la gente sobre Falun Dafa y la persecución del Partido Comunista Chino (PCCh). Vivo en una ciudad importante y muy poblada con buen transporte, así que hay muchas oportunidades para hablarle a la gente sobre Dafa. Una de ellas, por ejemplo, es mientras se espera o se viaja en autobús. Hay metro, trenes de alta velocidad, barcos y aviones, y sus zonas de espera ofrecen oportunidades.
Muchos practicantes de Falun Dafa prefieren aclarar la verdad sobre la persecución a personas de fuera de su región o ciudad, por motivos de seguridad. Debido a que tantos practicantes en nuestra zona han sido arrestados, casi nadie aclara la verdad localmente.
Una vez les pregunté a mis compañeros practicantes: «Se tardan unas cuatro o cinco horas en ir y volver cuando viajas a otro lugar para hablar con la gente sobre la persecución; ¿aclaras la verdad mientras viajas? Si todos vamos a otro lugar para ayudar a Shifu a salvar a la gente, ¿qué pasa con los residentes locales?».
Varios practicantes dijeron: «No hablamos de Dafa mientras viajamos porque no es cómodo ni seguro. En cambio, enviamos pensamientos rectos y recitamos el Fa». Ninguno mencionó que ayudara a los residentes locales a conocer la verdad sobre Dafa.
Mi perspectiva es un poco diferente. Además de estudiar el Fa (enseñanzas) y enviar pensamientos rectos con regularidad, debemos aprovechar al máximo nuestro tiempo y salir a ayudar a Shifu a salvar a la gente. Mi entendimiento es que encontraremos maneras de hablar sobre Dafa con las personas que conozcamos.
Estaciones de autobús o tren
Sin duda, existen preocupaciones de seguridad al hablar con la gente en las estaciones de autobús o tren. Hay cámaras de vigilancia casi por todas partes, y ahora el PCCh utiliza reconocimiento facial, reconocimiento de gestos y análisis de macrodatos. Esto ha generado desafíos para nuestros proyectos de aclaración de la verdad y de Dafa. Incluso un autobús está equipado con al menos seis cámaras. Hay innumerables cámaras de vigilancia en las calles. ¿Qué debemos hacer?
Siempre envío pensamientos rectos antes de salir. También envío pensamientos rectos para que las cámaras dejen de funcionar.
A medida que adquirí una comprensión más profunda al leer las enseñanzas de Shifu, me di cuenta de que el PCCh también manipula las cámaras. En lugar de enviarles pensamientos rectos a las cámaras, ahora me concentro en rectificarme yo. Siempre me aseguro de seguir el Fa y de tener una fe firme en Dafa y en Shifu.
En cuanto salgo de casa, busco oportunidades para hablar con la gente sobre Falun Dafa. Al llegar a una estación de autobús o tren, miro a mi alrededor y presto especial atención a quienes llevan teléfonos celulares. Una vez, cuando aclaré la verdad en una estación de metro, alguien me grabó y me denunció. Me arrestaron, pero logré salir sana y salva de la comisaría.
Parece que siempre hay gente esperando en las estaciones de autobús o tren, así que siempre que puedo, hablo un poco más alto para que todos puedan oírme.
Una vez, alguien me pidió que le enseñara los ejercicios de Falun Dafa. Como no había bancos y el suelo estaba relativamente limpio, simplemente me senté en la postura de loto y le mostré el ejercicio de meditación. Todos a mi alrededor estaban asombrados, pues no podían imaginar que alguien de casi 80 años pudiera ser tan ágil. Una persona dijo: «Si no lo hubiera visto con mis propios ojos, no lo creería».
“Este es el milagro de Falun Dafa”, expliqué. Mientras me aplaudía, alguien dijo: “Falun Dafa es realmente grandioso. Estoy de acuerdo con lo que dijo: Falun Dafa es legal y son los funcionarios [que persiguen a los practicantes] quienes violan la ley”. Les pedí a todos que recordaran: “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”. También distribuí amuletos con estas frases y todos se alegraron de recibirlos.
Maximizar el efecto
En las estaciones de autobús y tren uno se encuentra con todo tipo de gente. Una vez vi a un hombre de unos 40 años y me pregunté cómo iniciar una conversación con él. Al ver que llevaba una bolsa de plástico con medicamentos, le pregunté: "¿Todo esto es para ti?".
—Sí, lo es —respondió—. Soy mayor y tengo problemas de salud.
"Ya veo", asentí y respondí: "Tengo casi 80 años y no he estado enferma en 30 años. ¿Puedes creerlo?".
—¡Debes estar bromeando! ¿O eres un ser divino? —preguntó—. Es imposible que tengas cerca de 80. ¿Cómo es que te ves tan joven?
"Es porque practico Falun Dafa, una disciplina espiritual que puede mejorar la mente y el cuerpo. Todas mis enfermedades desaparecieron y la práctica también nos enseña a ser buenas personas", le dije.
“El gobierno dijo que Falun Dafa es malo. ¿Y aún lo practicas?”, preguntó.
“Lo que dice el gobierno no es cierto. Como el número de practicantes de Falun Dafa superaba al de miembros del PCCh, el exlíder del PCCh, Jiang Zemin, celoso, inició la persecución”, expliqué. “La Constitución china garantiza la libertad de creencia, y Jiang y el PCCh están violando la ley”.
Ya veo. ¡Me engañó el PCCh! —dijo—. Sí, todos debemos acatar la Constitución.
Al acercarse nuestro autobús, dije: «Por favor, recuerden: ¡Falun Dafa es bueno! ¡El PCCh miente!».
La gente dentro y fuera del autobús también oyó esto. "¿Alguien está hablando de Falun Dafa?", dijo uno de ellos.
No tuve miedo y continué: «Por favor, recuerden estas palabras: 'Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno'. ¡Les ayudará a mantenerse a salvo!».
¡Entendido! ¡Gracias! ¡Gracias! —contestó el hombre.
—¡No hace falta que me agradezcas! ¡Shifu Li Hongzhi nos lo pide! —le dije.
“¡Gracias, Shifu Li!”, exclamó.
Un grupo de turistas
Una vez me encontré con un grupo de turistas en una estación de autobuses y me hicieron varias preguntas. Las respondí una por una.
Después de que llegó el autobús, subieron y me dijeron adiós con la mano. Uno de ellos dijo: "¡Qué amable eres! ¡Gracias!".
"Shifu Li me lo pidió. Por favor, agradézcale a Él", respondí.
Todos sonrieron y la persona respondió: "¡Gracias, Shifu Li!".
Después de subir al autobús, me di cuenta de que había olvidado por accidente el aceite vegetal de 200 yuanes que acababa de comprar, ya que estaba concentrada en contarle a la gente la verdad. Pero luego pensé que estaba bien porque hice lo correcto.
Shifu dijo: “Todos los Dafa dizi en el período de la rectificación del Fa tienen la misión de ayudar al Shi a salvar gente. Entonces los Dafa dizi de cada región se han convertido en la esperanza para la salvación de la gente de la región donde están” (Al Fahui de Italia). Mi entendimiento es que hay muchas personas en nuestra área que no han sido salvadas y están esperando por nosotros.
Aclarando la verdad en tránsito
Cada vez que subo a un autobús o tren, en lugar de buscar asiento, miro rápidamente a los pasajeros. Hay gente de todo tipo y no podemos ignorar la seguridad.
Cuando otra practicante me vio aclarando hechos en un autobús, dijo: «No sabía que se podía hacer esto aquí. Simplemente no puedo».
Dije: «Somos practicantes de Falun Dafa y Shifu nos protege. Los pensamientos y las acciones rectas son parte de nuestra práctica de cultivación. Deberías intentarlo».
—Tienes razón, pero es más fácil decirlo que hacerlo. Todavía tengo que pensarlo—respondió ella.
Le dije: «Quizás necesites estudiar más las enseñanzas. Nuestra fuerza y sabiduría provienen del Fa. También necesitamos cultivar la compasión. Cuando nuestra compasión aflora, naturalmente encontramos maneras de ayudar a salvar a la gente».
“Por favor, no digas cosas malas sobre Dafa”
Una vez vi a un hombre en el autobús que llevaba muchas cosas: una bolsa al hombro, varias más y un carrito de compras repleto. Al bajar del autobús, le costó mucho organizarlo y moverlo todo, y el conductor y los pasajeros se quejaron.
Me levanté inmediatamente de mi asiento y lo ayudé. Después de bajar del autobús, preparé sus cosas y volví a subir rápidamente para no retrasar a los demás pasajeros.
El hombre me dio las gracias repetidamente y mucha gente en el autobús también me elogió y dijo que era una buena persona. Sabía que era otra oportunidad para aclarar la verdad, así que dije en voz alta: "No se preocupen. Practico Falun Dafa. ¿De qué otra manera podría ayudarle una mujer de casi 80 años?".
El autobús empezó a moverse y la gente estaba emocionada. Alguien dijo: "¿Ya casi tienes 80? ¿En serio?".
"Bajaste y subiste tan rápida. No habría creído que alguien de casi 80 años pudiera hacer esto si no lo hubiera visto hoy", añadió otra persona.
"¿Falun Dafa? El gobierno lo prohibió. ¿Cómo puedes seguir practicándolo?", preguntó una tercera persona.
Mirando a todos con una sonrisa, dije: "Sé que pueden pensar así, pero no es cierto. Primero, los artículos 35 y 36 de la Constitución garantizan la libertad de creencia y la libertad de expresión. Deberíamos seguir esto en lugar de a algún funcionario del gobierno".
Además, el documento N.° 50 de la Administración General de Prensa y Publicaciones del Estado de 2011 revocó la prohibición de los libros de Falun Dafa. Por lo tanto, es lícito practicar Falun Dafa y leer dichos libros. Por favor, no hablen mal de Dafa; a veces la difamación se considera un delito —continué—.
Una persona dijo: «No lo sabíamos. Solo repetí lo que dijeron en la televisión».
“Lo sé”, dije. “Pero si analizamos todas las campañas políticas del PCCh en el pasado, uno sabría que muchos grupos han sido perjudicados. Lo mismo ocurre con Falun Dafa. Falun Dafa me dio buena salud y curó mis enfermedades. Si no, ¿cómo podría ayudar de esa manera? Además, Falun Dafa enseña a ser una buena persona según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. De lo contrario, probablemente solo me ocuparía de mí en lugar de ayudar a los demás. ¿No es maravilloso Falun Dafa?”.
Algunos asintieron y me levantaron el pulgar. Les devolví el gesto con heshi (las palmas juntas frente al pecho). Los pasajeros siguieron comentando lo que acababan de oír. Al bajar del autobús, muchos me despidieron con la mano y uno de ellos dijo: "¡Espero que sigas rejuveneciendo!".
“Shifu me enseña a ser desinteresada”
Una vez, vi a un hombre mayor con canas en el autobús. Le cedí mi asiento y empezamos a charlar. Resultó que era más de diez años menor que yo, pero parecía mucho mayor y dijo que regresaba de una consulta médica en el hospital.
Al saber mi edad, se levantó inmediatamente. «Eres mucho mayor. Por favor, deberías sentarte aquí», dijo.
"No hay problema, por favor, siéntate, ya que necesitas más el asiento", respondí con una sonrisa. Dije que practicar Falun Dafa me hacía sentir saludable y dispuesta a ayudar a los demás, y añadí que, de lo contrario, una anciana de casi 80 años como yo no haría algo así.
“Sí, tus acciones lo dicen todo. Te creo. ¡Gracias!”, dijo.
—No hace falta que me agradezcas. Shifu me enseña a ser altruista— respondí. Los que estaban a nuestro alrededor también oyeron la conversación, y algunos asintieron.
Shifu me protege
De vez en cuando, personas envenenadas por las calumnias del PCCh discuten conmigo. Una vez, una mujer dijo: "¿Cómo te atreves a hablar de Falun Dafa en un autobús? ¡Es una secta y llamaré a la policía para que te arreste!".
No tuve miedo y dije: «Ambas somos ciudadanas de pleno derecho. Falun Dafa no es una secta. Debemos tener cuidado con lo que decimos».
Antes de que pudiera terminar, algunos pasajeros ya me defendieron. "No es asunto tuyo. Por favor, no critiques lo que no sabes", le dijo uno a la mujer.
“Este es un espacio público y ella [refiriéndose a mí] tiene libertad de expresión”, dijo otro.
—¡¿Qué haces?! —preguntó alguien más, dirigiéndose a la mujer—. ¡No hagas una tontería!
La mujer se quedó callada desde entonces. Sabía que Shifu me estaba protegiendo.
Creando oportunidades
A veces, los practicantes salen y no encuentran personas adecuadas con quienes hablar, así que simplemente regresan a casa. Pienso que debemos ser proactivos. Una vez, escuché a una pareja hablando un dialecto del noreste, así que me bajé del autobús con ellos y charlamos.
“Al oírte hablar ese dialecto, me siento tan cerca de ti”, dije.
¿Por qué?, preguntaron sorprendidos.
“¿Has oído hablar de Shifu Li Hongzhi de la ciudad de Changchun en la provincia de Jilin?”, pregunté.
—Por supuesto. ¿Formas parte de ese culto? —preguntaron.
—Vamos, por favor, no digas eso. Shifu Li es una gran persona y lo admiro mucho. Falun Dafa es inocente y son Jiang y el PCCh quienes han estado difamando la práctica con mentiras —expliqué. Luego desmentí parte de la propaganda de odio del PCCh.
—Ya veo. La verdad es que no sabemos mucho al respecto —respondió el esposo—. ¿Escuché que Shifu Li se ha 'trasladado' a los Estados Unidos?
“Shifu Li obtuvo su permiso de residencia permanente en 1996, tres años antes de que el PCCh comenzara a perseguir a Falun Dafa”, expliqué. “Fue allí porque la gente de otros lugares también necesita saber sobre Falun Dafa. Actualmente, practican Falun Dafa en más de 100 países”.
Hablamos durante más de una hora y respondí a todas sus preguntas. "Parece que Falun Dafa es realmente extraordinario", comentó la esposa. "Te ves tan joven y lo explicaste tan bien. ¡Gracias! ¡Gracias!".
Era un día muy frío, pero me sentía muy cálida al caminar a casa. En mi corazón, le estaba agradecida a Shifu.
Un incidente en un aeropuerto
En una ocasión, viajaba a otra provincia para un proyecto de Dafa. Durante el control de seguridad, los agentes usaron un detector de metales para escanear a los pasajeros. No revisaron el equipaje en general, pero me apartaron para revisar mi bolso. Sé que revisaron mi documento de identidad y vieron la nota policial en el sistema.
Por motivos de seguridad, no traje nada sobre Dafa en el viaje. Así que aproveché la oportunidad para aclarar la verdad.
"¿Por qué solo me detuvieron a mí y revisaron mi bolso?", pregunté. "Probablemente revisaste mi identificación y sabes que practico Falun Dafa. Pero no hay nada de malo en eso. La Constitución permite la libertad de creencia. Y ninguna ley dice que Falun Dafa sea ilegal".
Hablé alto a propósito en el vestíbulo. Se oyó eco, y como soy de Beijing y hablo con claridad, el efecto fue muy bueno. Mucha gente se reunió para escuchar.
Un oficial se puso nervioso y me susurró: «Vamos. Esto es un aeropuerto. Ya puedes irte».
No tuve miedo y seguí hablando en voz alta: «Soy una ciudadana de pleno derecho. No pueden violar nuestros derechos de esta manera. Los practicantes de Falun Dafa son buenas personas. Merecen respeto, no intimidación».
Frente a la multitud, varios oficiales me escoltaron cortésmente hasta la puerta. Una vez más, agradecí a Shifu la oportunidad de aclarar la verdad.
Hay muchísimas historias de este tipo. Comparto algunas porque creo que los practicantes deberíamos hacer más y mejor para ayudar a salvar a la gente.
(Artículo seleccionado para el 22.º Fahui de China en Minghui.org)
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