Fahui de China | Dejando atrás el resentimiento que llevaba desde la infancia

(Minghui.org) ¡Saludos, reverenciado Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Soy una practicante de 66 años y vivo en una zona rural. Después de empezar a practicar Falun Dafa en 1998, ya no me sentía competitiva y ni luchaba con las emociones y deseos humanos. En cambio, me convertí en una practicante racional, clara y moralmente recta.

No puedo imaginar cuánto sacrificó el compasivo y gran Shifu por mí, cargando con tanto yeli y soportando dificultades inimaginables. No tengo forma de devolver la gracia ilimitada de Shifu salvo haciendo bien las tres cosas y cumpliendo con el título de practicante de Falun Dafa en el periodo de la rectificación del Fa.

Estudiando bien las enseñanzas y dejando atrás el resentimiento

Los sentimientos de resentimiento, odio, competitividad, envidia y la negativa a ser criticada estaban profundamente arraigados en mí desde la infancia.

Mis primeros años estuvieron llenos de dificultades. Mi padre falleció cuando yo tenía tres años, y mi madre luchó por criar a tres hijos en la pobreza. Mis abuelos la discriminaban, a menudo discutían con ella e incluso la pegaban. Crecí llena de miedo y resentimiento, y desarrollé un odio profundo hacia el Familia de mis abuelos que duró muchos años.

Mi marido y yo nos respetábamos mutuamente y criamos a dos hijos. Éramos una familia feliz y armoniosa, admirada por nuestros vecinos.

En otoño de 1998, me encontré con el valioso libro Zhuan Falun y comencé a practicar Falun Dafa. Mi vida familiar se volvió aún más pacífica, armoniosa y alegre.

El 20 de julio de 1999, el Partido Comunista Chino (PCCh) comenzó su brutal persecución de Falun Dafa. Las mentiras inundaron el país, engañando a innumerables personas. A pesar de la gran presión, cinco de nosotros, practicantes en el pueblo, seguimos estudiando juntos el Fa (enseñanzas), y contábamos la verdad sobre Dafa. Por eso, la policía me acosaba a menudo, y mi familia también sufría y era perseguida.

Mi marido, temeroso del PCCh, no pudo aceptar mi práctica. A menudo se exaltaba, me gritaba y una vez incluso me pegó. Como no había estudiado profundamente el Fa, le contesté. A menudo teníamos discusiones acaloradas por asuntos triviales.

Una vez, después de una discusión, fuimos a casa de mi suegra. Al oírnos a los dos decir que teníamos razón, me dijo: "¿Ni siquiera pueden soltar algo tan pequeño?".

Sus palabras me golpearon como un rayo. Ella es analfabeta, ¿cómo pudo decir algo tan significativo? Me di cuenta de que Shifu me estaba iluminando a través de ella. Como mis apegos eran demasiado fuertes, no logré mejorar y mi resentimiento hacia mi marido se profundizó.

Cada vez que discutíamos, mi marido decía: "Te estoy ayudando". Pero debido a mi resentimiento profundamente arraigado, no me iluminé. Yo respondía con brusquedad: "No necesito tu ayuda. Tengo al Fa y a Shifu para guiarme; No te necesito".

Esto duró más de diez años.

Una vez, mientras estudiaba el Fa, me encontré con un pasaje donde Shifu decía:

"Si nos encontramos con estos percances, no compitamos ni peleemos como los demás. Él actúa de esta manera y luego tú también actúas así, ¿no eres entonces una persona común? No solo no compitas ni pelees como él, tampoco puedes odiarlo en tu corazón, realmente no puedes odiarlo. Una vez que lo odias, ¿no te sientes movido? Así, no has puesto en práctica Ren. Nosotros hablamos de Zhen-Shan-Ren, entonces tu Shan ni siquiera existe. Por eso, no puedes actuar como él, realmente no debes enojarte con él a pesar de que haya dañado tu reputación ante la gente por encima y por debajo de ti y no puedas ni asomar la cabeza. No solo no puedes enfadarte con él, todavía debes agradecerle en tu corazón, realmente tienes que agradecerle." (Cuarta Lercción, Zhuan Falun)

Las palabras de Shifu me despertaron, y me di cuenta de que, como practicante, no debía manejar los conflictos de la misma manera que lo hacen las personas comunes. Al reflexionar sobre mi comportamiento, vi lo pobre que era: no solo no agradecí a mi marido, sino que incluso lo traté como a un enemigo. Estaba lejos de ser una cultivadora.

Me corregí y dije: "Shifu, me equivoqué. No quiero este odio, esta mentalidad competitiva ni de envidia. Debo eliminar estos apegos negativos. Por favor, ayúdame, Shifu".

En cuanto dije esto, sentí que una sustancia espesa y pegajosa se desprendía y se disolvía de mi cuerpo. Me sentía increíblemente ligera y con la mente despejada, un estado que nunca había experimentado antes. Fue realmente maravilloso. Shifu vio que tenía el deseo de mejorar y me ayudó a eliminar esa sustancia negativa. Cambié mi mentalidad. ¡Estoy profundamente agradecida a Shifu!

Para asimilarme completamente en el Fa, además de participar en el estudio grupal tres veces por semana, también estudié el Fa extensamente por mi cuenta. En 2011, después de leer la experiencia de cultivación de otros practicantes compartiendo artículos en Minghui.org sobre cómo memorizaban el Fa, también empecé a memorizar Zhuan Falun.

Memorizando el Fa fue realmente un proceso de templar el corazón. Luché con el miedo a la dificultad y la interferencia de varios pensamientos que dificultaban mis esfuerzos por concentrarme, pero decidí que, por muy difícil que fuera, persistiría. Después de un año, por fin terminé de memorizar Zhuan Falun una vez y obtuve muchas revelaciones.

Una tarde, soñé que Zhuan Falun se abría ante mí y sus páginas brillaban con una luz dorada. La primera mitad se extendía ante mí, mientras que la segunda mitad formaba escalones dorados, con un paso tras otro extendiéndose infinitamente hacia el vasto universo. ¡La escalera dorada era realmente magnífica y sagrada!

Cuando desperté, me conmovió profundamente la magnífica escena de mi sueño. Sabía que era el estímulo de Shifu, y eso reforzó mi confianza para memorizar el Fa. Mi ritmo es lento, memoricé el Fa 14 veces en 14 años. Pero realmente disfruto memorizando el Fa, y seguiré haciéndolo.

En septiembre de 2024, comencé a transcribir Zhuan Falun. Mi xinxing mejoró sin saberlo memorizando y transcribiendo el Fa. Aprendí a medir todo por el Fa, a captar y disolver los pensamientos humanos tan pronto como surgen, y a corregirme a tiempo. Siento que cada momento es un proceso de cultivación, y estudiar más el Fa es realmente maravilloso.

A través de grandes cantidades de estudio, memorización y transcripción del Fa, corregí mis palabras y acciones. Mi xinxing mejoró, mi yeli fue eliminado y mi entorno cambió. Mi marido ya no se exalta e incluso ayuda con las tareas de la casa, cocina, lava platos y me recuerda cuándo es hora de enviar pensamientos rectos.

Aunque mi marido no ayuda directamente a aclarar la verdad sobre la persecución a la gente, él se encarga de la mayoría de las tareas domésticas, dándome tiempo para proyectos de Dafa. Me ha acompañado durante todo mi camino de cultivación, creando muchas dificultades para que pudiera eliminar mucho yeli. Esto es realmente una gran bendición.

Avanzando con diligencia

Tras comenzar la persecución, coordiné con otros practicantes para distribuir materiales que aclararan la verdad. Usé mi teléfono para llamar directamente a la gente y aclarar la verdad y animarlos a hacer las tres renuncias (del PCCh, la Liga Juvenil y los Jóvenes Pioneros), y más tarde también hablé cara a cara con la gente. Al cooperar con otros practicantes, realmente nos ayudamos mutuamente. No solo ayudamos a Shifu a salvar a muchas personas, sino que también eliminamos muchos apegos, lo que nos ayudó a madurar y establecer nuestra cultivación. Nuestra determinación para practicar Falun Dafa se fortaleció y experimentamos una transformación profunda. A continuación, algunas pequeñas historias mientras aclaramos la verdad:

1. La sacralidad de salvar a las personas y el ánimo de Shifu

Fui con una pareja de practicantes mayores a un gran mercado y llevé a mi nieto de dos años. Hablé con gente para aclarar la verdad, mientras la pareja mayor ayudaba a cuidar de mi nieto.

Vi a dos mujeres de pie en la intersección cerca del mercado. Les saludé calurosamente y les pregunté si habían oído hablar de las tres renuncias. Luego les recordé los crímenes cometidos por el PCCh contra el pueblo chino, y cómo el cielo lo destruiría, y que solo renunciando al  Partido y sus organizaciones podrían garantizar su seguridad. También expliqué qué es Falun Dafa y la verdad de la persecución. Todos aceptaron renunciar al PCCh y sus organizaciones afiliadas, y aceptaron encantados los materiales de la verdad que les di antes de ir al mercado.

A medida que más y más gente se reunía en el mercado, pensé que, si ayudaba a muchos a renunciar, ¡sería difícil recordar los nombres de todos! La practicante mayor que vino conmigo se dio cuenta de esto y dijo: "No te preocupes, recordaré sus nombres. Tú céntrate en hablar con ellos." Vi a su marido sosteniendo a mi nieto, de pie fuera de la multitud y observándome. De inmediato me sentí tranquila y, con más confianza, empecé a hablar en voz alta ante la multitud, explicando la bondad de Dafa, exponiendo la maldad del PCCh y diciendo a la gente que debían renunciar al PCCh para garantizar su seguridad. Las personas que escucharon fueron muy receptivas, muchas aceptaron renunciar y la mayoría pidió materiales.

Cuando terminé de hablar, la multitud se dispersó. Un hombre de unos sesenta años vino a verme. Tras escuchar la verdad y renunciar al PCCh, tomó el CD de aclaración de la verdad con ambas manos, lo guardó cuidadosamente en el bolsillo y se inclinó repetidamente ante mí, diciendo: "¡Gracias! ¡Gracias!" Me conmovió profundamente su gesto sincero y respondí: "No me des las gracias. Deberías agradecer a Shifu, el fundador de Falun Dafa. Es mi Shifu quien me instruyó para ayudarte a salvarte". Él volvió a inclinarse sinceramente, diciendo: "¡Gracias, Shifu de Falun Dafa! ¡Gracias, Shifu de Falun Dafa!".

Al ver la gratitud en el rostro del hombre después de entender la verdad, mis emociones me sobrepasaron y lágrimas de gratitud corrieron por mi rostro. En ese momento, Shifu me mostró una magnífica y sagrada escena: sentí mi cuerpo elevarse muy arriba, más allá de la tierra, de pie en el vasto universo. Era increíblemente sagrada, tan grandiosa e impresionante. En mi mente dije: "Shifu, seguiré tus palabras, salvaré a más personas y cumpliré las expectativas de los seres conscientes que esperan la salvación. ¡No decepcionaré su compasiva salvación!".

2. Un momento milagroso:

En la primavera del año 2000, tras un extenso estudio y intercambio de Fa, los cinco practicantes de nuestro pueblo se dieron cuenta de que debíamos distribuir materiales de aclaración de la verdad a gran escala para ayudar a más personas a entender la verdad. Esta es nuestra responsabilidad como practicantes de Falun Dafa.

Organizamos para tener dos practicantes por grupo, uno en moto para transportar al otro, y nos dispersamos desde nuestra aldea hacia las zonas circundantes, asegurándonos de llegar a cada aldea.

Hay un gran río que divide las dos provincias de nuestra zona, y el puente sobre el río es un paso importante. Mientras distribuíamos materiales, también colocamos carteles de aclaración de la verdad para que las personas que pasaban pudieran leerlos.

Otro practicante y yo fuimos a otra zona a lo largo del río para distribuir materiales. Nos dimos cuenta que los postes eléctricos a ambos lados del puente eran altos y claramente visibles, y el puente estaba constantemente lleno de tráfico día y noche. Parecía el lugar perfecto para poner carteles de aclaración de la verdad. Después de terminar de repartir los materiales, de camino a casa, buscamos los mejores lugares para poner los carteles.

Cuando llegamos al último cartel, planeé pegarlo en un poste al principio del puente. Al ver que el tráfico era denso y constante, empecé a preocuparme por cómo hacerlo de forma segura. Le pregunté en voz baja al Shifu: "Shifu, por favor ayúdame. Necesito pegar este póster aquí". En cuanto llegué al poste, me bajé de la moto y caminé directamente hacia él.

Cuando miré hacia atrás para mirar el puente, milagrosamente, el puente, que había estado lleno de tráfico hace unos momentos, estaba completamente vacío. Rápidamente pegué el cartel. En cuanto volví a subirme a la moto, el tráfico reapareció y volvió a fluir sin parar. ¡Fue realmente un milagro! Le di las gracias repetidamente a Shifu de corazón. Shifu siempre está a nuestro lado, protegiéndonos.

3. Elaborando materiales de aclaración de laverdad para compañeros practicantes.

Los materiales de aclaración de la verdad en nuestra zona tuvieron que ser traídos desde un lugar lejano por un coordinador. Esto fue muy incómodo. En 2018, decidí empezar a fabricar los materiales. Tenía una impresora Epson 805, que era lenta y solo servía para imprimir notas de aclaración de la verdad sobre dinero. Le dije a nuestro coordinador: "Puedo hacer los materiales, pero necesito una impresora más rápida". El coordinador estuvo de acuerdo.

Unos días después, tuve un sueño claro: estaba caminando por el jardín cuando miré al cielo. Allí, suspendido entre el cielo azul y las nubes blancas, había un enorme Falun (rueda de la ley), brillando sobre mi casa. Al día siguiente, el coordinador me trajo una impresora Epson 5210 mucho más rápida. Esta impresora podía imprimir materiales rápidamente, lo que ayudó mucho a los practicantes de mi zona. A veces, practicantes de otros grupos de estudio del Fa también vienen a mí para pedir materiales.

Mientras hacía los materiales, prioricé estudiar el Fa. Cuando estaba demasiado ocupada, aprendí a decir que no a peticiones adicionales. Mis días estaban llenos de estudiar el Fa, enviar pensamientos rectos y crear materiales, pero siempre me mantenía tranquila y concentrada. Sabía que todo esto estaba organizado por la compasión de Shifu, ayudándome a mejorar y cumpliendo los votos sagrados que hice en tiempos antiguos.

¡Estoy profundamente agradecida a Shifu!

(Artículo seleccionado para el 22.º Fahui de China en Minghui.org)