(Minghui.org) ¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Me gustaría resumir lo que aprendí mientras trabajaba en los medios y compartirlo con ustedes.

Sin sentimientos negativos

Una coordinadora del proyecto en el que trabajé tenía una personalidad fuerte. Después de trabajar con ella durante muchos años, pensé que había dejado atrás las nociones humanas. No esperaba que, al ser asignada a otro equipo, me encontraría con una coordinadora más dura.

Mi tolerancia y capacidad de perdón ya no funcionaban. Reprimía un tipo de queja, solo para descubrir que surgía otra. Cada día, tenía que aguantar, mientras me esforzaba por eliminar todo tipo de nociones humanas, una tras otra.

Pensé: "¿Por qué pasó esto?". En el pasado, el Maestro Li Hongzhi (fundador de Falun Dafa) arregló que la coordinadora anterior me ayudara, señalándome que realmente yo no había mirado dentro. De hecho, mi comprensión de "no ser perturbada" en el pasado era una tolerancia superficial, y no alcanzaba un nivel más profundo.

Así que me concentré en mirar hacia dentro. En cuanto surgía un mal pensamiento, lo captaba y me preguntaba: ¿por qué me afectaba? ¿Por qué no podía soltarlo? ¿Qué quería conseguir con esto? ¿Era mi pensamiento coherente con Dafa? Profundicé cada vez más en mis apegos.

Con el tiempo, me di cuenta de que muchas nociones humanas estaban arraigadas en el egoísmo y el sentimentalismo, y logré reprimirlas. Siguiendo este camino, pude sentir lo que es la compasión. Cuando miré a la coordinadora, sentí que era una niña y mi corazón se llenó de compasión; solo quería ayudarla.

Pero esto no fue suficiente. Un día, la coordinadora hizo comentarios duros sobre mí y me molesté de nuevo. Pensé: «Shifu, ahora tengo compasión; ¿por qué me sigue pasando esto? ¿En qué más debo trabajar?» Otro practicante me recordó: «¿Por qué te disgustaste cuando recibiste comentarios negativos? ¿Sigues pensando que las críticas son algo malo? No estar dispuesto a aceptarlas significa que quieres protegerte».

De repente me di cuenta de que mi entendimiento previo del bien y el mal se limitaba al nivel humano. Pero como practicantes, necesitamos disciplinarnos a un nivel superior.

Shifu dijo:

“Pero en realidad, los principios de la sociedad humana son verdades invertidas en el cosmos. Cuando los humanos pasan por tribulaciones y sufren, están pagando ye y, de ese modo, tendrán un futuro feliz. Entonces, un cultivador necesita cultivarse con verdades correctas y rectas. Atravesar dificultades y sufrimientos es una gran oportunidad para eliminar yeli, eliminar pecados, purificar el cuerpo, elevar el reino de pensamiento y elevar el nivel –es una cosa extraordinariamente buena. Esta es una verdad del Fa correcta y recta (Escrituras esenciales para mayor avance (III)).

Después de darme cuenta de esto, repetía las palabras de Shifu todos los días. Unos días después, otra periodista me llamó de repente y me regañó. No fue hasta más adelante en la conversación que me di cuenta de que en realidad ella estaba molesta con dos practicantes en Estados Unidos. Debido a la diferencia horaria, no estaban disponibles, así que esta periodista me encontró y desahogó su ira. Me pregunté: ¿Por qué no estaba molesta esta vez? Me di cuenta de que recitar las palabras de Shifu todos los días me ayudó. Cambié mi noción de lo que es bueno y malo. Ya no me sentía molesta e incluso agradecí a esa practicante por esta oportunidad de mejorar mi xinxing.

Comprendí que es fundamental que cambiemos nuestras nociones humanas. Por ejemplo, un día una periodista se quejó conmigo, diciendo que la coordinadora era injusta y que le había hecho daño. En el pasado, habría estado de acuerdo. Pero ahora tenía una comprensión diferente de "bien y mal", así como de "pérdida y ganancia". Para mí, no existe tal cosa como "ser injusto" o "ser maltratado". Después de todo, todo está relacionado con el yeli. Si uno no tiene yeli, no tendrá tribulaciones. El Fa lo gobierna todo: si alguien realmente te lastima, la ley universal hará que esa persona te dé de (virtud) como compensación.

También me di cuenta de que todo esto era causado por el yeli y que es recto. Sin embargo, cuando alguien no persevera, puede resistirse y quejarse. Esta persona puede incluso dudar de la ley universal. ¿Qué tan equivocado está esto? Es similar a lo que dijo Shifu:

«Una persona malvada es dominada por el corazón de la envidia. A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente. Una persona virtuosa siempre mantiene un corazón de compasión. Sin ninguna queja ni odio, toma la dificultad como alegría» (Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

A medida que esto continuaba, fui eliminando nuevas nociones, capa tras capa, y dejé de protegerme, de buscar fama, de evitar el sufrimiento y de temer los conflictos. También me di cuenta de que el "descontento y el odio", como menciona Shifu en el mismo artículo, no se producían porque el proceso mental cambiaba. Sin una base sólida, la envidia y el odio no tienen tierra donde crecer.

Puedo cooperar con la coordinadora sin reservas. Cuando surgen conflictos o dificultades, sé que son mi yeli y debo ser humilde y saldar mi deuda con ella.

Aprender a ser considerado con los demás

También reviso artículos y suelo notar omisiones. Algunos periodistas son muy rápidos, pero sus artículos tienen muchas erratas. Otros solo trabajan en ciertas partes y dejan las partes más difíciles para la siguiente persona.

Al principio, me quejaba a menudo y me preguntaba por qué algunos periodistas no mejoraban su xinxing. Más tarde me di cuenta de que su comportamiento era, en realidad, un espejo que me permitía ver mis propios apegos.

Me volví más estricta conmigo misma, prestando atención a los detalles y volviéndome más profesional. Constantemente elimino mi impaciencia y descuido. Sentí profundamente que no podíamos ignorar estas nociones humanas con la excusa de haber hecho tantas cosas que validan Dafa; de lo contrario, estas nociones humanas podrían expandirse y conducir a malos pensamientos.

Un día, al revisar un artículo, noté cada vez más errores. Además, el texto no coincidía con el video. Si presentaba el informe así, los editores tendrían que ver el video y transcribir el texto, lo que podría llevar mucho tiempo. Me disgustaba pensar que la periodista había sido descuidada y había dejado un trabajo tan básico a otros. Así que mis comentarios se volvieron cada vez más severos. Justo cuando estaba a punto de guardarlos, la periodista me llamó. Me dijo con voz cansada: «Siento no haber tenido tiempo de actualizar el informe. Lo haré ahora». Me di cuenta de que no era descuidada; simplemente estaba demasiado ocupada.

Esto me recordó que días antes, hice lo mejor que pude y terminé algo, pero la coordinadora me criticó duramente por un error. Me sentí ofendida. Ahora, yo hice lo mismo. Pensé que la coordinadora se había equivocado, ¡pero hice lo mismo!

Empecé a mirar hacia dentro: examiné lo sucedido y me di cuenta de que, cuando veía que el periodista cometía errores o hacía algo que no se ajustaba a mis expectativas, mi primer pensamiento era quejarme y menospreciarlo. Si esa persona se defendía, pensaba: "¿Cómo puedes poner excusas después de cometer errores?". Entonces discutía con ella. Cuando surgían mis ideas humanas, todos mis pensamientos eran malos.

Al analizar esto, me quedé sorprendida. Siempre pensé que era cuidadosa y responsable. No sabía que tantos malos pensamientos pudieran surgir y generar yeli de pensamiento adicional. Cuando me enojé con esa practicante, también le di de a cambio de su yeli. ¿Acaso esto no va en contra de la práctica de cultivación? Si no hubiera mirado para adentro, no habría tenido estos entendimientos. Estas nociones probablemente me acompañaron durante decenas o cientos de años, y estaba acostumbrada a ellas. Incluso pensé que tenía razón y que era responsable.

Entonces, como practicante, ¿cuáles deberían ser mis pensamientos? Shifu dijo:

“Pero jamás discuten. Están en un estado de inmensa tolerancia, de misericordia hacia todos los seres y son capaces de comprender todo con bondad. Para ponerlo en términos humanos, siempre son capaces de comprender a otros” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Boston, 2002, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. II).

Una persona común está apegada a sus propias nociones humanas. Quiere ganarse la confianza de los demás y es incapaz de tratarlos con bondad. Yo era así. Como practicante de Dafa, necesito abandonar todo esto, incluyendo los procesos mentales que generan malos pensamientos. Pase lo que pase, debo mantener la calma y no dejarme perturbar por las nociones humanas. Si tengo compasión, puedo comprender a los demás y ayudarlos.

La importancia de estudiar las enseñanzas

Después de tantos años de práctica, me doy cuenta de que la cultivación no es complicada. Solo necesito concentrarme en asimilarme a Dafa y ayudar a Shifu a salvar a la gente. Estudiar bien el Fa es fundamental para lograrlo.

Antes de que comenzara la última temporada de gira de Shen Yun, leía tres Lecciones de Zhuan Falun al día. En cuanto tomaba el libro, sentía una fuerte energía que me rodeaba. Aunque tres conferencias al día me parecían demasiadas, solía leer el contenido rápidamente para aprovechar el tiempo. Así que empecé a memorizarlo. Anteriormente lo había intentado varias veces, pero lo dejé. Esta vez, lo memoricé con otra practicante. Cada día, nos preguntábamos cuánto habíamos progresado. Ella memorizaba más rápido que yo. Pero no me rendí y continué día tras día, párrafo tras párrafo.

Después de varios días, pude sentir la diferencia. Una noche, mientras meditaba, sentí claramente que algo subía desde mi pecho hasta mi frente, saliendo del conducto del ojo celestial. Mi ojo celestial no está abierto y esta es la primera vez que experimento algo tan real. Sabía que Shifu me animaba a memorizar mejor las enseñanzas.

Un día, al leer la primera frase de Lunyu: «Dafa es la sabiduría del Creador», me estremecí por completo. La leí y memoricé incontables veces. En ese momento, de repente, comprendí: el Creador nos transmitió su propia sabiduría. Esta es la sabiduría suprema que creó el universo gigantesco, una sabiduría profunda, omnicomprensiva y omnipotente. Me sentí mal. ¿Por qué no estudié Dafa bien? ¿Acaso no está todo en la sabiduría del Creador? ¿No resolvería esto todo?

Aunque para mí la cultivación se volvió más sencilla, no se volvió más fácil. El número de informes aumentó drásticamente, y algunos practicantes se quejaron: "¿Por qué hay tantos problemas? ¿Acaso practicar Dafa no debería traer bendiciones?". Al ver a otros practicantes luchando con el yeli de enfermedad, me pregunté si yo también tendría problemas.

Al estudiar las enseñanzas, adquirí nuevos conocimientos. No es que cuanto más practiquemos, más cómodos nos sentiremos ni menos problemas tendremos. Deberíamos ser capaces de soportar grandes tribulaciones y adversidades sin dejarnos perturbar. Un día, cuando leí el Fa, me di cuenta de repente de que esos pensamientos que intentaban influir en mí eran ridículos. Provenían de niveles muy bajos y no podían afectarme.

También me di cuenta de que practicar Dafa requiere que dejemos de lado el egoísmo y prioricemos verdaderamente ayudar a Shifu a salvar a la gente. Cuando vi Shen Yun Creations, una artista compartió sus experiencias. Cuando interpretó el papel protagonista en el programa, Devoción, el director de coreografía le pidió que se detuviera y repitiera un movimiento, porque no tenía lágrimas en los ojos. "Si no te conmueves tú misma, ¿cómo va a conmover al público?", dijo. A partir de entonces, antes del ensayo, la bailarina solía escuchar la música con auriculares una y otra vez para captar la emoción.

La búsqueda de la veracidad de los artistas de Shen Yun me conmovió profundamente. Sí, solo los sentimientos genuinos pueden conmover a los demás. Como artistas, debemos dejar ir esos sentimientos. Pero para ayudar a salvar a la gente, los artistas de Shen Yun deben aumentar sus sentimientos para fortalecer sus actuaciones. Si sus corazones no son puros, no podrán conmover al público.

Miré hacia adentro sobre mis reportajes: ¿Son veraces? ¿Están verificados los datos y son apropiadas las citas? Y lo más importante, ¿tengo un corazón desinteresado? Reporto las noticias; esto no refleja mi opinión ni mi contenido favorito. Escribimos reportajes para los lectores, para que puedan obtener los hechos. No hay autovalidación y el crédito tampoco me pertenece.

Shifu es grande y Dafa es grande. Me siento afortunada de estar aquí y de haber sido elegida por Shifu para practicar Falun Dafa. Si no lo hago bien, ¿cómo podré corresponder a su compasión?

Leí innumerables reportajes de Shen Yun durante la gira de este año. Me conmovieron los elogios y las reflexiones del público, y me alegré de que se salvaran. También comprendí cómo mejorar la cobertura periodística para ayudar a salvar a la gente. Al igual que los artistas de Shen Yun, necesitamos autodisciplina, soportar las dificultades y cooperar de forma genuina y fluida. Solo priorizando la impresión de los lectores, podremos ayudar a Shifu a salvar a más seres conscientes.

Estas son mis experiencias personales. Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.

(Artículo seleccionado presentado en el Fahui de Japón 2025)