(Minghui.org) Tengo 75 años y comencé a practicar Falun Dafa en 1997. Mei, que ahora tiene 76, comenzó a practicar Falun Dafa en 1996. Ella participaba en el estudio del Fa en grupo, en hacer los ejercicios y en actividades para dar a conocer Falun Dafa a la gente.

Conseguí un ejemplar de Zhuan Falun en 1997, pero no comencé a cultivarme de inmediato. Quería leer el libro y luego decidir si esta práctica era adecuada para mí. Mei me animó. Siempre que iba a estudiar el Fa, o a hacer los ejercicios con otros practicantes o participaba en otras actividades de Dafa, me invitaba a acompañarla. Mis problemas cardíacos congénitos, que había sufrido durante años, desaparecieron simplemente porque me uní a ella. Pronto comencé a practicar Falun Dafa de verdad.

Mei dejó de practicar

Visité a Mei después de jubilarme y me enteré de que, como muchos otros, había dejado de practicar Falun Dafa después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) comenzara a perseguir la práctica, el 20 de julio de 1999. Desarrolló problemas cardíacos y le pusieron un marcapasos. Me sentí muy triste.

Hablé con ella y le pedí que reanudara la práctica. Aceptó y empezamos a estudiar el Fa juntas. Conocimos a un compañero practicante que sabía de informática. En ese momento él no tenía hogar por intentar evitar la persecución. Nos ayudó a montar un centro de producción de materiales y aprendimos a acceder a la página web Minghui. ¡Estábamos encantadas! También aprendimos como hacer materiales para informar a la gente sobre Falun Dafa y aconsejarles a renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles.

En 2013, la policía me detuvo por distribuir materiales de aclaración de la verdad y me mantuvo detenida durante 10 días. Tras mi liberación, mi familia y yo nos mudamos para evitar más acoso por parte de la policía y el comité vecinal.

Me encontré con el esposo de Mei, le conté que me habían detenido y le pedí que le dijera que no podía visitarla por el momento porque me preocupaba su seguridad. Más tarde leí en un artículo publicado en el Semanario Minghui, que el practicante que nos ayudaba con las computadoras fue sentenciado a tres años de prisión por intentar rescatar a compañeros practicantes.

En 2022, conocí a una compañera de trabajo que me contó que Mei había estado llamando a muchos de nuestros compañeros para encontrarme. Le pregunté si necesitaba algo. Me respondió: "Mei tiene Alzheimer y no habla bien". Llamé a Mei esa noche. Su esposo contestó el teléfono y me dijo que Mei tenía Alzheimer.

Visité a Mei al día siguiente. Se alegró mucho de verme y me dijo: "Me alegra mucho que estés aquí. Ahora no puedo acceder a Minghui. ¿Qué debo hacer?". Le dije que debería leer más el Fa.

Para mi sorpresa, Mei me dijo que su hijo le había descargado episodios de Baladas de Tambores y que quería que los escuchara con ella. Respondí: "Son para la gente común". Encendió la computadora y empezó a escuchar baladas de tambor. Tuve que despedirme. Mientras su esposo me acompañaba a la puerta, me susurró: "A menudo pierde los estribos y tira cosas".

Pensé: "¿Cómo llegó a esto? Debo ayudarla a retomar la práctica de Falun Dafa para que pueda cumplir su voto".

Me cultivo y ayudo a Mei

Shifu publicó "Por qué existen los seres humanos", el 20 de enero de 2023. Sentí que, dado que era la primera vez que Shifu enseñaba el Fa a todo el mundo, debíamos compartirlo con la policía. La policía me estaba vigilando en ese momento. Fui a la policía, hablé con ellos y recité "Por qué existen los seres humanos". 

Mi mente se llenó de compasión mientras hablaba con estos oficiales y no tenía miedo. Quería ayudarlos a comprender la verdad sobre Falun Dafa y a que dejaran de participar en la persecución. Esperaba que eligieran un futuro brillante. Pero después, allanaron mi casa y me llevaron a la comisaría. Seguí hablándoles de Falun Dafa y recitando "Por qué existen los seres humanos". Me escucharon. También envié pensamientos rectos para eliminar los factores malignos que los impulsaban y le pedí ayuda a Shifu. Con la protección de Shifu, la policía me liberó esa misma noche y notificó a mi familia que me llevaran a casa.

Después de eso, cada vez que salía de casa, me seguían policías y miembros del comité vecinal. El vecindario también instaló cámaras de vigilancia para vigilar mi casa, y la policía me acosaba en todas las fechas importantes del PCCh. Todo esto me presionó muchísimo y me causó ansiedad. Seguí estudiando el Fa y sabía claramente que solo leyéndolo diligentemente podría mantener mi fe firme en Shifu y en el Fa. Mientras me comportara de acuerdo con las enseñanzas, podría seguir mi camino de cultivación.

La siguiente vez que visité a Mei, estaba en la cama. Me dijo que se había roto la pierna y me contó cómo había sucedido.

Le dije: «Shifu publicó un nuevo Jingwen, ‘Por qué existen los seres humanos’. ¿Qué tal si te ayudo a subirlo a tu computadora?». Sus ojos se iluminaron al enterarse de que Shifu había publicado un nuevo artículo, pero se apagaron poco después.

Dijo con pesimismo: «Dejé de practicar».

Cuando le pregunté por qué, respondió: «Cuando te detuvieron, llevé todos mis libros de Falun Dafa y algunos materiales a casa de un familiar. Pasaron diez años. Cuando fui a recuperarlos, habían desaparecido. Mi familiar se había deshecho de ellos. No podía aceptar cómo trataban mis preciados libros. Al llegar a casa, empaqué seis cajas con sus pertenencias y les pedí que se las llevaran. Tampoco quería guardar sus cosas en mi casa».

Le pregunté si esa era la razón por la que había dejado de cultivarse. Asintió y dijo: «No me cultivé bien. Volveré a cultivarme más tarde, cuando tenga otra oportunidad».

Recité el Fa de Shifu:

“Esta vida tuya ha venido a la Tierra por este asunto, cómo puede ser que no seas diligente, ¿has aflojado? ¡Es una oportunidad, la oportunidad de la antigüedad! No importa cuán largo sea el tiempo, todos se están preparando para este asunto, sufriendo, disolviendo ye, transitando en el sufrimiento hasta hoy, y al contrario, no eres más diligente, ¿no es lamentable? ¡¿O no?! Pero este paso es lo más clave, si no eres diligente, estarás acabado. ¿Acaso en tu vida no es todo para este momento? (Enseñando el Fa en el Día Mundial de Falun Dafa). 

Dije: “Shifu esta presentando Falun Dafa al mundo humano, es la última vez que un Fa recto se presentará a la humanidad actual. Además, el universo ha llegado al final del proceso de destrucción dentro de las leyes de formación, asentamiento, degeneración y destrucción. No habrá otra oportunidad. Si estamos atrapados en los asuntos mundanos y en los apegos, no podremos cumplir nuestra misión de ayudar a Shifu a salvar vidas ni seguirlo al Cielo. ¿No es una lástima? Leamos el nuevo artículo de Shifu: “Por qué existen los seres humanos”.

Nos turnamos y cada una leyó un párrafo. Al terminar, parecía animada, así que le pregunté si aún quería cultivarse. Me respondió: “Quiero, pero no me cultivé bien”.

Respondí: “Nada de lo que le sucede a un practicante de Dafa es accidental. Mira hacia dentro para ver qué te detiene y corrígete. Los practicantes se cultivan, y alcanzan el despertar en el Fa recto y eliminan los apegos”.

Reflexionó un momento y dijo: “Cuando me dijeron que se habían deshecho de mis preciados libros, me molesté. Esos libros valían más que mi vida. Me enojé con ellos y me negué a tener sus cosas en casa. Mi mentalidad competitiva me venció, ¿verdad?”.

“Tenías una mentalidad competitiva”, respondí. “Además, guardaste estos preciados libros en casa de otra persona durante diez años. Esos libros sirven para guiar nuestra cultivación. ¿Los leías con regularidad? Además, los practicantes de Dafa deben respetar a Shifu y el Fa. La cultivación es algo serio. Parece que te fue fácil decir que dejarías de practicar”.

“No lo pensé mucho”, dijo. “Por lo que has dicho, me he dado cuenta de mis defectos. Necesito reflexionar seriamente sobre mis problemas”.

Le dije: “Si quieres retomar la cultivación, debes escribir una declaración con tu nombre real y enviarla a la página web Minghui”. Ella dijo que sí y que quería que la ayudara a enviarla.

Su estado mental había cambiado por completo desde que volví a buscarla. Podía oír bien, su voz había vuelto a la normalidad y veía con claridad. Su tez resplandecía. Estaba decidida a retomar la práctica. Cuando más tarde le pregunté a su esposo si aún tenía Alzheimer, sonrió y respondió: “Para nada”.

Cuando se publicó “Por qué existen los seres humanos”, lo memoricé para ayudar a explicar la verdad sobre Falun Dafa a la gente. A veces intentaba memorizar una frase leyéndola muchas veces antes de comprenderla, y luego la memorizaba.

Después de eso, comencé a memorizar todos los nuevos Jingwen de Shifu. Recitaba las nuevas enseñanzas de Shifu siempre que tenía tiempo, ya fuera en casa, de viaje o en el autobús. Recitaba estos artículos todos los días. Comprendí que solo asimilada al Fa podía cultivarme y conducirme según el Fa en todo momento. He practicado Dafa durante 28 años. Cada paso de mi progreso se debió a la guía y protección compasivas de Shifu.