De ser discriminada a ser respetada y confiable

(Minghui.org) Estaba en mi tercer año de secundaria en 1996 cuando un cambio en mi situación familiar me hizo perder interés en el examen de ingreso a la universidad. Solo estaba cuidando a mi padre con preocupación todos los días, todo el día. Mientras pasaba por estas dificultades, mi tía me dio un libro precioso, Zhuan Falun, y un folleto que contenía una colección de historias de cultivación escritas por practicantes de Dafa.

Los amplios y profundos principios del Fa de Falun Dafa cambiaron la forma de pensar de mi padre, y la atmósfera tensa en nuestra familia se relajó y calmó gradualmente. El odio y la ira en mi padre también desaparecieron gradualmente. Estaba tan agradecida que las palabras no pueden describir mi gratitud a Shifu. Pensé que esta práctica era lo que había estado buscando. Mi padre y yo nos embarcamos en nuestro camino de cultivación.

El 20 de julio de 1999, el Partido Comunista Chino (PCCh) comenzó a perseguir a Falun Dafa, y muchas personas fueron engañadas, por lo que comenzaron a mirar a Dafa de manera negativa. Cuando mi hijo ingresó a la escuela primaria, se les pidió a todos los estudiantes que se unieran a los Jóvenes Pioneros. Mi esposo, que también es practicante, fue a la maestra de aula para aclararle la verdad, explicando porqué nuestro hijo no podía unirse a los Jóvenes Pioneros. La maestra dijo: "Respetamos sus creencias personales".

Sin embargo, más tarde descubrí que nuestro hijo había sido aislado. Por ejemplo, siempre lo obligaban a sentarse en la última fila, mientras que los demás estudiantes podían cambiar de asiento después de un tiempo. El cuaderno de trabajos de mi hijo tampoco tenía ningún comentario alentador de los maestros. Se volvió reacio a ir a la escuela.

Un día era voluntaria en la escuela y estaba dirigiendo el tráfico fuera de la entrada de la escuela cuando conocí a la maestra de aula. Después de algunas bromas, la maestra mencionó que había abofeteado a mi hijo, sonando un poco avergonzada mientras hablaba. Le dije a la maestra honestamente: "Mi hijo no me mencionó nada sobre este asunto. Simplemente me dijo que no le gustaba ir a la escuela recientemente. Si mi hijo hace algo mal, puedes disciplinarlo. Cuando llegue a casa, lo consolaré y lo dejaré reflexionar en lo que hizo mal para que pueda hacerlo bien la próxima vez".

También le dije a su maestra que mi hijo tiene un corazón bondadoso. "Hace unos días, vi tres bolsas de escombros de construcción tiradas en medio de la carretera, con piezas de concreto y barras de refuerzo que sobresalían de ellas. Los peatones, bicicletas, vehículos eléctricos y, especialmente, los repartidores, tenían que conducir en curvas en S para evitar los escombros, lo que lo hacía bastante peligroso para ellos. Habíamos pensado que la tienda en remodelación junto a las bolsas las movería.

"Sin embargo, de camino a la escuela al día siguiente, las tres grandes bolsas de escombros todavía estaban allí, y los vehículos todavía tenían que esquivarlas. Mi hijo dijo: 'Mamá, esto es demasiado peligroso. ¿Por qué dejaron los escombros allí y nadie se ha ocupado de ellos? Han estado allí desde ayer'.

"Respondí: 'Sí, este asunto también nos dice que debemos ser considerados cuando hagamos cosas en el futuro. Tenemos que ver si las cosas que hacemos causarán problemas a los demás. ¿Por qué no trasladamos estas 'grandes bolsas' al borde de la carretera?'. Aceptó felizmente.

"Las tres grandes bolsas de escombros eran tan pesadas que nos tomó mucho tiempo y todas nuestras fuerzas antes de que lográramos llevarlas al borde de la carretera. La cara de mi hijo estaba enrojecida y sus palmas estaban rojas e hinchadas con algo de piel rota. El dolor punzante lo hizo gemir de dolor. Sin embargo, dijo: 'Estoy feliz de poder ayudar a demás'.

"En realidad, ha habido muchos incidentes similares como este, pero no se lo he dicho a nadie, porque los cultivadores de Falun Dafa usan Verdad, Benevolencia y Tolerancia para educar a sus hijos. Todos están tratando de ser buenas personas en sus respectivos entornos, como en sus lugares de trabajo y con sus familias. Todos nos exigimos hacerlo desde el fondo de nuestro corazón". Vi que los ojos de la maestra tenían lágrimas en ellos. 

Ella dijo: "Si tan solo hubiera podido enterarme de la situación del niño antes". Ella estaba conmovida.

Al final del semestre, la maestra me recomendó para el premio a los padres sobresalientes, pero lo rechacé cortésmente y le dije: "Hice lo que pude para ayudar a la clase y a la escuela. No pensé demasiado en ello. Puedes darle el honor a otro padre". La maestra respondió: "Te lo doy, porque te lo mereces".

Más tarde, mi hijo fue a la escuela secundaria y tuvo otra maestra de aula. En ese momento, la policía local y el personal de la propiedad a menudo venían a acosarnos. El oficial de policía local también era la persona a cargo de la seguridad de la escuela. La nueva maestra de aula tenía una maestría y había sido fuertemente influenciada por la cultura del PCCh. No solo decía cosas horribles, sino que también era rígida y manejaba los asuntos de una manera estereotipada. Por lo tanto, muchos padres no estaban dispuestos a apoyar su trabajo.

Yo estaba bajo un tremendo estrés en ese momento, ya que las tribulaciones seguían llegando. Nuestra casa estaba siendo monitoreada, estábamos siendo acosados por la policía local, y la maestra se había quejado a las autoridades sobre mí (le había aclarado la verdad a la maestra antes). A pesar de todo esto, traté de completar las tareas que me asignó esta nueva maestra de aula, sin ninguna queja. Quería hacerle ver que los practicantes de Dafa son buenas personas. A través de más de un año de interacciones, gradualmente comenzó a sonreírme.

Todo tipo de asuntos violentos y extremos tienen lugar en la sociedad y se han vuelto especialmente frecuentes en China. No hace mucho, ocurrió uno de esos incidentes extremos en la escuela y uno de los padres de un estudiante ya había tratado de vengarse, pero fue en vano.

La maestra de aula pidió a cuatro padres que tuvieran una reunión con el director, y yo fui una de ellos. Durante la reunión, los padres estaban terriblemente preocupados al hablar sobre el incidente extremo. Los ojos ansiosos de todos hicieron que todas las personas que asistían se sintieran muy incómodas.

Dije: "Hacemos todo lo posible para pensar en los demás de una manera positiva y proteger su privacidad. Esta es una forma de respeto a los niños y a los padres que estuvieron involucrados en el incidente. Cuando los hacemos sentir respetados, tendrán la oportunidad de tener mentes claras y volverse racionales en su comportamiento. Sin embargo, todavía tenemos que asegurarnos de que se apliquen medidas de seguridad sólidas, para que nada salga mal. Solo tenemos que asegurarnos de que todos los pasos se ejecuten correctamente. No tenemos que estar tan ansiosos".

El director, los maestros y los otros padres estuvieron de acuerdo en que esta era una muy buena manera de manejar el asunto. Todos se relajaron mucho, y el representante de los padres y la escuela llegaron a un acuerdo sin más.

Desde entonces, cada vez que la maestra me ha visto, me ha sonreído y puedo sentir la felicidad que proviene del fondo de su corazón. La impresión de la maestra sobre nuestro hijo también ha cambiado. Ella dijo: "Al estudiante simplemente le gusta hacer deportes. Está bien siempre y cuando preste atención a su seguridad". Algunos padres me felicitaron diciendo: "No te alarmaste cuando sucedieron las cosas y manejaste el asunto de manera racional y tranquila".

Familiares y amigos, incluidos los padres de otros estudiantes, a menudo me buscan para discutir sus asuntos personales y me han pedido consejo. Todos saben que practico Falun Dafa y confían mucho en mí, diciendo que no soy egoísta cuando hago las cosas. Han dicho que soy sincera, entusiasta, racional y cumplo mis promesas, lo que me convierte en una persona a la que admiran.

Mi tía dijo: "Cuando persististe en practicar Falun Dafa hace muchos años, sentí que eras tan tonta y que habías sido engañada, y que toda tu educación universitaria se había desperdiciado y eras muy ingenua. Sin embargo, han pasado más de 20 años, y de entre todas las chicas, eres la más perspicaz y previsora. Has criado a tu hijo y has manejado bien a la familia. Eres la gloria de nuestra familia extensa".

Gracias, Shifu y Dafa, por ayudarme a cambiar de ser alguien que fue discriminada a alguien que es respetada y en quien la gente confía.