(Minghui.org) A lo largo de la historia, la cultivación ha sido un esfuerzo personal en el que cada persona solo necesitaba cultivarse para sí misma y alcanzar su propia perfección (iluminación). Sin embargo, el camino de cultivación para los practicantes de Dafa es para el bien de los demás. Estudiamos el Fa juntos, compartimos nuestros entendimientos basados en el Fa y ayudamos a Shifu a salvar seres conscientes para cumplir mejor con la responsabilidad histórica que se nos confió.

Recientemente, el esposo de la practicante Meilin insistía en que se divorciaran. La razón aparente era que quería cederle las casas a la hija de su exesposa. Temía que su propia hija no tuviera una casa cuando él fuera mayor. Al principio, Meilin no quería divorciarse, pero su esposo le causaba problemas constantemente, así que finalmente accedió. Antes de formalizar el divorcio, su esposo le dijo que no se divorciaría si ella le cedía ambas casas.

Meilin no estuvo de acuerdo. Apenas dos horas antes de la fecha prevista para la firma del divorcio, cuatro compañeros practicantes quisieron conversar con ella basándose en el Fa. Todos compartieron sus opiniones y la ayudaron a aclarar la verdadera naturaleza del asunto.

Las viejas fuerzas estaban usando a su esposo para organizar esta tribulación, para ayudarla a eliminar sus apegos al beneficio personal y al sentimentalismo. Ella también había dicho que quería eliminar sus apegos y dejar de pelear con su esposo simplemente dejándole salirse con la suya. Pero este deseo provenía desde la perspectiva de una cultivación personal y era egocéntrico, carecía del aspecto de salvar a los seres conscientes.

Su esposo parecía tener la culpa, pero esto no era cierto, porque lo que uno ve superficialmente no es la verdad. La verdad debe verse a través del Fa.

Desde la perspectiva de priorizar a los demás, su esposo también se benefició de la cultivación de ella en Dafa. Si se divorciaran y él se quedara con gran parte de su propiedad, ¿no perdería su esposo una gran cantidad de virtud? En realidad, no estaría obteniendo lo que realmente deseaba en esta vida. Por el contrario podría perder algo aún más valioso: la oportunidad de apoyar a una practicante en la validación de Dafa.

Desde una perspectiva muy elevada, ¿es posible que las palabras de su esposo no fueran suyas? ¿Es posible que las viejas fuerzas lo indujeran a querer divorciarse? ¿Quizás las personas que estaban siendo guiadas hacia una practicante de Dafa para su salvación eran los acreedores de vidas pasadas de su esposo, o de sus antepasados? ¿Es también posible que los innumerables seres en el vasto sistema cósmico correspondientes a su esposo estuvieran enviando un grito de ayuda para ser salvados?

Desde la perspectiva de salvar a los seres conscientes, ¿no tienen los practicantes de Dafa la responsabilidad de salvar a los seres conectados con sus cónyuges y darles buena fortuna?

Desde la perspectiva de la rectificación del Fa, este asunto no se trata del divorcio en sí. Es, más bien, una oportunidad para que los practicantes de Dafa cumplan su misión de salvar compasivamente a los seres conscientes y validar Dafa.

Todos discutieron el asunto basándose en el Fa y complementaron sus entendimientos. La mentalidad de Meilin también se abrió y conectó con el Fa. Adquirió mucha más claridad sobre sus responsabilidades y su misión.

A través de este incidente, me he dado cuenta de que si un practicante de Dafa se cultiva si mismo, sin compartir experiencias ni cooperar con otros practicantes, y hace las tres cosas él solo, podría parecer muy diligente en la superficie. Pero es probable que se deje llevar por la cultivación personal, lo cual es un arreglo de las viejas fuerzas.

Cuando los practicantes de Dafa debaten cosas entre ellos, cooperan bien y se ayudan entre sí, formarán un gran campo de energía, tendrán mayor sabiduría y salvarán a más seres conscientes.

Los artículos en los que los cultivadores comparten sus entendimientos generalmente reflejan la percepción de un individuo en un momento determinado en función de su estado de cultivación, y se ofrecen con el espíritu de permitir la elevación mutua.