(Minghui.org) “No basta con realizar jornadas informativas. Necesitamos un proyecto que pueda llegar a todos los alemanes, por ejemplo, un periódico”. Un practicante expresó estos pensamientos hace más de 20 años durante una conferencia de intercambio de experiencias. También hablamos sobre cómo podríamos llegar a más personas, para que se enteraran de la persecución que enfrentan los practicantes de Falun Dafa.
La idea de comenzar un periódico tenía sentido para mí, pero en ese momento no tenía idea de cómo organizarlo e implementarlo, o qué papel desempeñaría.
Unos años más tarde, mi hermana, que también practica Falun Dafa, me dijo que los practicantes habían fundado un periódico y que quería escribir artículos. Me sugirió que ayudara con el diseño.
Hubo una edición impresa semanal, pero se suspendió en 2012 y ya no me necesitaban. No fue hasta 10 años después que volví a formar parte del proyecto. Durante todos estos años había deseado formar parte de The Epoch Times.
Aclarando la verdad sobre Falun Dafa en el trabajo
En ese momento, nunca hubiera considerado dejar mi trabajo estable en una firma de arquitectura. Me sentía libre, independiente y disfrutaba de un período de cultivación relativamente despreocupado. A veces incluso pensaba que la cultivación era fácil y que tenía pocos apegos porque todo iba tan bien. Tenía suficiente dinero y podía tomar vacaciones cuando quisiera para poder participar en actividades por todo el mundo.
Mi jefe, que había construido un negocio familiar exitoso, me valoraba y confiaba en mí. Como empleada que había estado en la empresa casi desde su fundación, a menudo tenía que capacitar a nuevos empleados. Había pocos conflictos y podía resolverlos muy rápidamente basándome en los principios del Fa.
Cuando me entrevistaron para el trabajo hace años, le expliqué a mi jefe y a su esposa qué es Falun Dafa y que lo practicaba. Durante los 18 años que trabajé allí, les expliqué repetidamente a él, a su familia y a mis compañeros de trabajo sobre la persecución en China. También les hablé sobre la Banda Marchante Tian Guo y Shen Yun, que vio con su esposa y otros dos familiares.
Una vez, cuando él estaba en Changchun, China, por negocios, un taxista chino pasó por la casa de Shifu y comenzó a calumniarlo a él y a Falun Dafa. Mi jefe dijo: “Una practicante de Falun Dafa trabaja para mí y es una muy buena empleada. Aquellos que creen que Falun Dafa es bueno y apoyan a los practicantes de Falun Dafa serán bendecidos y experimentarán felicidad”.
Shifu nos enseñó:
“Frecuentemente digo que durante la rectificación del Fa no tengo en cuenta los errores pasados de ningún ser consciente, y que sólo miro la actitud de los seres conscientes hacia Dafa durante la rectificación del Fa” (Girando la rueda hacia el mundo humano, Escrituras esenciales para mayor avance (III)).
El negocio familiar creció de 2 a 30 empleados, y no tuvimos problemas para conseguir contratos.
Reconociendo pistas
Un día de 2022, un empleado de The Epoch Times me llamó de pronto y me preguntó si quería volver a participar en el diseño del periódico, ya que también habría una edición impresa. Me estremecí e inmediatamente dije que sí.
Para entonces, había reducido mis horas de trabajo y estaba considerando ayudar con el periódico un día a la semana. Sin embargo, poco tiempo después, resultó que, después de todo, no me necesitaban y me sentí muy decepcionada.
De nuevo pensé que simplemente aún no había llegado mi momento. Pero, algún tiempo después, otro empleado de The Epoch Times me llamó y me sugirió que aprendiera a escribir artículos.
Recordé los primeros días hace muchos años cuando mi hermana escribía artículos. En ese momento, ni siquiera me atrevía a escribir un pie de foto porque pensaba que no podía hacerlo. Pero ahora tomé la llamada como una señal y, dado que el empleado se ofreció a enseñarme a escribir, acepté. Pensé que continuaría en mi antiguo trabajo durante 4 días a la semana y solo escribiría para ET (Epoch Times) el quinto día. Me dije que algún día estaría en ET a tiempo completo, pero ese día aún estaba muy lejos.
En el verano de 2022, se celebró una importante reunión con todos los empleados cerca de Berlín. Cuando mi colega me preguntó por qué no empezaba a trabajar a tiempo completo, volví a poner todo tipo de excusas. Mi padre ya era mayor y no podía mudarme a una ciudad lejana ahora. En el fondo, no quería renunciar a mi trabajo seguro y cómodo. La ilusión de que lo perdería todo surgió en mí. Pero como cultivadores, se nos exige que abandonemos el apego a las ganancias materiales y “elevar el nivel”, como enfatiza Shifu en la Cuarta Lección de Zhuan Falun. Los practicantes en el período de la rectificación del Fa deben cumplir con sus votos.
Decisión tomada
En el otoño de ese mismo año, estaba aproximadamente un 80 por ciento segura y sentí que pronto sería el momento adecuado para unirme al periódico. Después del Fahui en Varsovia en octubre, ya no tuve dudas. La historia de un médico que había dejado su trabajo bien remunerado para trabajar de lleno en ET me conmovió profundamente. Y nuevamente, dos empleados de ET me preguntaron si quería trabajar a tiempo completo en The Epoch Times. Tomé mi decisión en el vestíbulo de la sala de conferencias.
Cuando renuncié a mi trabajo, mi jefe se enojó mucho y gritó que no podía renunciar. Pocas veces lo vi tan enojado. Cuando se calmó un poco, dijo: está bien, después de seis meses puedes volver. Mantendré tu puesto aquí para ti. Me conmovió profundamente y sentí el profundo aprecio de un ser viviente por Falun Dafa y por mí como practicante. Entendí por qué Shifu me envió a trabajar en esta oficina.
Después de eso, todo fue muy rápido, tuve conversaciones maravillosas y profundas con mis colegas y pude contarles a todos más sobre The Epoch Times y mi nueva misión. La contable rompió a llorar durante nuestra conversación y me abrazó. En las pocas semanas que quedaron, hubo varias cenas de despedida y sentí cómo la gente entendía profundamente cuántas cosas dependían de mi nueva tarea. Ahora sentía claramente que mi tiempo allí realmente había terminado.
Superando obstáculos y dificultades
Durante las dos primeras semanas después de empezar a trabajar a tiempo completo desde casa para The Epoch Times, conduje hasta Berlín para conocer el lugar. Planeaba mudarme allí lo antes posible, pero como había vivido en un pequeño pueblo toda mi vida, evitaba las grandes ciudades tanto como podía, así que en esas dos semanas me di cuenta dolorosamente de lo que significaría vivir en una gran ciudad.
Un practicante trató de animarme y dijo que Shifu definitivamente haría arreglos para un apartamento en el que pudiera vivir. Pero yo tenía serias dudas. Además, nunca me había mudado antes y no sabía cómo iba a encontrar un apartamento.
De repente me enfrenté a una enorme montaña de burocracia y cosas por hacer. También me di cuenta de lo que significaba la profesión de periodista y vi lo lejos que estaba de ella. Otros dos colegas y yo finalmente nos inscribimos en un curso de formación. De un día para otro, mi vida sencilla y agradable se acabó y me enfrenté a desafíos sin precedentes. Dada la gran carga de trabajo, ni siquiera podía imaginar tener tiempo para mudarme.
Desde que dejé mi anterior trabajo, parecía como si mi cultivación estuviera empezando desde cero. Comenzaron a aparecer apegos que pensaba que no tenía, y otros que creía que ya había superado resurgieron con toda su fuerza. Mi presión crecía día a día y me preguntaba constantemente si estaba haciendo lo correcto.
Me tranquilicé. Comprendí que mi verdadera naturaleza solo puede revelarse durante las pruebas y que era el momento de elevar mi nivel, y por lo tanto mis dificultades aumentaron.
Shifu dijo:
“Nosotros ya hemos eliminado incontables e innumerables porciones para ti. Queda solo ese poquito dividido en cada nivel y, a fin de elevar tu xinxing, se establecen algunas tribulaciones para forjar y refinar el corazón humano y quitar todo tipo de corazones de apegos. Estas tribulaciones son todas tuyas, las utilizamos para elevar tu xinxing y hacemos que las puedas atravesar todas” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).
Entonces, ¿qué puede haber de malo en trabajar a tiempo completo para un proyecto de Dafa? ¿No es nuestra misión salvar a la gente? Incluso me permitieron trabajar a tiempo completo, mientras que otros tenían que continuar con su trabajo común. Los obstáculos que se me presentaban solo servirían para mantener la dignidad y la pureza necesarias para poder trabajar en el proyecto, y los superaría.
Me prometí seguir por el camino, sin importar lo difícil que fuera. Después de unos meses de trabajar desde casa, sentí una gran separación de la oficina en Berlín y me sentí sola.
Después de que se introdujera un sistema de méritos, me sentí tratada injustamente, ya que sentía que, como principiante, tenía que hacer lo mismo que los editores experimentados. Sentía envidia de otros que, desde mi punto de vista, tenían tareas más agradables y fáciles. A veces me despertaba por la mañana en pánico y surgían malos pensamientos hacia mis superiores. Durante ese tiempo, formé un fuerte ye de pensamiento.
Cuando me elogiaban, volvía a despertar mi deseo de fama y esperaba que mis artículos fueran leídos más. Cuando mis artículos ocuparon un lugar bastante bajo en el sitio web, me sentí decepcionada y enojada. Por otro lado, me sentí avergonzada porque pensé que no era lo suficientemente buena. A veces incluso deseaba que mis artículos fueran leídos por la menor cantidad de personas posible. Y cuando un lector señalaba un error, casi me hundía en el suelo. Siempre tenía miedo de perder prestigio.
Mi situación llegó a un punto crítico cuando se introdujo una ronda temática matutina y yo debía ser responsable de un área específica. En mi trabajo anterior, yo era la experimentada, pero ahora era yo la que tenía que pedir ayuda para todo. Tenía miedo de que se rieran de mí, me criticaran y me rechazaran si no cumplía los requisitos. También estaba desesperada porque sentía que mi progreso era demasiado lento.
Esto duró varios meses y, a veces, me sentaba frente a un tema y mis pensamientos daban vueltas. Sentía que el cielo y la tierra se venían abajo y no podía plasmar nada en el papel. Cada día parecía un año. Encontrar un apartamento en Berlín desde el sur de Alemania también resultó ser una tarea imposible. Mientras que muchas personas ya habían encontrado apartamentos, a mí ni siquiera me habían llamado para una visita. Estaba decepcionada y desesperada.
Shifu dijo:
“Cuando atravieses una tribulación verdadera o una prueba, haz el intento; si es difícil de tolerar, trata de tolerar; si parece difícil de realizar y dicen que es difícil, entonces prueba un poco, a ver si realmente va o no va. Si de veras puedes llevarlo a cabo, descubrirás realmente que, ¡tras el verde oscuro del sauce, se hallan resplandecientes flores y otra nueva aldea!” (Novena Lección, Zhuan Falun).
Dejar ir, pero no rendirse
El Fa de Shifu y el aliento de los compañeros practicantes me ayudaron a no rendirme. De repente, hubo destellos de esperanza cuando Shifu me ofreció ayuda. Por ejemplo, una practicante me invitó a vivir con ella durante dos meses para que pudiera buscar un apartamento. Me sentí aliviada y acepté la oferta.
De repente, también pude mudarme fácilmente a otra área de la empresa, lo que antes no había sido posible, pero eso solo sucedió cuando pude aceptar mi situación.
Cuando finalmente llegué a Berlín para los dos meses, sentí como si me hubiera quitado una enorme montaña de encima y la situación era mucho más relajada. Me convertí en parte de la comunidad y a menudo me conmovía hasta las lágrimas la forma en que los practicantes me recibían.
Pero a medida que se acercaba el momento de tener que regresar a mi trabajo en casa, estaba nerviosa e irritable. Entonces recordé que Shifu ya había preparado mi camino, exactamente de la manera que era mejor para mí. Solo tenía que aceptar su arreglo.
Una semana antes de que terminaran los dos meses, me resigné a regresar a mi trabajo en casa. Pero, entonces, sucedió algo inesperado: fui una de los 300 solicitantes que encontraron un apartamento hecho a medida para mí, al borde del bosque y no lejos del lago, por exactamente el precio que podía pagar. ¡Apenas podía creerlo! Además, la fecha de mudanza estaba perfectamente acordada, ya que todavía tenía tiempo suficiente para organizar todo adecuadamente.
Vivo en Berlín desde febrero y todavía hay altibajos, pero cuando miro hacia atrás en los últimos dos años, estoy convencida de que, si no me rindo, Shifu siempre estará a mi lado.
Para concluir, me gustaría compartir una cita de Shifu que siempre me ha guiado a ser más valiente y a ser digna del título de “Dafa dizi en el período de la Rectificación”.
Shifu dijo:
“Tú puedes cultivarte a cuán alto nivel quieras, ¡solo tienes que atreverte!” (Fahui de Nueva York de 2019).
(Artículo seleccionado presentado en la Conferencia de intercambio de experiencias de cultivación de Falun Dafa en Alemania de 2024)
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