Practicantes adolescentes de Falun Dafa en Europa agradecen a Shifu

(Minghui.org) Con la llegada del Año Nuevo Chino 2025, tres practicantes adolescentes de Falun Dafa hablaron sobre sus experiencias de cultivación y agradecieron a Shifu por su benevolente guía.

Bindi, de Alemania, es una joven baterista y tambora mayor de la Banda Marchante Tian Guo de Europa. Cuando marcha al frente de la banda, se ve tranquila, confiada y serena. Es difícil creer que solo sea una estudiante de secundaria de 17 años. La banda a menudo participa en eventos en diferentes ciudades europeas y, durante los descansos, Bindi hace las compras y come pizza con los otros practicantes adolescentes.

Bindi agradece a Shifu.

Bindi se unió a la Banda Marchante Tian Guo cuando tenía 12 años y tocaba el tambor. Tenía solo 15 años la primera vez que dirigió la banda en un desfile. Después del desfile de dos horas, no sólo le dolía todo el cuerpo, sino que los demás miembros de la banda le señalaron que su dirección no era clara y que algunos de sus ritmos estaban mal. Sentía que la estaban tratando injustamente y que sus comentarios no estaban justificados. Estaba molesta y se notaba.

Después de calmarse, Bindi se recordó a sí misma que era una practicante, por lo que siempre que algo la molestaba, necesitaba analizar el problema basándose en los principios del Fa. Pensó: “Cuando me siento incómoda y siento que no me están tratando de manera justa, ¿no es una prueba para ver si puedo aceptar las críticas y si puedo mejorar?”.

Pensó en sus defectos y se centró en cómo mejorar sus técnicas. Después de dejar de lado sus objeciones, volvió a estar relajada y positiva. Después, los demás miembros de la banda dijeron que había mejorado.

Muchos jóvenes de la edad de Bindi beben y fuman, y algunos incluso fuman marihuana. Comenzó a practicar Falun Dafa con sus padres cuando tenía cuatro años y dijo que esas cosas nunca la atrajeron. Ella dijo: “No necesito cosas que sean dañinas para mi mente y mi cuerpo”.

Como no bebe ni fuma, algunos de sus compañeros de clase pensaron que era aburrida y no estaba de moda, pero Bindi se mantuvo firme en sus principios. Ella dijo: “Cada vez que puedo persistir, siempre tengo una sensación especial. Entiendo que es correcto evitar estas cosas”.

Bindi recordó una excursión escolar en la que algunos de sus compañeros de clase le hicieron una broma y agregaron alcohol en secreto a su bebida. Sin darse cuenta, bebió un trago. Esta fue la primera y única vez que bebió alcohol. Después, les dijo a sus compañeros de clase que eligió no beber debido a sus principios y que debían respetar su elección. Los que habían añadido algo a su bebida se disculparon con ella. Después de eso, a sus compañeros de clase ya no les importaba si bebía o no. En cambio, respetaron sus principios.

En cuanto a su confianza, que va más allá de su edad, Bindi dijo: “Falun Dafa me enseñó a atenerme a los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia para hacer las cosas correctamente. De esa manera, no hay problemas que no se puedan resolver”.

Al comienzo del nuevo año, Bindi agradeció a Shifu desde el fondo de su corazón: “No hay palabras que puedan expresar mi alegría y gratitud. Shifu nos guía en nuestro camino de cultivación. Shifu sufrió mucho por nosotros. Mi vida es muy cómoda y relajada. Debo superar las dificultades y los apegos en mi camino de cultivación. Agradezco profundamente a Shifu su benevolencia y guía”.

Un joven con problemas cambia

Borna estudia medicina en la universidad. Es alto, sonríe a menudo y le gusta hablar con la gente. Al mirarlo ahora, es difícil imaginar que alguna vez fue un joven con problemas. Como hijo único, Borna recibió mucho amor y atención. Sin embargo, influenciado por la sociedad moderna, se volvió desafiante cuando entró en la pubertad. Él consideró que el cuidado y la preocupación de sus padres eran una forma de restricción y dejó de hablarles. Luego comenzó a beber, fumar, salir de fiesta y consumir drogas.

Justo antes de que Borna hiciera los exámenes de ingreso a la universidad, un buen amigo le dio una copia de Zhuan Falun. Mientras lo leía, sintió una calma y una calidez que nunca antes había sentido. Su espalda, que se había lastimado en el pasado, ya no le dolía después de practicar los ejercicios. Eliminó todos sus malos hábitos y tuvo una comprensión totalmente nueva de la vida y la familia. Dijo: “Después de comenzar a practicar Falun Dafa, tuve compasión por otras personas e hice todo lo posible por ser tolerante. Mi mal carácter cambió gradualmente y me volví más tranquilo y tenía más autocontrol”.

Borna agradece a Shifu.

Antes de comenzar a practicar Falun Dafa, Borna no apreciaba todo lo que su madre hizo para organizarle una gran fiesta de cumpleaños cuando cumplió 18 años, e hizo enojar mucho a su abuela. Después de comenzar a cultivarse, organizó una fiesta para su cumpleaños número 19 e invitó a 25 de sus familiares. Ayudó a su madre a decorar el salón y a preparar la comida y las bebidas. El día de la fiesta, se paró en la puerta y dio la bienvenida a todos con una sonrisa. Habló y rió con los invitados. Cuando todos se fueron, les dio un abrazo a todos y les agradeció por haber venido.

Borna está agradecido por sus cambios positivos y dijo: “Me he beneficiado muchísimo. Todo esto es gracias a las enseñanzas de Shifu. Es Shifu quien me ayudó a convertirme en una mejor persona que pone a los demás en primer lugar. Quiero agradecerle a Shifu con el mayor respeto desde el fondo de mi corazón. ¡Le deseo un feliz Año Nuevo! ¡Gracias, Shifu! ¡Feliz Año Nuevo!”.

Creciendo inmersa en Dafa

Xiying, que vive en los Países Bajos, comenzó a estudiar contabilidad en la universidad el año pasado. Empezó a practicar Falun Dafa con sus padres cuando era pequeña. La persecución comenzó en China en 1999 cuando tenía nueve años, por lo que ella y sus padres se mudaron a los Países Bajos. “Desde que era pequeña, mi padre y mi madre me han educado según los estándares de Dafa”.

Xiying dijo: “La gente necesita volver a su ser original y verdadero. Los practicantes vinieron a este mundo mundano para poder cultivarse y seguir a Shifu para salvar a los seres conscientes. Nunca cuestioné eso. También siento que debo hacerlo aún mejor”.

Xiying, que creció inmersa en Dafa, agradeció a Shifu.

Xiying aprendió a tocar la flauta china cuando tenía 12 años y se unió a la Banda Marchante Tian Guo cuando tenía 14. Debido a sus limitadas finanzas, los padres de Xiying no pueden ir a participar en eventos con ella, por lo que viaja con los demás miembros de la banda. Los eventos se llevan a cabo en diferentes países de Europa, por lo que Xiying, que puede hablar tres idiomas, se convirtió en una veterana en ir de gira. Ya sea para encontrar el camino en el teléfono móvil, encontrar un restaurante o comprar cosas, ayuda a todos. Siempre tiene una dulce sonrisa en su rostro y se convirtió en la traductora de la banda.

Xiying dijo: “Si no hubiera cultivado Dafa, mis valores podrían ser los mismos que los de la gente común”. A Xiying le encanta dibujar, pero descubrió que las clases de arte se centran en perspectivas modernas. Cuando estaba en una exposición de pintura moderna, la maestra pidió a todos que sintieran el estado mental y el objetivo de los pintores mientras creaban sus pinturas. Cuando vio que los dibujos eran sólo líneas desordenadas y manchas de color, le preguntó a la maestra sobre ellos. La maestra le explicó que esto era una muestra de la tristeza y el dolor que sentía el pintor en ese momento. Xiying pensó que lo que dijo su maestra tenía sentido, pero sintió que la pintura se veía oscura y no podía entender por qué se exhibían grafitis, rostros humanos extraños, chatarra y demás en los grandes salones de los centros de arte de renombre.

Xiying dijo: “Después de estudiar el Fa y recordar lo que dijo Shifu, comprendí que, como seres humanos, debemos recurrir a nuestro lado divino en lugar de permitirnos complacernos en nuestros estados incorrectos”.

Con respecto a los muchos problemas que enfrenta la gente hoy en día, Xiying dijo: “Si todos pudieran acatar los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia, los estándares morales mejorarían y todas las cosas extrañas y desordenadas que suceden hoy podrían no existir”. Con la llegada del nuevo año, Xiying juntó las manos [en un gesto de respeto] y dijo: “¡Le deseo a Shifu un feliz Año Nuevo! ¡Gracias, Shifu, por todo lo que has hecho por mí!”.