(Minghui.org) Soy una practicante de Falun Dafa en Norteamérica. Recientemente he visto cierta desinformación y rumores en Internet que atacan a Shen Yun, la Academia de Artes y la Universidad Fei Tian, lo que realmente me molestó. Mi hija ha estado entrenando danza clásica china en Fei Tian durante siete años y me gustaría compartir algunas de sus experiencias desde mi perspectiva como madre. Espero que ayude a la gente a ver una imagen más real de Fei Tian y Shen Yun.
Mi hija nos ha ayudado a generar conciencia sobre la persecución desde la infancia
Mi hija comenzó a leer, en China, libros de Dafa y a hacer los ejercicios cuando era muy pequeña. A menudo les decía a sus amigos del jardín de infantes y a su niñera que Falun Dafa es bueno. Se mudó al extranjero con nosotros cuando tenía seis años y participó en muchas actividades de Dafa, como desfiles y distribución de materiales para aclarar la verdad.
Mi esposo fue perseguido en China y detenido ilegalmente por ir a Beijing a apelar por Falun Dafa. Durante su detención, fue brutalmente golpeado y esposado a una silla de metal durante días sin poder dormir. También fue sometido a un intenso y coercitivo lavado de cerebro. Mi hija sabía del sufrimiento de su padre a pesar de que era sólo una niña. Más tarde, nos mudamos a Corea del Sur, donde todavía sufríamos el acoso de agentes del Partido Comunista Chino (PCCh). Nos cortaban la conexión a Internet y a menudo nos espiaban por la noche. Todo esto ejerció mucha presión sobre mi hija, pero al mismo tiempo, también le enseñó a ser fuerte.
Mi hija eligió ser bailarina
Mi hija vio Shen Yun por primera vez en 2008 y, desde entonces, siempre tuvo la esperanza de poder unirse a la compañía y convertirse en bailarina, pensando que sería una forma ideal de contarle a la gente sobre la persecución a los practicantes de Falun Dafa en China.
En aquel momento no teníamos los medios para conseguirle un profesor de baile, así que practicaba sola los splits. Dos años después, me pidió que la ayudara a inscribirse en la Academia de Artes Fei Tian, pero era demasiado joven para que la aceptaran en aquel momento. Esto la puso muy triste.
Más tarde emigramos a Norteamérica y resultó que nuestro casero era profesor de baile. Mi hija estaba muy contenta y practicaba con él todos los días. Aunque ella estaba un poco más crecida y tenía las piernas más rígidas, nunca se rindió a pesar de que el entrenamiento era bastante duro.
Cuando entró a la secundaria (una edad rebelde), empezó a jugar con sus compañeros de clase que también venían de China continental todo el día. Poco a poco, fue descuidando su cultivación y rara vez estudiaba el Fa o hacía los ejercicios. Empezó a compararse con las posesiones materiales de sus compañeros de clase. Pasaba la mayor parte de su tiempo libre jugando con su teléfono móvil , chateando en las redes sociales, y también se volvió irritable e indiferente.
Al ver el daño que las redes sociales estaban causando en ella, me preocupé mucho y traté de impedirle navegar en la red desconectando el cable de Internet. Esto la enojó mucho y me dijo que mi forma coercitiva de hacer las cosas no funcionaría con ella.
Más tarde, se volvió aún más renuente al estudio del Fa y a la práctica de los ejercicios, y se comportó como una persona común. Podía sentir el vacío y la impotencia en su corazón, y ella también sintió el dolor. Una vez me dijo: “Mamá, soy como una flor. Aunque los pétalos se han marchitado, mis raíces aún están en Dafa. A veces realmente quiero ir a un lugar tranquilo donde no haya nadie y leer libros de Dafa durante un día entero, pero ya no puedo hacerlo”. Me entristeció mucho escuchar esto.
Miré hacia dentro y comencé a cambiar. Traté de ser amable y compasiva y dejé de exigirle que estudiara el Fa e hiciera los ejercicios. En cambio, pasé tiempo charlando con ella y le hacía pequeños obsequios. También le conté historias de la cultura tradicional china y sobre mis experiencias de cultivación. Cuando estaba de buen humor, estudiaba el Fa con ella. Pronto, pudo sentir que yo era sincera y que solo quería animarla. Empezó a entender que, para un cultivador, uno no necesita renunciar a una vida 'normal', solo necesita dejar ir los malos pensamientos y comportamientos. A medida que nos volvimos más cercanas, ella me abrió su corazón.
La Academia del Norte en Middletown, Nueva York, comenzó a inscribir estudiantes de secundaria cuando mi hija estaba exactamente cursándola. Los profesores de danza allí provenían todos de la Academia de Artes Fei Tian. Realmente quería que mi hija ingresara allí, pero no quería presionarla.
Le dije: “Espero que puedas ir allí a estudiar, pero debes tomar tu propia decisión. No importa lo que decidas hacer, apoyaré tu elección. Pero trata de vivir a la altura de lo que decidas”.
Al principio ella estaba un poco indecisa ya que, había planeado ya, asistir a la Universidad de Toronto en el futuro. Después de pensarlo seriamente, decidió inscribirse en la Academia del Norte y formarse como bailarina.
“Mamá, he elegido el camino más difícil, pero no me arrepentiré”, me dijo.
“Deberías estar orgullosa de ti misma”, la animé con una sonrisa.
Mi hija cambió mucho para mejor
Mi hija fue una de las primeras estudiantes de la Academia del Norte. En ese momento, las instalaciones del internado eran todavía bastante rústicas, y el trabajo escolar y el entrenamiento de baile le ponían mucha presión. El mayor desafío para ella era que a los estudiantes no se les permitía navegar casualmente en Internet, y esto la hacía sentir muy incómoda porque ya era bastante adicta a Internet para ese entonces.
En los primeros seis meses, mi hija me llamaba a menudo, diciéndome que no quería continuar y que quería volver a casa. La animé, charlé y estudié el Fa con ella durante un rato casi todas las noches antes de que se fuera a dormir.
Con el tiempo, comencé a notar cambios en ella cada vez que volvía a casa para las vacaciones escolares. Era más respetuosa y sensata y había aprendido a ser agradecida, humilde y considerada con los demás. Estaba dispuesta a soportar las dificultades, era más disciplinada y también mucho más tranquila.
Sin embargo, ser admitida en la Academia Fei Tian no fue tan fácil como esperaba. Su altura siempre era un poco menor a la requerida (ha habido cambios en los requisitos de altura a lo largo de los años). A pesar de que trabajó duro, la rechazaron una y otra vez cuando fue a las entrevistas.
Una vez me dijo: “Mamá, cuando bajaba de la montaña (donde está ubicada la academia) después de cada entrevista, realmente envidiaba los árboles, porque pueden quedarse allí para siempre, pero yo tengo que irme una y otra vez”.
Le dije: “Hay un dicho: ‘La fragancia de la flor del ciruelo proviene del frío intenso’. Nadie puede tener éxito sin esfuerzo. No te preocupes demasiado por el resultado, el proceso es más importante. Puedes templar tu fuerza de voluntad y resistencia, lo que será una riqueza para toda la vida”.
Mi hija fue admitida por fin en la Academia Fei Tian y estaba muy feliz. Cada vez que volvía a casa para unas cortas vacaciones, me contaba sin parar sobre su vida en Fei Tian.
Le pregunté si se ponía nerviosa cuando veía a Shifu. “Para nada”, dijo, “Shifu es como un buen padre que cuida de nosotros en todo. A menudo nos lleva a comer comida deliciosa en nuestros días libres y nos da bocadillos y otras cosas útiles, y siempre las reparte a cada uno de nosotros en persona”. Me conmovió mucho lo que me dijo.
También me comentó: “Mamá, una cosa importante que he aprendido allí es que ahora sé lo que está bien y lo que está mal. En mi escuela, en casa, había muchos comportamientos poco saludables entre los estudiantes, pero nadie nos lo decía y todos seguían la tendencia. Aunque sabía que algo no estaba bien, me dejaba llevar, para que no me consideraran ‘rara’. De hecho, yo misma no tenía muy claras muchas cosas”.
“Pero en Fei Tian, todos somos practicantes de Dafa, y todos tratamos de comportarnos según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Si alguien es egoísta o quiere un trato preferente, los demás amablemente le recuerdan que no se comporte de esa manera”.
“Sé que si realmente quieres ser un practicante genuino, escucharás y te enmendarás. Si te aferras a tus propias costumbres y eres egoísta, te sentirás bastante fuera de lugar, porque nadie intentará complacerte simplemente porque quieres hacer las cosas a tu manera. Cuando las personas te dicen lo que es correcto desde su corazón, están siendo verdaderamente amables contigo”.
Me alegró mucho escuchar a mi hija decir eso.
También me contó cómo dejó de lado su ego y aprendió a cooperar trabajando en grupo.
Mi hija siempre ha sido competitiva y siempre quiere ser la mejor en todo lo que hace. Fue bailarina principal en la clase de danza en la Academia del Norte en Middletown antes de ir a Fei Tian.
Un día me dijo: “Mamá, cuando vi por primera vez que habían elegido a algunos compañeros que no eran tan hábiles como yo como bailarines principales, me sentí bastante incómoda porque mis técnicas eran mejores. Era solo que no era lo suficientemente alta. Incluso me sentí un poco celosa y movida por dentro”.
“Pero ya no me siento así”, continuó. “Cuando veo que la gente a mi alrededor piensa en todo el grupo, me doy cuenta de mi propio egoísmo. Más tarde, me convertí en la coordinadora de nuestra clase y era responsable de organizar las formaciones de baile. Al principio, pensé en colocarme en un lugar más visible pero luego descubrí que tomando tal posición haría que no se viera bien, así que, al final, me coloqué en la parte de atrás”.
“Ahora me doy cuenta de que mis atributos físicos no son lo suficientemente buenos para ser bailarina principal, por lo que me concentro más en ocuparme de los problemas diarios en nuestra clase, sé que mi misión es hacer bien cada tarea que se me asigna, y todo lo que todos hacemos es apoyar a todo el grupo. Algunos bailarines principales conocidos han dejado de interpretar papeles importantes a medida que envejecen, pero siguen practicando con seriedad todos los días como lo han hecho durante los últimos diez años. Todos los admiramos mucho”.
Mi hija también me contó un incidente. Eso me conmovió profundamente. Una vez, justo antes de la función, un bailarín principal se torció el tobillo y no pudo actuar. Rápidamente, reorganizaron sus formaciones de baile y ofrecieron una actuación perfecta ese día.
“¿Ensayaron de antemano para hacer frente a este tipo de situaciones?”, pregunté.
“No, mamá. Podemos lidiar con este tipo de situaciones porque todos en el grupo pensamos de la misma manera. Nos adaptaremos rápidamente a la situación y ofreceremos un espectáculo perfecto para el público. Nadie pensó en sí mismo, solo pensamos en cooperar bien con todos los demás con el mismo entendimiento”.
Me conmovió profundamente y pensé: su fuerte sentido de misión podría ser lo que impulsa a todos los artistas de Shen Yun a crear un milagro tras otro.
La escuela cuida bien a sus estudiantes
Yo era médica de profesión en China y sé que mi hija tendrá que soportar el dolor en el camino que ha elegido para ser bailarina. Es algo inevitable para cualquier bailarín o deportista profesional. Por ejemplo, una bailarina de ballet puede experimentar el dolor de las uñas de los pies que se desprenden y vuelven a crecer varias veces. La danza clásica china causa mucho menos daño físico en comparación.
Durante los últimos siete años, mientras mi hija estaba entrenando en Fei Tian, no sufrió mucho dolor, excepto por alguno ocasional en los pies y las caderas. Cuando los estudiantes experimentan algún dolor o malestar, su profesor siempre les sugiere que descansen un rato en lugar de esforzarse demasiado al límite. Los profesores de Fei Tian nunca niegan a los estudiantes el tratamiento médico, muy al contrario de algunos rumores.
Una chica de la clase de mi hija se está recuperando en casa en este momento debido a un dolor lumbar y está viendo a un médico regularmente para consultas. Sus padres y yo vivimos en la misma ciudad y nos conocemos bien. Otra estudiante acaba de ser ingresada en el hospital para una operación por una lesión en el pie.
Mi hija me llama a veces para pedirme consejo si alguien de su clase se ha torcido el tobillo, preguntándome cómo aplicar compresas frías o calientes o qué tipo de medicamento es mejor. Si se trata de una lesión importante, la Academia de la Artes Fes Tian siempre aconseja que la estudiante vaya al médico.
La experiencia de mi hija en la gira con Shen Yun
Una vez le pregunté a mi hija si se cansaba mucho cuando estaban de gira. “No, mamá, la gira anual es muy buena para nosotras”, dijo sin dudarlo.
Para los bailarines profesionales, además de tener buenas condiciones físicas y un entrenamiento extenuante, también necesitan buenas plataformas para presentarse y ganar una valiosa experiencia en el escenario. Por eso mi hija aprecia cada gira anual.
“La vida profesional de un bailarín es relativamente corta, y los artistas de otras compañías comunes tal vez no puedan participar en más de 100 espectáculos en escenarios de clase mundial en toda su vida profesional, pero nosotros damos más de 100 actuaciones cada año en esos escenarios”, dijo. “Por supuesto, podemos enfrentar desafíos y presiones en cada lugar al que vamos, pero esto nos permite ganar mucha experiencia en el escenario y madurar rápidamente, así que nunca me siento cansada, solo muy afortunada. Como bailarina profesional, sé cómo equilibrar las cosas mientras estoy de gira sin exigirme demasiado. Así que no hay de qué preocuparse, mamá”.
La profunda gratitud de una madre hacia Dafa, y hacia la Academia y la Universidad Fei Tian
Cuando mi hija era niña, soñaba con que algún día podría viajar alrededor del mundo. No podíamos permitirnos hacer realidad su sueño debido a nuestras finanzas, pero su sueño se hizo realidad cuando se unió a Shen Yun, porque viajan a diferentes países y ciudades, apreciando diferentes culturas alrededor del mundo.
Durante las vacaciones de verano de este año, mi hija me trajo un cuaderno del Museo Británico y un té exquisito como regalos y me contó cómo disfrutar del té de la tarde y algunas normas de etiqueta en la mesa.
Hay un viejo dicho chino: “Lee diez mil libros y viaja diez mil millas”. Es muy raro que los jóvenes de la edad de mi hija hayan tenido experiencias tan enriquecedoras que amplíen su visión del mundo.
En China, se nos consideraba una familia de ingresos medios y nuestra situación financiera era simplemente promedio después de mudarnos al extranjero. Las tasas de educación son bastante altas tanto en China como en el extranjero. He oído que incluso en una universidad privada promedio de los Estados Unidos, la matrícula por sí sola puede costar al menos 30.000 dólares al año, sin contar otros gastos relacionados con materiales de estudio y los costes de la vida universitaria. Habría estado absolutamente fuera de nuestras posibilidades.
Pero para los estudiantes de Fei Tian, todo es gratuito, incluida la matrícula, la comida y el alojamiento. Los estudiantes también reciben ropa apropiada para la temporada y solo necesitan dinero de sus padres para sus gastos personales. Cuando están en viajes anuales como parte de su programa de prácticas, se les proporciona alojamiento gratuito en buenos hoteles y comida cuidadosamente preparada. También les ofrecen subsidios para recibir capacitaciones y formación curricular.
Estoy profundamente agradecida a la Academia Fei Tian. No solo produce excelentes estudiantes como mi hija, sino que también se hace cargo de casi todos los costos que implica para los padres.
Una vez le pregunté a mi hija qué le gustaría hacer después de su carrera. Terminó en Fei Tian. Ella dijo: “Mamá, si no hay una razón especial por la que quieras que esté en casa cerca de ti, me gustaría quedarme, aunque ya no pueda bailar. Estoy feliz de hacer cualquier cosa aquí. Me gusta el ambiente. Es como una gran familia. No podré encontrar ningún otro lugar tan hermoso y puro como aquí donde estoy”.
Epílogo
Solía sufrir de una enfermedad cardíaca hereditaria, y cuando estaba al borde de la muerte, Falun Dafa me salvó y me dio una nueva vida saludable, sin pedirme un centavo. Cuando mi hija se vio afectada por la decadencia moral de la sociedad y no podía liberarse, la Academia Fei Tian la convirtió en una jovencita sobresaliente, también sin pedirme un centavo. Como padres, no hay palabras suficientes para expresar mi profunda gratitud a Dafa y a Fei Tian.
Sinceramente espero que mi artículo pueda ayudar a aclarar algo de la confusión y los comentarios calumniosos sobre Dafa, la Academia de las Artes y la Universidad Fei Tian.
También espero que aquellos ex alumnos que tienen reproches sobre Fei Tian puedan revisar con calma su experiencia en la escuela, dejar de lado sus resentimientos y tener más bondad y amor en sus corazones.
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