(Minghui.org) Soy un empleado de oficina y practico la cultivación solo. El Año Nuevo Chino pasado fue una fiesta tan relajada que me volví muy flojo en mi cultivación. Estaba tan enganchado a mi teléfono móvil que no paraba de ver vídeos cortos en él después de cenar y hasta medianoche. No podía parar, aunque estaba muy cansado. Me sentía mareado y muy indispuesto cuando me desperté al día siguiente. Quería salir de ese estado, pero sentía que me controlaban y no podía controlarme. Rogaba a Shifu que me ayudara todos los días.

El decimoquinto día del Año Nuevo tuve fiebre y síntomas de un fuerte resfriado. Practiqué los ejercicios de pie durante una hora y terminé los cuatro ejercicios. Al día siguiente, la fiebre desapareció. Sabía que se debía a que había visto tantas cosas malas, como sexo, amor, fama y ganancias, que habían envenenado mi mente y mi cuerpo. Debido al malestar, no vi la televisión en el móvil durante una semana. Después de eso, el veneno de mi cuerpo debió de limpiarse y ya no me controlaba el impulso de ver vídeos. Seguí pidiendo a Shifu que me ayudara y fortaleciera cada día para deshacerme de la lujuria y de mi apego al móvil y a la televisión, y pasé mucho tiempo memorizando el Fa.

Ahora sé que la cultivación es realmente seria. Cuando tus pensamientos no son correctos, debes corregirlos rápidamente. De lo contrario, habrá problemas.

Sin otros practicantes que te ayuden, un practicante que cultiva aisladamente puede flojear fácilmente. Cuando flojeaba, pensaba en cómo había estado estudiando el Fa y haciendo los ejercicios regularmente, así que, como me sentía solo, estaría bien ver videos en mi teléfono y TV para aliviar mi aburrimiento. Eso me llevó a hacerme adicto a los vídeos.

Desde entonces, sigo un horario diario. Cuando llego a casa, guardo el móvil en un cajón donde no pueda verlo. Sólo lo uso como teléfono.

Escribí esta experiencia para advertirme de que nunca más me dejaría llevar por la búsqueda de la comodidad. También espero que mi experiencia pueda ser útil a los compañeros practicantes que se encuentren en la misma situación que yo para reforzar su confianza en su capacidad de deshacerse de este apego.