​Las flores glorias de la mañana evocan recuerdos de una experiencia de hace más de 20 años

(Minghui.org) Un día, vi a una mujer recogiendo semillas de la planta gloria de la mañana. Yo también recogí algunas y las planté en una maceta en casa. Unos meses después, florecieron. Se abrían por la mañana y se cerraban por la tarde. Esto me recordó mi experiencia en 2002, cuando fui arrestada por la policía y detenida ilegalmente durante más de 6 meses.

Fui detenida ilegalmente en un centro de detención en otra ciudad el 22 de junio de 2002 porque hablé con personas sobre Falun Dafa. Muchos practicantes estaban confinados en una pequeña habitación. El espacio era tan reducido que teníamos que acostarnos de lado y no podíamos darnos vuelta. Un practicante dijo: "Una vez, el suelo estaba tan lleno de gente que ni siquiera había espacio para acostarse. Hacía calor y algunos se desmayaron. La policía nos llevó uno por uno al suelo de concreto afuera para que tomáramos aire".

Instintivamente miré por la ventana hacia el suelo de concreto y me sorprendió ver una planta de glorias de la mañana floreciendo brillantemente. Estaban extendidas por el mismo concreto donde una vez se habían acostado los compañeros practicantes. Estas glorias de la mañana eran únicas y permanecían abiertas las 24 horas del día. Florecieron día tras día, mes tras mes, desde el verano hasta el otoño. La persona que hacia el aseo dijo: "Es realmente extraño. Está haciendo frío, pero estas flores siguen floreciendo y sus hojas siguen verdes".

Todos los días, los practicantes estudiaban el Fa y enviaban pensamientos rectos. Incluso los reclusos no practicantes memorizaban los poemas de Hong Yin. El líder de la celda vigilaba y nos avisaba si venía algún guardia.

Los practicantes me dijeron: "Este ambiente relajado no fue fácil de conseguir. Los practicantes hicieron huelgas de hambre y fueron torturados. Enfrentaron estos sufrimientos con pensamientos rectos y continuaron aclarando la verdad, creando el ambiente actual".

Todos los días, un practicante recitaba el Fa mientras los demás escuchaban, incluidos los reclusos no practicantes. ¿Cómo memorizamos las enseñanzas? Los libros eran ediciones impresas en miniatura introducidas de contrabando por practicantes de afuera. Por la noche, los practicantes jóvenes copiaban las enseñanzas en papel higiénico relativamente liso. Cada persona recibía dos o tres secciones para memorizar. Una vez memorizada su parte, intercambiaban secciones hasta que se memorizaba toda la lección.

Durante esos seis meses, con la ayuda de los practicantes jóvenes, memoricé las enseñanzas. Han pasado más de veinte años desde que fui encarcelada, pero el sonido de los practicantes recitando las enseñanzas aún resuena en mis oídos. Frecuentemente recuerdo las escenas de los reclusos no practicantes memorizando Hong Yin y escuchando la verdad. Me entristece saber que el joven practicante que recitaba las enseñanzas con la voz más clara y fuerte fue arrestado de nuevo y torturado hasta la muerte.

Los practicantes no tenían relojes y estimaban la hora para enviar pensamientos rectos. El líder de la celda tenía un reloj y a menudo decía: "Es muy preciso". Durante el día, todos enviaban pensamientos rectos juntos y, por la noche, los que estaban de guardia lo hacían.

Los practicantes también enviaban pensamientos rectos para situaciones específicas, como cuando un practicante era perseguido o cuando había vigilancia. Una vez, una guardia se acercó a nuestra celda mientras enviábamos pensamientos rectos con las palmas erectas. Inmediatamente envié un pensamiento y la guardia se dio la vuelta y se fue.

El proceso de mi persecución también fue un proceso de aclarar la verdad. Hablé con todos los que conocí sobre Falun Dafa. Aquellos que entendieron la verdad jugaron un papel positivo. Una vez, una recién llegada dijo: "Tenía mucho miedo antes de venir aquí. Tenía miedo de ser golpeada. La policía que me trajo aquí me dijo que no tuviera miedo porque había muchos practicantes de Falun Dafa y todos eran buenas personas". Cuando llegó, vio lo amables que eran los practicantes.

En otra ocasión, una reclusa llegó llorando. Rápidamente le dimos pañuelos para que se secara las lágrimas y, una vez que se calmó, le explicamos la verdad sobre Falun Dafa. Nos escuchó recitar las enseñanzas y Hong Yin. En dos días, estaba alegre. Al tercer día, durante su interrogatorio, dijo: "Me alegro de haber conocido a los practicantes de Falun Gong. Si das un paso atrás, ves el vasto cielo y el mar". El oficial a cargo del caso y el demandante se quedaron atónitos. Se fue a casa dos días antes y dejó un juego nuevo de ropa de cama para los practicantes. Durante seis meses, al menos 200 personas entraron y cada una de ellas escuchó la verdad.

Mi hogar no está en esta ciudad. Mi esposo estaba hospitalizado y mis dos hijos, también practicantes, fueron detenidos y perseguidos. Compartí la comida y la ropa que las familias de los compañeros practicantes.

Durante esta persecución, interactué con la policía de la oficina de seguridad, la sub-oficina, la estación de policía y el centro de detención, y les dije la verdad. Debido a que me negué a ser "transformada", fui sentenciada a tres años en un campo de trabajos forzados. Ese campo de trabajos forzados también fue un lugar donde escribí cartas de aclaración de la verdad y aclaré la verdad en persona. Cuando la policía de la sub-oficina me llevó allí, el campo de trabajos forzados se negó a aceptarme y regresé a casa esa noche.

Han pasado más de 20 años. Quiero decirles a los practicantes que estuvieron detenidos conmigo en ese entonces que la sagrada relación predestinada con Dafa nos conecta, permitiéndonos cultivar como lo hicimos al principio y regresar a casa con nuestro Shifu. Ahora tengo glorias de la mañana floreciendo a mi alrededor todos los días.