(Minghui.org) Recientemente han aparecido muchos artistas callejeros en mi barrio y les gusta tocar su música favorita por las tardes. Yo vivo arriba, y a veces quiero estudiar el Fa o enviar pensamientos rectos, pero su música de alto volumen me perturba. Me molesta y me quejo.
Anoche salí y vi a un artista callejero que tocaba un instrumento de viento. Utilizaba un parlante para amplificar su música e iluminaba la zona con luces de colores para llamar la atención. Pensé: «Si no quieres molestar a tus vecinos, está bien que toques tu instrumento fuera. Pero ¿por qué usas un altavoz? ¿Intentas presumir? ¡Esto es contaminación por ruido»!
Entonces recordé las enseñanzas de Shifu: mirar incondicionalmente hacia dentro y cultivarnos. Así que me pregunté: «¿Por qué me molesta la música y qué apego se supone que debo eliminar? ¡Soy dominante! Sólo pienso en mis gustos y sentimientos personales, y no tengo en cuenta los de los demás.
Una practicante que conocí hace poco es muy devota cuando estudia el Fa. Siempre se sienta erguida, cruza dos veces las piernas y sostiene Zhuan Falum, el libro principal de Falun Dafa, delante de ella con ambas manos. Cuando se equivoca al leer y alguien la corrige, lee la frase dos veces.
Aunque es una buena actitud, me molesta. Cuando estudio el Fa con otros practicantes y cometemos errores, normalmente releemos las palabras correctamente y seguimos adelante. Cometer errores ya está interrumpiendo el flujo del estudio del Fa, así que nos corregimos y continuamos leyendo. Pero, cuando este practicante repite la frase dos veces, ¿es para hacerme ver mi apego oculto? ¿Significa esto que quiero estar al mando?
Un practicante escribió en un intercambio de experiencias: «Cuando la gente de Taiwán participa en actividades de grupo y quiere que los demás hagan algo, suele pedir su opinión y retirar su petición si los demás no quieren hacerlo. No obligan a la gente a hacer cosas. Mientras que en China, aunque se anima a los estudiantes a que muestren su talento en las fiestas anuales de las escuelas primarias, los alumnos suelen gritar: «¡Tal o cual debería actuar!». Esto avergüenza a los que no quieren actuar. En China, cuando los adultos se reúnen para tomar una copa, a menudo se obligan a beber más. ¿No son estos indicios de los rasgos dominantes del Partido Comunista Chino?».
Aunque soy un cultivador, no he entendido a fondo muchos principios del Fa. Cuando creo que tengo razón, me gusta forzar a los demás y hacer que estén de acuerdo. También hay otro rasgo del que no me he librado, y es que me siento bien cuando suelto todo. Por lo tanto, tengo una voz fuerte y estoy deseando expresar mi opinión. Prefiero hablar a escuchar a los demás. ¿No es ésta una característica dominante típica del Partido Comunista Chino (PCCh)?
¿En qué se diferencia mi comportamiento del de los artistas callejeros que imponen su música a los demás? Por lo tanto, ser enérgico y hacer que los demás se sientan incómodos es un defecto que tengo que dejar de lado.
Me enfado y me gusta quejarme cuando las cosas me molestan, sobre todo cuando el comportamiento de los demás me afecta. Esto demuestra que no cultivo mi forma de hablar y que no soy tolerante. Necesito desprenderme de estos apegos.
Shifu dijo:
“Xiulian; ¿qué significa “no tener brechas” (wu-lou)? No existen pequeñeces.” (Enseñanza del Fa en el Fahui de la Costa Oeste 2015)
Estas son algunas reflexiones sobre mis experiencias recientes. Las comparto con los practicantes para que todos podamos mejorar.
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Categoría: Cultivación