(Minghui.org) Shifu Li Hongzhi, fundador de Falun Dafa, ha salvado compasivamente mi vida en dos ocasiones. Me gustaría contarles algunas de mis experiencias.

Las migrañas desaparecen

 Estudié arduamente en la preparatoria para ingresar a una buena universidad. Debido a la carga de trabajo escolar, sufrí de fuertes migrañas que me afectaron gravemente. Fui con médicos y tomé medicamentos, pero nada funcionó. Me sentía ansioso y deprimido, incapaz de concentrarme al estudiar, lo que hizo que mis calificaciones comenzaran a bajar. Mis padres me aconsejaron tomarlo con calma, pero no podía dejar de preocuparme. Vivía en un estado de confusión constante y hasta pensé en suicidarme. Como resultado, obtuve un puntaje bajo en el examen de ingreso a la universidad y no logré entrar en la universidad que deseaba.

 Intenté estudiar arduamente en la universidad, llevando libros conmigo todo el día. No experimenté la alegría ni el romance como la mayoría de los estudiantes universitarios. Me quedaba despierto hasta tarde estudiando, lo que empeoró mis migrañas. Comencé a mostrar una inestabilidad emocional extrema, una personalidad sospechosa y todos los signos de neurastenia, una condición de agotamiento completo del sistema nervioso central. Me volvía extremadamente emocional cuando algo malo ocurría. A menudo me despertaba en medio de la noche y no podía volver a dormir. Perdí la confianza en la vida y me convertí en un visitante frecuente de hospitales.

Una mañana de marzo de 1997, mientras hacía ejercicio en el campus de la Universidad de Tianjin, vi a un grupo de personas practicando ejercicios lentos. La música suave me atrajo y me acerqué. Un practicante me saludó y me enseñó los ejercicios. Lo seguí y me sentí tan bien después que quise seguir haciéndolos.

 Con este simple pensamiento, ¡mi migraña desapareció! Me sentí calmado y en paz, como una nueva persona. Falun Dafa es asombroso, así que decidí hacer tiempo en mi apretada agenda para practicarlo.

 Comencé a leer Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, y a practicar los ejercicios todos los días. Me esforcé en actuar de acuerdo con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y en ser amable y considerado. Mi actitud competitiva cambió. Ya no respondía cuando me criticaban, y dejé de molestar a mis hermanos menores por no estudiar lo suficiente. Al ver los cambios en mí, mis padres me apoyaron para seguir practicando Falun Dafa. Mi familia se ha vuelto más armoniosa y feliz.

Me recupero de la osteomielitis

Tuve una inflamación severa de los huesos y la médula ósea (osteomielitis) cuando era niño. Mis piernas estaban rojas, hinchadas y tan doloridas que no podía caminar. Después de visitar muchos hospitales, nos dijeron que tenía una inflamación purulenta aguda de la médula ósea. El médico del Hospital del Buró Minero dijo que mis huesos estaban frágiles y dañados. Afortunadamente, llegué al hospital a tiempo. De lo contrario, una amputación hubiera sido inevitable. Me operaron de inmediato.

Después de un año, pude ponerme de pie y caminar. Ahora mis piernas son de la misma longitud. Las pruebas fueron negativas para cualquier crecimiento celular o tisular anormal. El médico dijo que la posibilidad de recurrencia de mi enfermedad era alta. Mis padres estaban asustados y no me permitían hacer trabajos arduos, temiendo que me cansara y la condición volviera.

Shifu dijo:

"Viéndolo desde otro espacio, incluso todos esos huesos están negros, pedazo por pedazo." (Segunda Lección, Zhuan Falun)

 Yo era una persona con "huesos negros," a los que Shifu se refiere en Zhuan Falun. Mis huesos no solo eran negros, sino que la médula ósea estaba dañada. Aun así, Shifu me salvó.

Después de comenzar a practicar la cultivación, mis piernas estaban cada vez más doloridas, rojas, hinchadas y dolorosas. En la medicina tradicional, esto se consideraba una recurrencia de la osteomielitis. Para mí, era una eliminación del karma de enfermedad, y sabía que Shifu estaba purificando mi cuerpo.

 Gradualmente, las áreas rojas se volvieron negras y moradas, y la hinchazón aumentó. El dolor se intensificaba día a día, especialmente por la noche. A menudo apretaba mis piernas con ambas manos para aliviar el dolor. Sentía que soportaba el dolor más insoportable posible. Repetidamente recitaba "Sobre el Dafa" y *Hong Yin*, especialmente el poema "Templando el Corazón y la Voluntad". Lloraba y pedía ayuda a Shifu.

No podía ponerme de pie y tenía que estar acostado en una posición. Al verme sufrir, mis padres me aconsejaron ir al hospital. Dije que, como practicante de Falun Dafa, no haría tal cosa. Un verdadero cultivador no se enferma: estaba eliminando karma. Tenía confianza. Apreté los dientes y perseveré.

 Un gran pústula negra y morada en mi pierna de repente se reventó, y salió sangre y pus amarillo espeso. A medida que la pústula comenzó a encogerse, el dolor desgarrador disminuyó gradualmente y ya no sentía que estaba en una experiencia de vida o muerte. Repetidamente escuché las conferencias de Shifu y hice los ejercicios tanto como pude. A medida que la hinchazón disminuyó, sentí que había ganado una batalla.

 Alrededor de seis semanas después, la piel de mis piernas sanó. Si no hubiera practicado Dafa, no sé qué me habría pasado. Podría haber quedado lisiado, paralizado o quizás no habría sobrevivido. El poder milagroso de Dafa se manifestó en mí.

 Fue Falun Dafa lo que me dio una segunda vida. Shifu me salvó la vida dos veces. ¡No puedo expresar mi gratitud con palabras! Para estar a la altura de la compasiva salvación de Shifu y sus expectativas, estudiaré diligentemente el Fa y practicaré los ejercicios.

 Transmitiendo la bondad de Dafa a otros

 He practicado Falun Dafa durante más de 20 años, pero aún no puedo dejar ir muchas nociones humanas profundamente arraigadas. Continúo estudiando el Fa, mirando hacia adentro y practicando los ejercicios. Trato a cada persona con amabilidad, incluyendo a los policías que me persiguieron. Me gustaría transmitir la bondad de Dafa a todas las personas, con la esperanza de que también puedan ser bendecidas.

 Como profesor, he enseñado a los niños los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Les dije que el incidente de la "auto-inmolación en la Plaza de Tiananmen" es un montaje para difamar a Falun Dafa. Les hice saber que los practicantes no quitan vidas ni se suicidan. Todos creyeron lo que dije y disfrutaron mi clase, especialmente aquellos que eran problemáticos y frecuentemente faltaban a la escuela. Después de asistir a mi clase durante un semestre, algunos de ellos comenzaron a disfrutar del estudio, y más tarde todos fueron admitidos en la universidad.

 Me llevé bien con mis compañeros de trabajo. Nunca competí con ellos por fama o ganancias personales. Tampoco luché por títulos de trabajo o promociones. Ellos realmente sintieron que los practicantes tenían una alta moral y no creyeron en las calumnias del Partido Comunista Chino (PCCh) contra Falun Dafa. Algunos de ellos leyeron los libros de Dafa y los materiales aclaradores de la verdad que les di, y felizmente renunciaron al PCCh. Algunos incluso ayudaron a distribuir materiales a sus amigos y familiares.

 Para que más personas comprendan la verdad, siempre llevo materiales de Dafa en mi bolsa y los pongo en las canastas de bicicletas o en las manijas de los coches siempre que puedo. Le conté a la gente la bondad de Dafa compartiendo mis experiencias personales. A menudo montaba mi bicicleta a pueblos lejanos después del trabajo y los fines de semana para distribuir materiales aclaradores de la verdad. Aunque era peligroso andar en bicicleta en la oscuridad, Shifu siempre me protegió.

 Falun Dafa (también conocido como Falun Gong) es una práctica espiritual profunda que enseña a las personas a cultivar su xinxing y convertirse en buenas personas siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Puede limpiar el cuerpo y purificar la mente. Actualmente, se practica en más de 100 países y regiones de todo el mundo.