Abandonar el ego: ayudando con la presentación de artículos para el Día Mundial de Falun Dafa

(Minghui.org) Tengo 62 años. Solo asistí a la escuela primaria y no puedo escribir. Ni siquiera sé utilizar correctamente la puntuación. Todos mis compañeros practicantes tienen más de 70 años y la mayoría no tiene educación.

Después de que el sitio web Minghui solicitara artículos para celebrar el Día Mundial de Falun Dafa este año, quise enviar un artículo porque me di cuenta de que era una oportunidad única para mejorar mi cultivación.

Sin embargo, sentía que no me había cultivado bien y no tenía nada sobre qué escribir, así que escribí algunas palabras de agradecimiento a Shifu y se las envié a Ming, quien puede burlar el corta fuegos del PCCh (Partido Comunista Chino) y enviar artículos al sitio web Minghui. Ming respondió a lo que escribí diciendo: “Siento que tu escritura es hueca y un poco apática. Has estado practicando durante más de 20 años, por lo que debes haber tenido muchas experiencias de cultivación”.

Decidí reescribir mi envío. Leí atentamente los requisitos, escribí un nuevo artículo y se lo envié a Ming. Esta vez me dijo que había demasiadas cosas negativas y me dio algunas sugerencias para revisar. Lo revisé nuevamente y ella lo envió al sitio web de Minghui sin más comentarios.

Mientras escribía y revisaba, sentí que estaba mejorando. Me di cuenta de que no creía en Shifu y en el Fa al 100 por ciento, y que no podía diferenciar entre mi verdadero yo y mis nociones. También entendí que el proceso de redacción de un artículo puede ayudarme a identificar y eliminar mis nociones y apegos. Desde mi experiencia me inspiré para ayudar a los demás practicantes a escribir sobre sus experiencias para que todos pudiéramos mejorar.

Les conté a los demás mi idea. Todos estaban muy contentos y dijeron que también querían escribir artículos para compartir pero que no sabían cómo. Algunos dijeron: “Shifu debe haberte enviado a ayudarnos porque no hemos escrito nada antes”.

Mientras ayudaba a los practicantes a escribir artículos, eliminé muchas nociones humanas, dejé de lado mi ego y aprendí a ser agradecido.

Ayudar a los demás es una oportunidad de cultivación

Ava, que asistió a mi grupo de estudio del Fa, dijo que escribiría un artículo. Le recordé que comenzara a escribir lo antes posible para que los editores de Minghui tuvieran tiempo de revisarlo. Sin embargo, no empezó a escribir hasta un mes después. Cuando solo faltaban cinco días para la fecha límite de envío, me llamó y me pidió que fuera a su casa y discutiera el artículo.

Fui a su casa al día siguiente. Dijo que otra practicante, Chen, envió su artículo al sitio web Minghui, pero que no estaba contenta porque Chen lo había revisado. Ava cambió la versión de Chen y le pidió que la enviara nuevamente, pero Chen dijo que no se podía enviar un artículo dos veces. Por eso Ava me pidió que la ayudara.

Le dije: "Chen tiene razón porque un artículo no se puede enviar dos veces sin cambios significativos". Ava dijo que había cambiado mucho su artículo e insistió en que nadie podía revisarlo porque era su informe para Shifu y que si otros lo revisaban, ya no sería lo que ella compartía. Cuando llegué a casa, miré su versión y encontré muchos problemas. Como practicante, tenía que ser responsable ante el sitio web de Minghui y no podía enviarlo tal como estaba.

Sin embargo, pensé en lo difícil que era para Ava escribir un artículo y en el esfuerzo que ponía en ello. Estaría muy decepcionada y dolida si no la ayudara a enviar su trabajo. Al mismo tiempo, sentía que el ego de Ava era bastante fuerte.

Shifu dijo:

“Ningún asunto que te toca es casualidad, es posible que cada asunto ya esté arreglado de este modo en la historia, por eso no creas que las cosas que haces tienen poca importancia, cada cosa aparenta ser algo de la gente común y sin importancia, pero en otro espacio están ocurriendo cambios tremendos”. (Enseñando el Fa en el Fahui de Nueva York de 2010, Colección de Enseñanzas del Fa, vol. XI)

Me di cuenta de que esta situación no fue un accidente y que debía aprovechar esta oportunidad para cultivarme. Su comportamiento fue un espejo para mí. ¿No me dijo su comportamiento que yo también tenía un ego fuerte?

Fui a la casa de Ava al día siguiente y le mostré el artículo que le escribí. Le dije que no había cambiado una palabra pero que quería discutirlo con ella. Dije: “Estamos haciendo esto para presentar Dafa al público y nos estamos cultivando. Por favor, no insistas en tu propia opinión”.

Y le dije que también reenviaría su artículo a Ming. Pero ella respondió: “Dígale a Ming que no cambie mi artículo en absoluto”. Me enojé un poco, pensando que era demasiado egoísta. ¿Por qué no les decía a los editores de Minghui que no podían cambiar su artículo? Sin embargo, inmediatamente me di cuenta de que se trataba de una mentalidad de lucha, que debía eliminarse, así que no dije nada más.

Cuando llegué a casa, miré hacia adentro para descubrir por qué me sentía incómodo. El comportamiento de Ava fue una oportunidad para reflexionar sobre mi problema. No podía ver las áreas que ella había cultivado bien. Lo único que vi fueron sus apegos. ¿No vi esto para ayudarme a mejorar? En lugar de mirar las deficiencias de los compañeros practicantes, debería mejorarme a mí mismo. Me pregunté: “¿Por qué te sientes incómodo? ¿Es porque sientes que estás perdiendo el tiempo? Cuando me di cuenta de esto, ya no me sentí incómodo.

En ese momento, Ming me envió el borrador. Revisó el artículo de Ava y dijo: "Si no modifico su artículo, no puedo enviarlo". Leí su revisión y me pareció bastante buena.

Sabiendo que el borrador estaba listo, quise enviarlo directamente al sitio web de Minghui sin decírselo a Ava. Pero también sabía que no hay asuntos pequeños en la cultivación y que debía ser serio y no perder el tiempo. Así que imprimí la copia revisada y fui a casa de Ava.

Esta vez pensé que tenía que ser responsable de Ava. No podía dejar que insistiera en enviar su propio artículo, dando a entender que nadie más era tan bueno como ella. Le dije a Ava: “Hoy ya es día 13, así que si no lo enviamos ahora, no tendremos tiempo. Ming lo ha revisado para ti. Si crees que es apropiado, podemos enviarlo. Sin embargo, no podemos presentarlo sin realizar los cambios necesarios”.

Ava todavía insistía en que no era necesario revisarlo. Le dije: “Eso es lo que tú piensas. Los cultivadores tienen que usar los estándares del Fa para medir si lo que están haciendo está bien o mal, y tienen que ser serios y responsables en todo lo que hacen”.

Continué: “No importa si escribimos un artículo. Lo más importante es eliminar nuestros apegos y nociones cuando los vemos. Esta vez coordiné la escritura. Dos practicantes no me dejaron tocar sus escritos, y uno de ellos eras tú. Pero te estoy muy agradecido porque me recordaste que mirara hacia dentro. Descubrí que mi ego, que es obstinado y superior, menosprecia a los demás. Todas estas nociones tienen sus raíces en la envidia”.

Ava intervino: "¡Entonces tienes que agradecerme!". Estuve de acuerdo en que debía agradecerle. Ella dijo: “En el futuro, también tendré que prestar atención a eliminar mi ego”. Después de leer el artículo, inesperadamente dijo: "Las revisiones realizadas por Ming son muy buenas, ¡así que deberías agradecerle a Ming de mi parte!".

De camino a casa me sentí aliviado. Agradecí a mis compañeros practicantes desde el fondo de mi corazón por darme la oportunidad de mejorar.

En casa, examiné cuidadosamente mis palabras y mis acciones. En la superficie, era responsable ante los compañeros practicantes. Sin embargo, inconscientemente, estaba ocultando mis apegos a la arrogancia y el orgullo. Me faltaba amabilidad en mi comunicación con otros practicantes y mi tono era contundente. Todavía sufría el adoctrinamiento del PCCh, que me hacía creer que tenía razón y obligaba a los demás a hacer lo que yo quería.

¡Agradezco a Shifu por sus minuciosos arreglos, a mis compañeros practicantes por darme la oportunidad de mejorar y a la seriedad y responsabilidad de aquellos practicantes que me ayudaron a organizar los artículos!