​Una estrategia para vencer la táctica de las viejas fuerzas

(Minghui.org) Personalmente creo que cuando un practicante de Dafa experimenta ye de enfermedad grave durante el período de la rectificación Fa, debe ser interferencia y persecución de las fuerzas viejas.

Mi entendimiento es que cuando las viejas fuerzas persiguen a un practicante, toman su ye acumulado durante muchas vidas y luego vuelcan una gran parte de este para atacarlo de una sola vez. De esta manera, el practicante puede enfrentarse a una tribulación significativa. Algunos pueden superar bien la prueba, mientras que otros no, y otros incluso pierden la vida a causa de la tribulación arreglada por las viejas fuerzas.

Quiero compartir mi tribulación reciente. Tuve fiebre alta durante tres días. Nunca había tenido fiebre durante mucho tiempo desde que empecé a cultivar hace más de 20 años. Como practicantes de Falun Dafa, todos sabemos que, siempre que nos encontramos con una tribulación, debemos mirar hacia dentro para rectificarnos. Y yo hice precisamente eso, pero mi fiebre no bajó.

Envié pensamientos rectos muchas veces durante esos tres días, pero no hubo gran cambio. Mis síntomas no empeoraron, pero tampoco mejoraron. Me preguntaba qué me pasaba. Entonces pensé que tal vez mis pensamientos rectos ya habían eliminado a los seres malignos que, por orden de las viejas fuerzas, habían enviado hacia mí una gran cantidad de ye. Pero el ye seguía ahí, lo que significaba que tenía que soportarlo para transformarlo en virtud y luego en gong. Pero, ¿debía seguir soportándolo?

Se me ocurrió una manera. Puesto que las viejas fuerzas me habían arrojado esa gran cantidad de ye, podía dividirlo en trozos y no dejar que se concentrara en un solo lugar. Después de desbaratarlo en partes, sería más fácil eliminar el ye pedazo por pedazo.

Empecé a enviar pensamientos rectos para eliminar a los seres malignos que me arrojaban el ye y romperlo en trozos pequeños. Tres minutos después de terminar de enviar pensamientos rectos, se produjo un milagro: ¡se me había quitado la fiebre, sentía el cuerpo ligero, no tenía frío, ya no tenía la nariz tapada y ya no me dolía la garganta!

Me preguntaba si había encontrado una manera de vencer la táctica de las viejas fuerzas de arrojarnos mucho yeli: antes de "soportarlo" así nada más, porque sí, como practicante de Falun Dafa, debía ¡romperlo y dispersarlo!

Esta es solo mi experiencia personal. Debemos tomar a Dafa como el Maestro para cultivar verdaderamente como nos lo dice Shifu.

Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “…comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…” (Cultivación sólida, Hong Yin).