(Minghui.org) Cuando mi marido Li Xiang se enfrentó a la policía para protegerme, nadie habría creído que antes era un jugador y un maltratador de niños. No cambió de la noche a la mañana, pero su notable cambio refleja el poder de Falun Dafa.
Un mal marido y un padre maltratador
Mi marido tenía mal carácter cuando era joven. Le gustaba apostar y jugar al Mahjong. Cuando sus hermanos se turnaban para cuidar de sus padres enfermos, él siempre estaba fuera jugando, así que tuve que cuidar de ellos yo sola. A nuestras dos hijas no les gustaba porque a menudo les pegaba. Mi hija menor le preguntó una vez a su abuela delante de su padre: "Abuela, ¿quién cuida de ti? ¿Mi madre o mi padre?". La abuela respondió: "Tu madre, por supuesto. Tu padre juega todo el tiempo. Casi nunca le veo".
En vez de ganar dinero, mi marido lo perdía jugando y tenía muchas deudas. Alguien a quien le debía dinero vino a nuestra casa y exigió que le pagáramos, diciendo que Li Xiang le debía 100.000 yuanes. En ese momento, mi mente se quedó en blanco. Para pagar sus deudas, tuve que vender nuestra casa. Pagué más de un millón de yuanes para saldar sus deudas.
Un gran cambio
Estaba desesperada y me planteé el divorcio. Mis hijas me dijeron: "Mamá, te apoyaremos en cualquier decisión que tomes". Si nos divorciábamos, las niñas vivirían conmigo para que mi marido no les pegara más.
Pero yo era practicante de Falun Dafa y sabía que el divorcio no era la solución. Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una antigua práctica de mente y cuerpo basada en la Verdad, Benevolencia y Tolerancia. Decidí no divorciarme. En lugar de eso, quería que aprendiera más sobre Falun Dafa para que él también pudiera salvarse.
El Partido Comunista Chino (PCCh) persigue a Falun Dafa desde julio de 1999, y los medios de comunicación controlados por el gobierno difaman sin parar a Falun Dafa y engañan a millones de personas.
Poco a poco empecé a contarle a mi marido muchas cosas sobre Falun Dafa. Cuando él estaba viendo una película en la televisión sobre la guerra, le sugerí que viéramos un drama sobre la cultivación, Él vio "El Nombramiento de los Dioses" y luego la historia del Rey Zhou. Le pregunté: "¿Sabes por qué NuWa castigó al rey Zhou?". Para mi sorpresa, sí lo sabía, y dijo: "Porque el rey Zhou escribió un poema lascivo que blasfemaba a NuWa". Le dije: "Sí. Blasfemar a los dioses y a los Budas es un pecado grave. Falun Dafa es de la Escuela de Buda y no puede ser perseguido".
Para mantener a nuestra familia, quería ganarse la vida, pero no tenía conocimientos ni experiencia. Ni siquiera sabía cómo encontrar trabajo. Decidí trabajar con él. Intentamos montar un pequeño negocio de catering, pero era un trabajo duro. Después trabajó en la construcción. La gente que lo conocía no podía creer que hiciera un trabajo tan agotador.
La persecución de Falun Dafa no sólo afecta a sus practicantes, sino también a sus familiares, que pueden ser encarcelados ilegalmente, acosados por las autoridades y discriminados.
Mi marido no se oponía a que practicara, pero no quería que hablara con la gente sobre Falun Dafa y la persecución porque temía que me arrestaran. A menudo metía materiales de Falun Dafa y artículos de Shifu bajo su almohada. Una vez mi hija lo vio leyendo uno y me susurró: "Mamá, papá está leyendo los materiales cuando no hay nadie".
Cambios constantes
Cuanto más leía, más comprendía lo sucedido. Le sugerí que practicara Falun Dafa conmigo, pero dijo: "No, no puedo. Es demasiado difícil ser tan buena persona como dice el libro". Sin embargo, siempre que veía materiales de Falun Dafa desechados, se los llevaba a casa. Una vez gritó nada más entrar: "¡Mira los tesoros que he recogido para ti! ¿No es pecado tirarlos?".
Durante un tiempo, cuando mi marido no estaba en casa preparaba los materiales para aclarar la verdad. Un día volvió a mediodía y vio que estaba imprimiendo folletos. Al principio me quedé estupefacta y luego sonreí al explicarle: "Otros practicantes están muy ocupados, quiero ayudar". Me dijo: "Lo sé. Lo has hecho durante más de un mes". Después de eso, hacía materiales a cualquier hora en casa.
Cambió aún más. Mientras dure la persecución, el apoyo de la familia de un practicante de Falun Dafa es muy valioso.
Me detuvieron y me llevaron a un centro de detención por hablar con la gente sobre Falun Dafa. En aquella época mi marido trabajaba fuera de la ciudad y sólo venía a casa de vez en cuando. Más tarde dijo que aquel día se sintió inquieto y volvió a casa temprano. Al no verme, sintió que algo había pasado y escondió rápidamente todos mis libros y materiales de Falun Dafa.
Cuando bajó, vio a varios policías. "¿Es usted el marido de Ling?", le preguntaron. "Venimos a registrar su casa". Mi marido intentó detenerles, pero tuvo que dejarles entrar. Luego señaló dos habitaciones y anunció: "Esa es la habitación de mi madre, no pueden entrar. Esa es la habitación de mi hija, ¡tampoco podéis entrar ahí!". En realidad, esa era la habitación donde yo preparaba los materiales para aclarar la verdad de Falun Dafa. La policía registró mi habitación, pero no encontró nada y se marchó.
Hace unos años, trabajaba a tiempo parcial como azafata en un internado. Un viernes, cuando Li, la encargada de la comunidad, se enteró de dónde trabajaba, presionó al director para que me despidiera, la única razón que dio fue que yo era practicante de Falun Dafa. La directora me asignó la limpieza de los baños. Me negué y dimití. Cuando le conté a mi marido lo sucedido, se enfadó porque me habían tratado tan injustamente y llamó a la encargada. "No puedes tratar así a Ling", le dijo, "Te demandaré".
Cuando Li vino a casa aquella tarde, mi marido le dijo: "Le has costado el trabajo a mi mujer, y ahora perderemos 3.000 yuanes al mes. Tendrás que compensarnos. Espero que nos pagues esa cantidad todos los meses". Li temía que mi marido pensara demandarla, así que se disculpó y trató de ayudarme a encontrar otro trabajo en el pueblo.
Bendición
Mi marido ha sido bendecido gracias a su rectitud. Cuando trabajaba en una obra, aprendió a conducir una carretilla elevadora. Más tarde consiguió un trabajo como conductor de carretillas elevadoras y ganaba 5.000 yuanes al mes. Por fin tenía una habilidad que le permitía ganarse la vida.
Una vez, cuando trabajaba en una obra, se aplastó un pie y su zapato quedó empapado de sangre. El médico le dijo que tenía una fractura fragmentada en el dedo gordo y que necesitaba escayola. "Vuelva en unos días", le dijo. "No podrá trabajar en los próximos tres o cuatro meses". Le dije que recitara las frases auspiciosas: "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia, Tolerancia" y aceptó.
Pocos días después estalló la pandemia. No tuvo ocasión de que le pusieran la escayola, pero se curó bien. Durante el encierro incluso ayudó a repartir comida durante un mes.
Ahora mi marido tiene casi 60 años. Tiene un buen trabajo, al igual que nuestras hijas. La relación con su padre ha mejorado y a menudo cuidan de él. Mi marido me dijo: "No tienes que trabajar. Gano lo suficiente para mantener a nuestra familia". Yo sabía lo que quería decir; él me mantendría para que yo pudiera dedicar todo mi tiempo a cultivar y esclarecer la verdad.
Shifu, el fundador de Falun Dafa, dijo: "la luz del fo ilumina todo y hace la moral armoniosa y pura". (Sexta Lección, Zhuan Falun)
En efecto, mi marido cambió completamente bajo la luz del Fo de Verdad, Benevolencia, Tolerancia. Gracias, Shifu. Gracias, Falun Dafa.
Espero que más gente conozca Falun Dafa y sea bendecida.
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