​Descubriendo mis apegos a la impaciencia y a la ira

(Minghui.org) Una vez soñé que estaba en casa de una practicante y alguien me traía dos componentes de un equipo. A uno le faltaba una pieza y el otro estaba roto. No me resultó conveniente repararlos en casa de la practicante, así que decidí llevármelos a mi casa.

Sin embargo, regañé a la practicante con relación al equipo, y se echó a llorar. Entonces la critiqué antes de irme: "¿Todavía eres una cultivadora? Te sientes ofendida en cuanto te critican".

Después de salir de su casa, me di cuenta de que mi coche no estaba. Me quedé allí con una máquina en cada mano, y no estaba seguro de si debía quedarme o marcharme. Y así terminó el sueño.

Hace poco vino una practicante a hablar conmigo. Pero sólo una de las cuatro cuestiones tenía que ver conmigo, así que la regañé. Me dijo con calma: "¿A qué viene tanta prisa y por qué estás enfadado?".

Sus palabras me recordaron el sueño. Llevaba una máquina en cada mano, una era mi apego a la "impaciencia" y la otra la "ira". ¿No era esto un indicio de que debía desprenderme de ellos?

Soy rápido e impaciente, y no cuido mi forma de hablar. Por eso, de vez en cuando digo lo que no debo y a menudo caigo en desgracia con los demás. Me enfado cuando las cosas no están a mi altura. También me enfado cuando retengo pensamientos de enojo. Pero si los expreso, lo hago con resentimiento, lo que incomoda a los demás.

También critiqué a otros practicantes: "¡¿Cómo puedes ser tan descuidado y no saber ni hacer el trabajo básico de mantenimiento?!".

Cuando criticaba al practicante de mi sueño, significaba que no estaba cultivando mi corazón. Entiendo que antes que reparar un equipo, debo cultivar mi corazón. Ser "firme" es la cualidad básica que puede garantizar una actitud tranquila cuando se trata de lo inesperado.

En cuanto a los cuatro temas que he mencionado, el primero estaba relacionado conmigo, así que no me impacienté ni me alteré. Pero los otros tres no tenían nada que ver conmigo, y me agité.

En realidad, las tres cuestiones no relacionadas ponían de manifiesto mis apegos y estaban ahí para ayudarme a cultivar. En esencia, el asunto que me preocupaba se convirtió en un no asunto, y las tres cosas que no me importaban me sirvieron de prueba.

Busqué en mi interior y encontré mi egoísmo. No me impacientaba ni me enfadaba hablando de algo que me preocupaba, ya que no afectaba a mi propio interés. Pero los temas irrelevantes eran una pérdida de mi tiempo y energía, lo que significaba que afectaban a mi propio interés. ¿No estaba siendo egoísta?

En la cultivación no hay casualidades. Las cosas que considero negativas son en realidad cosas buenas, ya que existen para ponerme a prueba y exponer mis apegos.

Dejaré ir mi impaciencia, me calmaré, me volveré firme y crearé un ambiente armonioso. Apreciaré a cada practicante y recorreré bien la última parte de mi camino de cultivación. Ser firme en cada paso del camino es un requisito para los practicantes de Dafa, y todo lo que hacemos sirve como testimonio de nuestro maravilloso viaje de cultivación.

Esta es mi comprensión limitada. Por favor, señalen cualquier cosa que no esté de acuerdo con el Fa.