(Minghui.org) Me tocó vivir los diversos movimientos políticos del Partido Comunista Chino (PCCh), como el Gran Salto Adelante, la Gran Hambruna, la Revolución Cultural, etc. Experimenté el hambre, la pobreza, el miedo, la mala salud y la violencia en el hogar.

Mi vida da un gran giro

Empecé a practicar Falun Dafa en 1997 y recuperé la salud. Mi marido ya no tenía que preocuparse por mí. Solía sentirme desesperanzada y desesperada, pero ahora sentía la emoción y la alegría de tener una segunda oportunidad en la vida.

Mi marido suministra materiales a una empresa privada y viaja mucho. Le di un ejemplar de Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, para que lo leyera en el tren. Lo aceptó encantado. Cuando terminó de leer el libro, dijo que se dedicaría a cultivar Falun Dafa cuando se jubilara.

Todo cambia

Yo sólo practicaba Falun Dafa desde hacía dos años, cuando el PCCh empezó a perseguir Falun Dafa. Mintieron, arrestaron, torturaron e intentaron lavar el cerebro a los practicantes. Parecía que el cielo se derrumbaba. El ambiente era más opresivo que durante la Revolución Cultural. La policía acosaba constantemente a mi familia y a mí me llevaron varias veces a un campo de trabajo. Mis hijos sufrían discriminación en la escuela y mi marido, presiones en el trabajo. Nuestros parientes no lo entendían y animaban a mi marido a divorciarse de mí.

Bajo la guía de Dafa, cultivé un corazón de tolerancia. Debido a la intensa presión, mi marido empezó a ponerse del lado del PCCh. Comprendí su situación e intenté no culparlo. Incluso compuso un verso corto que calumniaba a Falun Dafa y se lo enseñó a nuestros hijos.

Compasión y dignidad

Visité Beijing muchas veces para validar Dafa después de que comenzara la persecución. Expliqué por qué quería ir a Beijing y que Dafa era quien me había permitido recuperarme de mis enfermedades. Sin embargo, Falun Dafa está siendo perseguido y a la gente no se le permite ser amable. Se lo decía a mi marido cada vez que planeaba ir a Beijing y le pedía que no se preocupara. No intentó impedírmelo.

Mi marido es muy tímido. Cuando empezó la persecución, me detuvieron varias veces y me llevaron a campos de trabajo. Sabía que mi marido estaba muy estresado. Una vez, cuando volví del campo de trabajo, se sentó junto a la cama a fumar y no me dejó dormir. En cuanto me dormía, me despertaba.

Pensé que: “Cada vez que me detenían, él iba a casa de mis padres y me amenazaba con divorciarse”. Shifu nos enseñó a tener consideración por los demás y yo no quería que cometiera crímenes contra Dafa.

Con calma le dije: “Si realmente no puedes soportar el estrés de que yo me cultive, entonces podemos iniciar el proceso de divorcio. Te quedas con todo el dinero y los niños. Sin embargo, si piensas que no hay nada malo en practicar Dafa y decides quedarte en el matrimonio, te pido que no interfieras con mi validación de Dafa. Por favor, piénsalo y dame una respuesta mañana”.

No dijo nada y se fue a trabajar. Me sentí triste y pensé: “¿Cómo me mantendré si me divorcio?”. Me di cuenta de que divorciarme o no, no dependía de mi marido ni de mí, sino de nuestra relación predestinada. Yo deseaba impedirle que cometiera crímenes contra Dafa. El resto es decisión suya.

Cuando mi marido regresó del trabajo, tenía una gran sonrisa y dijo: “No habrá divorcio. Puedes practicar lo que te plazca”. Me alegré por él porque había tomado la decisión correcta.

Un sueño me recuerda que debo salvar a mi marido

Aunque los practicantes nos enfrentamos a la persecución y estamos sometidos a mucho estrés, llevamos Dafa en el corazón y no tenemos miedo. Seguimos los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Sin embargo, nuestros familiares sufren un estrés y una preocupación inmensos. Sé que fue su elección cuando vinieron al reino humano y esto también ayuda a eliminar su yeli. Mi marido se enfada conmigo por las cosas más triviales debido a la presión, y me he dado cuenta de que apenas sonríe.

Lo comprendo. Para salvarlo, necesitaba tener más tolerancia y compasión, no emociones humanas. Así que nunca me quejé y me esforcé por cuidarlo.

Una noche soñé que había una olla grande llena de agua sucia y burbujeante y que mi marido estaba tumbado boca abajo dentro de ella. Le sacaba la cara del agua. Escupió el agua sucia y pudo respirar. Después de despertarme, me di cuenta de que el hecho de que pudiera o no salir de la olla dependía de si tenía una buena opinión de Dafa y de si tenía una comprensión clara de esta persecución.

Entonces le conté el sueño y lo que significaba. Después, vi un cambio significativo en él.

La importancia de los Nueve Comentarios

Cuando se publicaron los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista Chino, los practicantes empezaron a producir el libro en grandes cantidades. Este libro es como una estaca de madera en el corazón del espectro del PCCh, ya que revela su verdadera naturaleza.

Una noche, mi marido se puso furioso e irritado, y fue de la cocina al salón gritando. Parecía que iba a pegarme. Inmediatamente supe que estaba siendo controlado por el espectro comunista y que me perseguía a través de él. Envié pensamientos rectos. Unos segundos después, se calmó y se sentó en su escritorio para escribir algo de caligrafía. De repente, las luces parpadearon y se apagaron. Cuando mi marido miró fuera, dijo que éramos la única casa en la que se había ido la luz. Tres minutos después, volvió la luz. No dejé de enviar pensamientos rectos durante otra media hora hasta que sentí que sus otras dimensiones se habían limpiado.

Sonreí y le dije: “¿Sabes por qué se fue la luz y luego volvió?”. Continué: “Puedes creerme o pensar que es un cuento de hadas. Pero estabas gritando y enfadado porque el espectro del PCCh te controlaba en otra dimensión. Así que envié pensamientos rectos para eliminar el mal. Este espectro intentó detenerme apagando las luces. Si me hubiera detenido entonces, habría escapado, pero no me detuve. Pude eliminarlo. ¿No te sientes mejor ahora?”. Se quedó con la boca abierta y los ojos muy abiertos. Dijo: “¡Vaya! Mi mujer tiene poderes divinos”.