Historia de una nueva practicante predestinada

(Minghui.org) Después de más de 20 años de cultivación, he conocido a muchas personas mientras aclaraba la verdad sobre Falun Dafa. Una de mis experiencias más memorables tuvo que ver con una mujer predestinada, que finalmente comenzó a cultivarse.

Encuentro casual con una persona predestinada

En mi camino a casa después de aclarar la verdad un día hace diez años, vi a una mujer de mediana edad tejiendo un suéter delante de una vieja tienda de muebles cerca de mi casa. Me saludó con la cabeza y me sonrió. Pensé que podría tener una relación predestinada con Dafa.

Me acerqué y me puse a charlar con ella. Al cabo de un rato, le hablé de Falun Dafa. Tenía curiosidad y me preguntó si tenía miedo, porque practicar Falun Dafa era peligroso, según la televisión.

Le dije: "No puedes creer las mentiras del PCCh. Historias como la de la autoinmolación de la plaza de Tiananmen son propaganda que difama a Falun Dafa. Estas historias engañan a la gente y la alejan de los valores tradicionales".

"Me siento como si acabara de despertar de un sueño", me dijo, "¿Puedes volver mañana y contarme más sobre esto?".

Al día siguiente, le conté a esta mujer los hechos sobre Falun Dafa de forma clara y detallada. Por mis años de experiencia en la aclaración de la verdad, pude sentir que esta mujer tenía una relación predestinada con Dafa. Todos los seres conscientes vinieron por el Fa, y supe que debía hacer todo lo posible para guiarla a la cultivación.

Cuando volví a verla al tercer día, le llevé Zhuan Falun, las principales enseñanzas de Falun Dafa. Le propuse que leyéramos el libro juntas, pero me dijo que era analfabeta. Así que le leí la Primera Lección mientras ella escuchaba atentamente.

La situación cambió al cuarto día. En cuanto entré en su casa, me peló una manzana y me dijo tranquilamente: "No vuelvas mañana. Tú y yo somos tan diferentes como el agua y el aceite. Sé que te pagan por hacer esto". Me di cuenta de que había sido engañada por las mentiras del PCCh. Continuó: "Tengo un negocio y no tengo tiempo para esto. Sé que eres una buena persona y que Falun Dafa es perseguida injustamente. Pero no será bueno para ninguna de las dos si nos denuncian a la policía".

Inmediatamente supe que las viejas fuerzas habían interferido con ella, y que no debía dejar que tuvieran éxito. Le dije con firmeza: "No quiero que seas como yo. Vengo aquí todos los días sólo porque quiero compartir contigo este gran Dafa, para que tu venida a este mundo no sea en vano. No recibo un centavo de nadie por venir aquí. ¿Qué tal si tomas tu decisión después de que hayamos terminado las nueve lecciones de Zhuan Falun? Eso sólo tomará un poco de tu tiempo, ¿verdad?"

Ella asintió felizmente. Sentí que Shifu me animaba y pude terminar de leer todo el libro con ella.

Convirtiéndose en practicante

Desde entonces, iba a su casa dos o tres veces por semana y estudiaba las enseñanzas de Dafa con ella. Después de un tiempo, le di la cinta de audio de las conferencias de Shifu en Guangzhou y ella estaba muy feliz de recibirlas.

Pero cuando estaba a punto de empezar a cultivarse, ocurrió otra cosa inesperada. Su hijo me convocó en su casa y me dijo enfadado: "Tía, si vuelves a enseñarle los ejercicios a mi madre, te denunciaré. No digas que no te lo advertí".

Yo sabía que su hijo también había sido engañado por las mentiras del PCCh, así que le dije: "Seguro que no harías algo tan irracional y ridículo. Tienes una carrera de éxito. Has visto la mejora física y mental de tu madre desde que empezó a hacer los ejercicios. Toda la familia se beneficia cuando una persona practica. Has visto la bondad que Dafa ha traído a toda tu familia".

Envié pensamientos rectos para eliminar los elementos perversos que había detrás de él. Con la ayuda de Shifu, pude seguir yendo a su casa para estudiar con ella las enseñanzas de Dafa.

Esta practicante ha estado ahora cultivándose firme y diligentemente, y ha estado haciendo las tres cosas relativamente sin problemas. Desde hace mucho tiempo, es capaz de leer Zhuan Falun por sí misma. A veces pienso en una frase de uno de los poemas de Shifu:

"Antes de descender al mundo, hicimos un pacto 
Quien fuera que obtenga el Fa primero, busca al otro..."
("Porque hicimos un pacto", Hong Yin IV).

Es tan cierto. Encontré Dafa y a Shifu, y también encontré a esta compañera. Creo que somos las personas más felices y afortunadas del mundo.