(Minghui.org) Tenía 25 años en la primavera de 1996, gozaba de buena salud y mi negocio familiar iba bien. Era una época maravillosa de mi vida. Entonces pensaba en lo bueno que sería no enfermar nunca y no tener que preocuparme por el dinero.

Fue también en la primavera de 1996 cuando alguien me presentó Falun Dafa. Pensé que, aunque deseaba librarme de la enfermedad y las preocupaciones, la vida era impermanente y nadie podía escapar del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte. Por eso, en busca de una vida mejor, empecé a cultivar Dafa. Pensé que mi cultivación sería muy fácil, porque yo era amable por naturaleza, y relativamente indiferente a la fama y la fortuna. Tan pronto como obtuve el Fa, transcribí a conciencia Zhuan Falun.

Estudié el Fa todos los días y aprendí muchos principios. Más tarde llegué a comprender verdaderamente lo difícil que es cultivarse, y también me di cuenta de que todo en el mundo es una ilusión. El estudio intensivo del Fa también me hizo atravesar más tarde con resolución la cruel persecución.

Caminando entre tribulaciones

El Partido Comunista Chino (PCCh) comenzó su persecución contra Falun Dafa el 20 de julio de 1999. Innumerables practicantes de Dafa renunciaron a la vida y a la muerte y entraron en la plaza de Tiananmen, mostrando al mundo la grandeza de Dafa. Yo también era una partícula de Dafa, y tenía una responsabilidad y una misión ineludibles. Compañeros practicantes y yo distribuimos información de aclaración de la verdad, colgamos carteles y fuimos a la plaza de Tiananmen a desplegar pancartas.

La policía me detuvo en agosto de 2001 y me llevó a un centro de detención. Después me encarcelaron ilegalmente en un campo de trabajos forzados durante año y medio. No cooperé con las exigencias, órdenes o instrucciones de los guardias y memoricé el Fa, practiqué los ejercicios y envié pensamientos rectos todos los días. Me negué a dar mi nombre y me declaré en huelga de hambre durante 80 días. Mi cuerpo se debilitó enormemente y los guardias dijeron que padecería cáncer de estómago y que no viviría mucho tiempo. Utilicé mi salud para hablar a la gente de mi celda sobre la grandeza y lo extraordinario de Dafa y la crueldad de la persecución del PCCh. También ayudé a la gente predestinada a comprender la verdad sobre Dafa. Muchas personas de buen corazón regalaron ropa a los practicantes de Dafa y les ayudaron a ponerse en contacto con sus familias y a hacer llamadas telefónicas. Sus actos de bondad eran ejemplos de que estas personas también habían elegido un futuro brillante para sí mismas.

Fui liberada en 2003. Usé todo mi tiempo para estudiar el Fa, memorizar el Fa y hacer las tres cosas. Tardé unos meses en memorizar Zhuan Falun. Después de que pude recitarlo, mi estudio del Fa se convirtió en recitar el Fa, hasta hoy. Los principios del Fa se han hecho cada vez más claros en mi corazón. Porque tengo el Fa en mi corazón, mido todo contra el Fa, y nada puede interferir conmigo. Mientras todo se mida contra el Fa, las ilusiones que socavan el Fa serán reconocidas rápidamente, y los demonios no pueden interferir conmigo. Tengo mi propio punto de vista correcto sobre todo, y no es fácil extraviarse.

En 2007 me detuvieron y me llevaron a un centro de detención. Me negué a cooperar con los guardias, no quise ponerme el uniforme, no me hicieron fotos, no firmé ninguna carta de garantía e inicié una huelga de hambre. Todos los días gritaba: "Falun Dafa es bueno, ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!". Memoricé el Fa todos los días, envié pensamientos rectos e hice los ejercicios durante mucho tiempo. Cuando memorizaba las escrituras de Shifu, a menudo derramaba lágrimas inconscientemente. Recitaba en voz alta los poemas de Hong Yin. Varias personas de la celda podían oírlo, y a todos les gustaba escucharlo. Luego me dieron papel y bolígrafo y me pidieron que los escribiera. Les conté los hechos sobre Dafa y la persecución, y varios de ellos renunciaron a los Jóvenes Pioneros, una organización juvenil del PCCh.

Todos los días gritaba: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Un día también grité: "¡El Cielo destruye al PCCh! Renuncia al Partido para salvar tu vida". Los guardias me cerraron inmediatamente la puerta.

Aunque después de una semana fui sentenciada a un campo de trabajo, bajo el cuidado compasivo de Shifu y con el rescate recto de mis compañeros practicantes, regresé a casa en 13 días con dignidad, y negué la persecución de las perversas viejas fuerzas. Desde entonces no me han vuelto a acosar.

Aclarar la verdad y salvar a la gente

Después de regresar a casa, estudié el Fa, busqué mis fallos, me corregí y ajusté mi mentalidad. Llevé a mi hijo de tres años a la comisaría para aclarar la verdad. Todos los días visitaba al líder del PCCh y al jefe de la aldea para charlar. Les conté que mis hijos y yo llevábamos muchos años sin tomar ni una sola píldora; les hablé de la grandeza de Falun Dafa y de las falsedades del PCCh; les hablé del significado de renunciar al Partido Comunista, y los iluminé con buenos pensamientos. Les dije que recitaran "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

También dije que la persecución del PCCh contra Falun Gong es ilegal y que la Constitución estipula que los ciudadanos tienen derecho y libertad de creencia. Entregué al director de la comisaría ejemplares de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista. Una vez le pregunté al director: "Como ama de casa con niños en casa, ¿cómo he saboteado la aplicación de la ley? ¿Hasta qué punto?". Desde el punto de vista legal, la persecución a Falun Gong por parte del PCCh es ilegal. El director sonrió y dijo: "Has ganado en capacidad. Ahora sabes mucho de leyes". Después de un período de aclarar la verdad y enviar pensamientos rectos, también le di alguna información de aclaración de la verdad. El director comprendió la verdad, renunció al Partido y me devolvió el ordenador incondicionalmente. No persiguió a ningún otro discípulo de Dafa después de eso, y más tarde se retiró.

Una vez, en la oficina del instructor, cuatro o cinco dirigentes del pueblo dijeron delante de mí que Dafa no era bueno, y repitieron las mentiras del malvado PCCh. Yo les pregunté: "¿Qué tiene de malo Verdad-Benevolencia-Tolerancia? Cualquiera de ustedes que hoy quiera oponerse a Verdad-Benevolencia-Tolerancia no es digno de ser un ser humano. Deben dejar de perseguir a los discípulos de Dafa". Ninguno de ellos habló. Cuando les conté la historia del PCCh, todos escucharon en silencio, y algunos funcionarios del pueblo renunciaron al Partido.

Como todos sabían que yo cultivaba Dafa, empecé a aclarar la verdad a la gente que me rodeaba en público. Hablé a la gente sobre el engaño del PCCh, y al mismo tiempo repartí una gran cantidad de información para aclarar la verdad. Nunca me molestaron. Cuando salía a aclarar la verdad, enviaba pensamientos rectos y pedía ayuda a Shifu. Aclaraba la verdad a todos los que encontraba por la calle. La mayoría de ellos renunciaron al Partido con mi ayuda. Les di materiales de aclaración de la verdad.

También aclaro la verdad a mis vecinos. Pase lo que pase, nunca discuto con la gente. Siempre dejo que tengan los intereses personales que quieran obtener de mí. No obligo a la gente a creerme, y no me apresuro a conseguir resultados. Hubo algunos miembros obstinados del Partido, a los que intenté convencer de que renunciaran a él durante varios años. Al final, todos renunciaron. Les dije que Dafa era extraordinario y que mis hijos y yo llevábamos muchos años sin tomar medicamentos y gozábamos de buena salud.

Uno de mis primos, que era dirigente de la aldea, se opuso rotundamente a renunciar al principio y discutió conmigo. Pero cada vez que lo veía, lo saludaba afectuosamente, le contaba parte de la verdad, le mostraba información de aclaración de la verdad y le decía con una sonrisa: "Es prudente escuchar más. Sólo escuchando y observando más se puede conocer la verdad". Le dije que el PCCh engañaba y reprimía a la gente y que es corrupto hasta la médula. De vez en cuando, también le recitaba las enseñanzas de Shifu. Después de casi diez años, mi primo finalmente comprendió la verdad y renunció al Partido.

Durante la pandemia de COVID, repartí los materiales de aclaración de la verdad con una compañera. Fuimos de puerta en puerta para aclarar la verdad, y dimos a la gente calendarios y pósteres de Año Nuevo con información sobre Falun Dafa. La mayoría de la gente renunció al Partido. La gente también fue muy amable conmigo. En el momento más crítico de la pandemia, nuestro pueblo estuvo cerrado durante más de un mes. Se instaló vigilancia en la entrada del pueblo y coches de policía patrullaban la carretera principal todos los días. La gente no podía ir a los campos ni salir del pueblo. Mucha gente se infectó, pero en mi pueblo no se contagió nadie. Durante los tres años que duró la pandemia, ni una sola persona de mi pueblo se infectó.

Siempre estudio el Fa y me cultivo con mis hijos. Cuando mi hijo mayor estaba en la escuela primaria, me dijo: "Mamá, he soñado que mi hermano y yo volábamos por el cielo, mi tía y mi abuela caminaban por el suelo y tú ibas en bicicleta". En aquel tiempo, estudiaba el Fa conmigo todos los días y practicaba los ejercicios al mediodía. Estudiábamos cinco conferencias de Zhuan Falun y otras enseñanzas los sábados y domingos, y terminábamos todo el libro Zhuan Falun casi una vez a la semana. Su ojo celestial estaba abierto. Ahora que trabaja en otra ciudad, no tiene ambiente de cultivación. Afortunadamente, Dafa ha echado raíces en su corazón y no está perdido.

Llevé al niño más joven a estudiar el Fa durante un mes antes de que fuera a la escuela, y él vio muchos Fo entrando por la ventana todos los días, algunos meditando y otros arrodillándose. Nos escuchaban leer el Fa. Al final de nuestro estudio del Fa, los Fo salian volando por la puerta.

Mirando atras a mis mas de 20 años de cultivación, he andado un camino lleno de baches, cayéndome y levantándome de nuevo. Mi verdadera creencia en Shifu nunca ha cambiado, y Shifu ha estado sosteniendo mi mano hasta hoy. Estoy dispuesta a trabajar con otros practicantes para salvar a más personas. Atesoro la oportunidad, y no traicionaré el sagrado título de "discípulo de Dafa durante el período de la Rectificación del Fa".