Abandonemos nuestros apegos humanos

(Minghui.org) La junta editorial de Minghui publicó un aviso el 2 de febrero de 2024 sobre una persona en particular que "ya no es discípula de Falun Dafa". Por lo que sé de ella, ha dejado de practicar Dafa. Sin embargo, algunos practicantes se negaron a reconocer el aviso e insisten en seguir tratándola como practicante.

Los verdaderos practicantes de Dafa comprenden que la cultivación es ardua, más desafiante que cualquier otra cosa en el mundo. El camino no siempre es fácil, sino que se vuelve más difícil cuando las viejas fuerzas interfieren con nosotros debido a su envidia. A los practicantes que tropiezan en la cultivación, Shifu les da la oportunidad de reanudar la cultivación y negar los arreglos de las viejas fuerzas escribiendo una "declaración solemne". Pero no es tarea sencilla reiniciar la cultivación y enmendarse.

Shifu ha eliminado la mayor parte de nuestro yeli, dejándonos sólo una pequeña porción para soportar, que a menudo sigue siendo formidable. Para los practicantes que no sólo se desvían de su camino de cultivación, sino que también interfieren con la cultivación de los demás, incurrirán en un yeli sustancial. Tal comportamiento traspasa el límite de un cultivador. Incluso cuando esos practicantes se den cuenta de su error y quieran reanudar la cultivación, se enfrentarán a grandes dificultades. No es algo que puedan superar fácilmente. Es más fácil decirlo que hacerlo. No se puede dar por sentado y no es algo que la mayoría de la gente pueda entender fácilmente.

Shifu nos dijo: “…si no puedes reprimirlo ni mirar hacia adentro, ni mirarte a ti mismo al encontrar conflictos, si no puedes corregirte y eliminar los corazones humanos, entonces no tendrás partes bien cultivadas que se vuelvan divinas”. (Exponiendo el Fa en el Fahui de la capital de los Estados Unidos, Colección de Enseñanzas del Da, Vol. VII) Cuando surgen problemas entre los practicantes, tenemos que reflexionar sobre el camino que hemos andado, pensar en cómo seguiremos caminando por un sendero recto y firme en el futuro, y asegurarnos de que nuestra cultivación siga siendo pura y sagrada.

Cuando las viejas fuerzas lanzaron la persecución en 1999, muchos practicantes eran relativamente nuevos en Dafa. Antes de obtener una comprensión profunda de ella, fueron empujados al período de la rectificación del Fa. De mi observación durante las últimas dos décadas, siento que un número considerable de practicantes todavía basan su cultivación en las cosas de la gente común.

La primera es la autovalidación. Algunos practicantes toman las habilidades otorgadas por Dafa como sus propias habilidades; se apegan a sí mismos y se validan mientras hacen cosas.

En segundo lugar, algunos practicantes ponen a los académicos, las teorías, el razonamiento, la lógica, la ciencia, los intereses y la reputación de la gente común en un lugar más alto que Dafa. No logran asimilarse verdaderamente al Fa a través del estudio del Fa y su xinxing permanece al nivel de la gente común. Cuando surgen conflictos, culpan a los demás en vez de tratar de cultivarse a sí mismos. Se apegan a los asuntos comunes y emplean las teorías y la lógica de la gente común para juzgar cómo deben cultivarse los demás. Algunos incluso critican cómo Shifu debe guiar nuestra cultivación o tratar con los practicantes desde una perspectiva común.

Los dos comportamientos anteriores revelan que el xinxing de los practicantes se mantiene en el nivel de la gente común. Fallan en reconocer estos apegos o en liberarse de ellos, permitiendo que estas sustancias se acumulen con el tiempo, y creando brechas para que las viejas fuerzas interfieran con nosotros. Es como tenderse una trampa a uno mismo, lo que a veces provoca que seamos incapaces de continuar con la cultivación. Después de todo, ¿cómo puede una mentalidad humana comprender la cultivación? Nadie puede escalar la alta montaña de la cultivación con una mentalidad humana moderna.

Los verdaderos cultivadores entienden que las vidas se originan en el Cielo y descienden al mundo mortal para la salvación final por parte del Creador. En el proceso, sus habilidades son selladas capa por capa. Incluso los cultivadores de Budas y Tao tienen que empezar de cero para reactivar sus habilidades selladas. Incluso cuando se libera una porción de estas habilidades notables, puede lograr cosas encomiables. Sin embargo, eso no debe generar arrogancia en este mundo humano. La arrogancia conduce al fracaso e impide que los cultivadores se iluminen con los principios más allá del reino humano.

Aprovechemos esta oportunidad para recordarnos: abandonar los pensamientos humanos y trascenderlos. Estamos aquí para cultivarnos y convertirnos en los seres iluminados del nuevo cosmos, no para vivir una vida humana. Sólo cultivándonos en Dafa y dejando ir las nociones humanas, alcanzaremos la victoria final.

Lo anterior es mi entendimiento actual para compartir con mis compañeros practicantes.