Aclarando la verdad tomando fotos

(Minghui.org) Vivo cerca de una popular atracción turística, y los practicantes locales de Falun Dafa van allí, ayudan a la gente a tomar fotos y aprovechan la oportunidad para aclarar la verdad sobre la persecución.

La mayoría de nosotros no sabíamos nada de fotografía ni teníamos las habilidades necesarias para tomar fotos, por ejemplo, conocimientos sobre los ajustes de apertura o cómo utilizar grandes planos. Dafa abrió nuestra sabiduría y nos dio la capacidad de tomar buenas fotos para que pudiéramos contarle a la gente sobre la persecución y salvarlos.

Ahora dominamos la fotografía y la gente está contenta con las fotos que les hacemos. Después de ver las fotos muchos dicen: «¡Qué guapo estoy!».

Cuando una practicante se ofreció a ayudar a tres turistas a tomarse fotos, se mostraron reacios. El practicante les dijo: «No cobro nada. Pueden borrarla si no están satisfechos». Aceptaron a regañadientes. Cuando vieron las fotos le dieron las gracias y la abrazaron. Entonces ella les contó que millones de chinos ya renunciaron al Partido Comunista Chino (PCCh) y por qué es importante renunciar a él.

Grupos turísticos de entre 10 y 30 personas visitan la zona y les ofrecemos tomarles fotos. A los que les explicamos lo de renunciar el PCCh nos dicen: «Lo que dices es cierto y lo acepto». Algunos nos compran agua o nos dan fruta; otros nos ofrecen dinero, que cortésmente rechazamos; algunos nos invitan a cenar.

Algunos se emocionan hasta las lágrimas. Una persona dijo: «¡Qué bueno eres! Nos ayudas a tomar fotos pero no quieres nada». Un practicante explicó: «Los que practican Falun Dafa son buenas personas. Nuestro Shifu nos enseñó a ser amables y considerados con los demás». Una persona dijo: «¡Le diré a todos mis conocidos que Falun Dafa es bueno!».

El paisaje es especialmente bello en invierno, y gente de toda China visita la zona. Algunos practicantes tienen que viajar más de una hora para llegar. Como pasamos horas de pie en el frío, llevamos ropa de abrigo. Pero es difícil tomar fotos con guantes, así que nos los quitamos. Con el tiempo, la carne de las manos desnudas se agrieta, pero los practicantes siguen felices ayudando a la gente y aclarándoles la verdad.

Era casi Año Nuevo chino, pero los practicantes sabían que la gente estaba en peligro, por lo que era urgente seguir aclarando la verdad y ofreciéndoles ayuda para renunciar al PCCh; incluso en Nochevieja y Año Nuevo chinos, los practicantes no dejaron de salvar a la gente.

Durante el Año Nuevo Chino del año pasado, la hija de un practicante y su familia vinieron de fuera de la ciudad para visitar a sus padres, pero el practicante no quería perder la oportunidad de salvar a la gente durante las vacaciones, así que salió temprano todos los días a la atracción turística. Después volvía a casa y lo celebraba con su familia. La familia de este practicante sabe que Dafa es bueno y lo apoya en la práctica de Falun Dafa.

Superando las interferencias

Con el tiempo, los practicantes nos dimos cuenta de que alguien nos vigilaba. O bien se escondían y nos observaban, o bien nos sacaban fotos y vídeos a escondidas. Pedimos a la gente que cambiara de lugar, para que no nos interfirieran. También enviamos pensamientos rectos hacia esa persona: Los practicantes de Falun Dafa están haciendo lo más recto: salvar a la gente. Enviamos el pensamiento: No sigas al mal y persigas a los practicantes. ¡Deberías elegir un futuro para ti!

En un momento dado, alguien nos denunció a la policía, y tres practicantes fueron llevados a comisaría. No tuvieron miedo y enviaron pensamientos rectos para eliminar los factores malignos que persiguen a Falun Dafa y a los practicantes. Un practicante recordó a los demás: «Si la policía participa en la persecución a Dafa y a los practicantes, no tendrán futuro». Los practicantes no cooperaron ni respondieron a ninguna pregunta. Todos regresaron a casa, sanos y salvos esa noche.

Un practicante fue seguido por la policía mientras aclaraba la verdad a la gente. El policía sacó su teléfono móvil e intentó fotografiar al practicante y hacer llamadas telefónicas. El practicante pensó: No tienes ningún control sobre los practicantes de Falun Dafa. Le dijo con severidad al policía: «Usted debería atrapar a la gente mala. Yo no soy un criminal. Ni fotos ni llamadas telefónicas». El policía se quedó sin habla y se marchó.

Tanto si los fotografiaban como si los acosaban o los seguían, los practicantes evitaban el peligro. Esto es un testimonio de lo que dijo Shifu: 

"Con los dizi repletos de pensamientos rectos,
el Shifu posee el poder de llevarlos al Cielo"
(Bondades entre el Shifu y los dizi, Hong Yin (II)).

No nos arrepentimos de nuestras decisiones. Seguiremos a Shifu y continuaremos salvando a más personas.