(Minghui.org) ¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Soy un practicante de 24 años de Taipei y estoy estudiando mi maestría en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Mingzhi. Estoy muy feliz de contarles sobre mis experiencias de cultivación.

Cuando era pequeño, mi padre me animó a cultivarme. En ese tiempo yo estaba lleno de entusiasmo por estudiar el Fa, y creo firmemente que practicar Falun Dafa es lo más afortunado de mi vida.

Sin embargo, cuando entré a la escuela y me concentré en mis estudios, tuve muchos desafíos de cultivación. Al principio, frente a todo tipo de tentaciones entre la gente común, todavía podía decirme firmemente  que las enfrentaría con la mentalidad de un discípulo de Dafa. Pero la cultivación es seria.

Comencé a relajar mi cultivación y gradualmente manejé los problemas con la mentalidad de una persona común. Mi antiguo entusiasmo y firmeza hacia Dafa se volvieron borrosos.

Confusión en la escuela secundaria

Era amigo de mis compañeros de la escuela secundaria e inevitablemente entré en contacto con información negativa de Internet, algunas de las cuales involucraban contenido pornográfico. Debido a que no mantuve los estándares de un cultivador, mi lujuria se intensificó. Sabía que tenía estos problemas, pero no los eliminé. Incluso vi esos videos inapropiados, sin darme cuenta del todo, de que esto era algo que los cultivadores no deberían hacer. Mi estado de cultivación comenzó a deteriorarse y comencé a fumar y beber.

Mi relación con mi padre también se deterioró. A veces discutía hasta el punto de casi pelear. Mirando hacia atrás, esto puede haberse derivado del hecho de que tenía un corazón impaciente y estaba ansioso por hacer amigos, pero olvidé distinguir entre el bien y el mal. Olvidé que era practicante y no estaba dispuesto a escuchar a mi familia.

Identificando mi egoísmo

Shifu dijo:

“Dado que el hombre está perdido entre la gente común, a menudo en medio de los pensamientos se produce un tipo de intención emitida por fama, beneficio material, lujuria, ira, etcétera, que con el tiempo forma un potente yeli de pensamiento”. (Sexta Lección, Zhuan Falun)

Cuando estaba en la universidad, a menudo sentía una presión invisible. A veces, esta sensación llegaba repentinamente, pero luego gradualmente me di cuenta de que este era el yeli de pensamiento del que hablaba Shifu. En mis años de secundaria y de universidad, a veces aparecía en mi mente, la idea de recriminar a Shifu y a Dafa. Al principio estaba muy confundido, pero entonces sentí que era yeli de pensamiento. Cuando tenía pensamientos rectos, fortalecía mi determinación de eliminarlo, pero parecía que esto tenía un efecto limitado. Después de un tiempo, regresaba. No podía entender por qué sucedía esto, y seguí enviando pensamientos rectos para eliminarlo.

Este verano, mientras era asistente de grupo en el campamento de Minghui, tuve una discusión con otro practicante. La disputa demostró que no se me podía criticar. Al principio, no entendía por qué surgía tal conflicto en este entorno, pero cuando hablé con otros jóvenes practicantes, me di cuenta de que mis pensamientos egocéntricos estaban influyendo en mí, me hacían olvidar mirar hacia adentro, a mis propios problemas.

He estado pensando en cómo resolver esto. De repente, tuve la idea de hablar con mi padre al respecto. Aunque estaba un poco indeciso, me armé de valor para hablar con él. Después de escucharme, me mostró un fragmento:

“En los sitios de práctica, los asistentes deben ser estrictos consigo mismos y generosos hacia los demás. Deben preservar su xinxing y ayudarse mutua y amistosamente”. (Apéndice Tres, Vía de la Gran Perfección)

Cuando vi esta enseñanza, me di cuenta. Resulta que mi forma de hacer las cosas en el campo, era a menudo ser "generoso conmigo mismo y estricto con los demás", por lo que los otros practicantes decían, que mi punto de partida cuando hacía las cosas siempre parecía estar basado en mis propios intereses, pero no tenía consideración por los demás.

Después de que terminó el Campamento de Minghui, pasé una semana estudiando el Fa durante tres o cuatro horas al día. También alargué el tiempo que enviaba pensamientos rectos y practicaba los ejercicios. Durante tantos años, esta fue la primera vez que tomé la iniciativa de mirar hacia adentro y mejorar mi mente. Tuve un pensamiento: Solo si me deshago de mi ego, puede mejorar mi xinxing.

Después de concentrarme en mejorar mi cultivación y xinxing durante una semana, recordé que cuando estaba en el campamento, el punto de partida de muchas cosas que hacía, parecía ser egocéntrico. Pero, cuando otros señalaron esto, me quejé en silencio de ellos.

Miré hacia adentro para encontrar mis otros apegos ocultos que obstaculizaban mi cultivación, como el egoísmo y la ira. Me dije a mí mismo que debería estar feliz de aceptar cualquier crítica. Durante este tiempo, mi relación con mi padre cambió. Pudimos intercambiar entendimientos basados en el Fa, que era algo que no habría sucedido durante mis años de secundaria o de universidad. Fui capaz de escuchar y aceptar cada palabra que él me decía.

Descubrí que después de soltar mi ego, mi corazón estaba tan claro como si lo hubieran lavado. Un día mi padre dijo que yo siempre había estado en paz y que había llegado a ser  amable y compasivo. Dijo que antes, siempre me veía cansado e impaciente, por lo que la gente me evitaba. Recordé que el conflicto que había tenido con el joven practicante no se había resuelto, así que le escribí una sincera carta de disculpa.

Unos días después, se lo entregué al practicante y le describí cómo había mirado hacia adentro. Me di cuenta profundamente de que tomarme a mí mismo como punto de partida en todo, puede poner un muro en mi corazón y evitar que escuche los consejos de los demás. Me perdonó y me sentí aliviado. Cuando dejé de lado los apegos, tuve una sensación de iluminación repentina, porque mi xinxing realmente mejoró.

Participar en las actividades por las razones correctas

Una semana después, serví como asistente en el campamento juvenil. Esta vez, me dije  que ayudaría a cada joven estudiante con la actitud de un Dafa dizi, y que me comunicaría con ellos basándome en el Fa. No permitiría que nuestras conversaciones se convirtieran en discusiones de gente común.

Cuando participé antes, algunas personas dijeron que mi motivo para participar no era correcto, y parecía que estaba participando para hacer amigos. Después de que mi xinxing mejoró, también me di cuenta de que mi mentalidad de participar en el campamento fue, poner el hacer amigos por encima de la cultivación, así que en el proceso de participar en el campamento juvenil este verano, hice todo con seriedad y con una actitud correcta.

Lo hice todo con la mentalidad de no presumir y puse a los demás en primer lugar. Me llevé bien con el personal y con los miembros de mi propio equipo. Cada vez que alguien me daba un consejo, estaba dispuesto a escuchar y compartir mis pensamientos. La interacción fue muy pacífica, y esta fue la primera vez que me sentí así desde que comencé a ayudar en el campamento juvenil.

Shifu dijo:

“Todos tienen que prestar atención a un asunto. Ustedes están validando el Fa, no están validándose a sí mismos. La responsabilidad de un Dafa dizi es validar el Fa. La validación del Fa es también cultivación, y justamente la cultivación es eliminar el apego de uno hacia sí mismo. No deben, por el contrario, ayudar, consciente o inconscientemente, a fomentar este tipo de problema de que uno se está validando a sí mismo”.  (Exponiendo el Fa en la conferencia de estudiantes de la región Asia-Pacífico, 2004)

Me di cuenta de que sólo cuando mi punto de partida es correcto, puedo validar verdaderamente  Dafa.

Durante el campamento, también me invitaron por primera vez a ser el moderador. Después, recibí algunos comentarios positivos y los practicantes agradecieron mi papel como asistente de equipo, algo que nunca había sucedido antes.

Identificando mi envidia

Después del campamento, pensé profundamente en la relación entre la envidia y el yo. Me di cuenta de que cuando trabajaba con otros, a menudo me daba envidia si hacían las cosas más rápido que yo. Esta envidia y compararme conmigo mismo, me ponían ansioso por hacer las cosas rápidamente, pero ignoraba los detalles o lo bien que las hacía. Este tipo de mentalidad no solo afectó mi trabajo escolar, sino que también tuvo un impacto negativo en los proyectos de Dafa. No quería escuchar las sugerencias de otras personas, así que esto obstaculizó mi cultivación.

Después de una profunda reflexión, me di cuenta de que mi impaciencia, que se originaba en la envidia, afectaba la efectividad de lo que hacía y me dificultaba hacer las cosas bien. Alguien señaló que debido a que tenía prisa por hacer las cosas, lo que hacía apenas pasaba el estándar. En ese momento, solo entendí que mi forma de hacer las cosas necesitaba mejorar, pero pronto lo olvidé. Debido a que mi corazón para validarme a mí mismo todavía era fuerte, no me di cuenta de que estaba envidioso.

Desde que encontré la raíz de mi apego, ahora me digo que necesito ser tolerante, apreciar los méritos de otros practicantes, dejar de lado la impaciencia, hacer las cosas con una mentalidad pura, hacerlas sin búsqueda y lidiar con todo con calma. Aunque a veces todavía no puedo alcanzar este nivel, ahora ajusto mi estado y agradezco a los otros practicantes por sus consejos. Creo que esta mentalidad es la de un verdadero cultivador y me ayudará a ser más diligente en el camino de la cultivación.

En resumen

Mirando hacia atrás en mi camino de cultivación, me di cuenta profundamente de que la cultivación está llena de desafíos. De ser un simple cultivador en los primeros días, a relajarme y ser egocéntrico en todo, lo que me llevó a tribulaciones y pruebas innecesarias, gradualmente entendí que la cultivación requiere paciencia y perseverancia, y que no podemos apresurarnos a lograr el éxito. A través de la constante búsqueda interior y refinamiento, aprendí a mantenerme en los estándares de los Dafa dizi, eliminar mi egoísmo y elevarme.

Gracias a la compasión de Shifu, continuaré esforzándome hacia adelante y progresando constantemente en el camino de la cultivación.

Esta es mi experiencia de cultivación, ¡por favor corríjanme amablemente si algo no está alineado con el Fa!

¡Gracias Shifu! Gracias, compañeros practicantes.

(Presentado en el Fahui de Taiwán 2024)