(Minghui.org) Nuestro grupo organizó dos talleres de Falun Dafa de nueve días en mayo y julio de este año. A través de un intercambio de opiniones, los practicantes de nuestro grupo se dieron cuenta de que llevar a cabo clases de nueve días es ahora un requisito de la rectificación del Fa. Fráncfort es la ciudad con más representaciones de Shen Yun de Alemania, y mucha gente debe estar esperando para entrar en contacto con Dafa. Teníamos el deseo y la confianza de impartir las clases de nueve días.

Shifu dijo:

“Ustedes vieron que en sólo unos pocos años de que impartiera el Fa en China continental, cien millones de personas vinieron a aprenderlo. Desde que dejé China no he enseñado los ejercicios o el Fa directamente, y hubo estudiantes que han estado difundiéndolo, llevando a cabo el seminario de los nueve días, y pasando la voz sobre este Fa. Aunque las viejas fuerzas han estado controlando ciertas cosas, no han podido bloquearlo, y muchas personas aún vienen a aprenderlo. ¿Por qué es eso? Porque este Fa puede verdaderamente guiar la cultivación de las personas, realmente puede ayudar a las personas a mejorarse, y puede verdaderamente cambiar el estado de un ser” (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional de Nueva York, 2004).

A continuación, hablaré de la experiencia de nuestro grupo en su conjunto con las dos clases, complementándose, y  apoyándose mutuamente, permitiendo así que más personas predestinadas se unan a las clases de nueve días.

La primera clase de nueve días: Cooperando para hacer un buen trabajo promocionando la clase y asesorando a los posibles participantes

Durante la promoción del taller y la realización de la primera clase de nueve días, nos encontramos con dos tareas muy difíciles, ambas resueltas con la cooperación y el esfuerzo de los practicantes.

La primera tarea fue pegar carteles y repartir folletos. En menos de 10 días, colocamos 250 carteles y repartimos 2.500 folletos. Shen Yun todavía estaba de gira por Alemania en aquel momento, y los compañeros que tenían mucha experiencia en la colocación de carteles de Shen Yun habían ido a otras ciudades para apoyar a Shen Yun. Nunca antes habíamos colocado carteles para clases de nueve días, y para nuestro grupo fue todo un reto colocar tantos en tan poco tiempo.

Un sábado antes del taller, siete practicantes se ofrecieron voluntarios para ir al centro de la ciudad a pegar carteles, y la mayoría de ellos eran inexpertos. Al final del día, todos habían pegado muchos carteles y sentían que había cambios en el ambiente. Muchas tiendas estaban dispuestas a colocar carteles sobre Falun Gong. Esto fue un gran estímulo para todos.

La semana siguiente, algunos practicantes salieron a pegar carteles con bastante frecuencia. Un practicante vietnamita, que no hablaba muy bien alemán, puso muchos carteles, y los carteles estaban en lugares muy llamativos, como en la entrada de un gran supermercado, en los grandes escaparates de la tienda. Esto demuestra que mientras los practicantes tengan un corazón puro para salvar a los demás, Shifu nos bendecirá y nos dará sabiduría.

Todo el mundo pegó los carteles a tiempo y también dejamos folletos en las tiendas. Una mujer vietnamita de mediana edad que asistió al curso de nueve días tras recibir un folleto no faltó a ninguna clase. Cuando terminó el taller, dijo que se le había quitado el insomnio, el dolor de manos y hombros y había empezado a cultivarse.

El segundo punto que había que superar era que, dadas las circunstancias, había sido difícil encontrar a un practicante con tiempo suficiente para ser instructor, por no hablar de encontrar a dos instructores fijos para el taller de nueve días.

Pedí a los practicantes de mi grupo que se inscribieran como instructores. Siete se apuntaron; la mayoría de ellos son practicantes veteranos, tienen sentido de la responsabilidad y fuertes pensamientos rectos. Todos se turnaron en sus funciones y cada día había dos practicantes, así que, con la cooperación y el esfuerzo de todos, se resolvió el problema de tener suficientes instructores.

El último día, durante un intercambio, una mujer alemana que había venido todos los días dijo a los practicantes que antes no se había interesado por la cultura china y que no había tenido una buena impresión de los chinos, pero que esta vez se había llevado una buena impresión después de conocer a tantos chinos (seis de los instructores eran practicantes chinos). Los practicantes le parecieron amables, sinceros y pacientes. Dijo que realmente quería empezar a practicar Falun Dafa.

La segunda clase de nueve días: En busca de personas que tienen relaciones predestinadas con Dafa

La segunda clase de nueve días fue mucho más fluida. Desde el principio, dos practicantes se mostraron dispuestos a asumir el trabajo de instructor del taller de nueve días. El número de personas que se apuntaron al taller fue más del doble que la del primera taller, y el último día había diez personas. Los dos practicantes se llevaron bien con todos los participantes, que se mostraron muy satisfechos con los esfuerzos de los practicantes y el ambiente armonioso de la clase.

Aquí me gustaría presentar la experiencia de una compañera practicante que buscaba personas predestinadas para participar en las clases de nueve días. Cierta practicante no pertenece al grupo de Fráncfort, pero de todo corazón quería ayudarnos a impartir la clase de nueve días. No paró de enviar mensajes para promocionar el taller de nueve días y consiguió que más de diez personas se apuntaran como participantes. Antes de empezar el curso, la practicante pasó mucho tiempo respondiendo a sus preguntas y resolviendo cualquiera de sus dudas.

Una de las señoras le dijo que si el número de solicitantes seguía aumentando, ella no vendría. Al principio, la practicante se sintió un poco preocupada por esto, pero luego pensó que las clases de nueve días estaban abiertas a todo el mundo, así que escribió a la mujer y le explicó el taller de nueve días, diciéndole que todo el mundo se beneficiaba de los demás en un entorno colectivo, y que ese campo sería bueno para ella. La mujer estuvo de acuerdo con la practicante y no se retiró de la clase.

Para mejorar la comprensión de la gente sobre la clase de nueve días, esta compañera practicante compartió su experiencia y sentimientos sobre la asistencia al taller de nueve días en el pasado, la importancia de ver las videoconferencias sobre el Fa, y explicó las características especiales de Falun Dafa. Explicó que la cultivación de la mente es lo primero, y la práctica de los ejercicios es complementaria. Después de leer las explicaciones de esta practicante, la gente se interesó mucho por Falun Dafa, y la mayoría asistió a las clases.

Un alemán contó a los practicantes que, cuando vio el mensaje sobre la clase de nueve días, rompió a llorar y supo que eso era lo que había estado buscando. Como no tenía automóvil, tomó el tren para ir todos los días. Sólo perdió una sesión porque el tren se canceló, pero ese día vio el vídeo de la conferencia de Shifu en casa acompañado de la gente con la que vivía.

Otro hombre, que vive en Bielefeld, vio información sobre el taller de nueve días y dijo a los practicantes que Falun Dafa era exactamente lo que había estado buscando. Tras dos días de clases, tuvo que irse a Francia. Dijo a los practicantes que los dos días de clase habían plantado una semilla en él, y que aprendería Falun Dafa cuando volviera a casa.

Tras el taller de nueve días, los participantes querían seguir en contacto, así que los practicantes crearon una plataforma para que pudieran comunicarse. Hace poco, dos personas dijeron que querían estudiar el Fa y que si los practicantes iban a estudiar el Fa en línea que se lo hicieran saber y que estudiarían con ellos cuando estuvieran libres.

El domingo pasado, dos nuevos estudiantes se unieron a los ejercicios en grupo en el lugar de práctica en grupo de Fráncfort. Uno de ellos presentó Falun Dafa a los transeúntes del lugar de práctica.

Al recordar la promoción del segundo taller de nueve días, muchos practicantes del grupo participaron y, en poco tiempo, habíamos colocado 250 carteles y distribuido 2.500 folletos. Todo el proceso, desde la búsqueda de un lugar para la clase, la colocación de carteles, la distribución de folletos, la búsqueda de personas predestinadas a participar y la realización de las clases de nueve días, estuvo impregnado del proceso general de cultivación de la cooperación, el apoyo mutuo y los esfuerzos conjuntos. Todos tienen un deseo común: brindar a más personas la oportunidad de entrar en la cultivación de Dafa.

No hace mucho, recibí una llamada telefónica de una mujer que vio el folleto de nuestro taller de nueve días en un supermercado. Como el folleto estaba caducado, me dijo que quería participar en el próximo taller. También hubo personas que no pudieron participar en el último curso de nueve días por irse de vacaciones y otros viajes, así que nos pidieron que les informáramos de cuándo se organizara el taller en el futuro. Esto nos indica que muchas personas siguen esperando para asistir al taller de iniciación. Tenemos la misión de atraer a más personas predestinadas a la clase de nueve días y a la cultivación de Dafa.