​Cultivándome cuando me sentí agraviada

(Minghui.org) Llevo 14 años trabajando como empleada doméstica para mi tía. Es una directora de escuela primaria jubilada de 83 años. Me he llevado muy bien con su familia durante todos estos años, ya que siempre he seguido las enseñanzas de Shifu. Miro hacia dentro, pienso primero en las necesidades de los demás y hago el bien a los demás. La gente que me rodea siente que los practicantes de Falun Dafa son moralmente nobles, rectos y tranquilizantes, y ellos comprenden que Falun Dafa es recto.

El almuerzo de las empleadas domésticas que trabajan a tiempo completo suele proporcionarlo el empleador. Sin embargo, durante más de diez años he llevado mi propio almuerzo todos los días para ahorrarle dinero a mi tía. Usaba los electrodomésticos, como el aire acondicionado, con cuidado y solo según las necesidades de mi tía. Hice todo como lo haría en mi propia casa. Hacía la limpieza diaria de la casa y mantenía el ambiente interior fresco, limpio y translúcido, lo que la hacía feliz a ella y a toda la familia. Me elogiaban repetidamente: "Contratamos a varias personas en el pasado, pero ninguna era tan responsable y libre de problemas como tú. Eres realmente diferente a los demás". Sus dos hijos y su nuera eran funcionarios del gobierno. Sabían la verdad sobre Dafa, pero no lo decían explícitamente.

Un día antes del Año Nuevo Lunar chino de 2021, mi tía me dijo que me daría medio día libre a la mañana siguiente, y que solo tenía que ir a la una de la tarde para preparar una cena de Año Nuevo para su familia de siete miembros, preparando albóndigas y cocinando seis platos. Considerando que tal vez no tendría tiempo suficiente solo por la tarde, decidí ir a casa de mi tía a la mañana siguiente para empezar a preparar la comida y la cena. Apenas entré, mi tía no se alegró de verme. Me había dado medio día libre, pero aun así fui por la mañana. Dijo que le hacía sentir que no cumplía su palabra. No importaba cómo se lo explicara, no estaba contenta. Me sentí agraviada y lloré mientras trabajaba en la cocina. Me sentí disgustada y no dije ni una palabra mientras las dos almorzábamos. Luego me puse a preparar la cena. Al cabo de un rato, terminé mi trabajo. Me despedí con frialdad y me fui rápidamente a casa a preparar la cena de Fin de Año de mi familia.

Después de la cena, aún me sentía disgustada. Después de guardar los palillos y los cuencos, me senté en la cama aturdida. Parecía difícil deshacerme del sentimiento de agravio en mi corazón. En ese momento, me vino a la mente la enseñanza de Shifu:

“Cultivador practicante
Busca tú mismo los errores
Elimina todo tipo de corazones humanos
No te quedes atrás en grandes pruebas, pequeñas pruebas, no pienses en caer
El que tiene la razón es él
El que está equivocado soy yo
¿Por qué contienden?
(Quién tiene razón, quién no, Hong Yin III).

Las enseñanzas de Shifu tienen una energía poderosa, que me levantaron el ánimo de inmediato. Mi mente pasó de repente de mirar hacia fuera a mirar hacia dentro. Lo que dijo mi tía sobre que sus palabras parecían "vacías y falsas"... ¿no corresponde esta palabra "vacío" a "no ser sincero"? ¿Esta palabra "falso" no corresponde a no ser verdadero? ¿Es porque no practiqué la verdadera cultivación y Shifu usó las palabras de mi tía para iluminarme? Shifu nos ha enseñado repetidamente que, hagamos lo que hagamos, debemos pensar primero en los demás y considerar las cuestiones desde la perspectiva del otro. Mi error en este asunto fue que no le dije a mi tía por adelantado porqué quería ir a trabajar por la mañana, para que ella pudiera entenderlo antes de que yo llegara. Además, mi tía probablemente me estaba dando el tiempo libre para expresar su aprobación, simpatía y gratitud por mi trabajo. Tenía buenas intenciones, pero estaba confundida por mi comportamiento.

Me disculpé con mi tía cuando llegué a su casa a la mañana siguiente. Sin embargo, mi tía también se disculpó conmigo por haberme pedido que cocinara demasiado por la tarde. A las dos se nos salieron las lágrimas. Le dije a mi tía que la cuidaría como cuido a mi propia madre, que tiene 88 años, porque Shifu nos ha dicho claramente que seamos amables con todos. Mi tía dijo: "Cuando te veo leer ese libro -Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa-, todos los días, pienso que debe ser un buen libro. Es decir, ¡un libro recto! ¿Puedes encontrar un ejemplar para que lo lea?". Acepté encantada.