Mis vecinos y yo

(Minghui.org) Tengo más de 70 años y practico Falun Dafa desde hace más de 20 años. He experimentando diferentes tipos de tribulaciones en mi camino de cultivación, pero las he superado porque he tomado la cultivación en serio y he sido protegida por Shifu.

Un desagüe obstruido ofrece una oportunidad para validar el Fa

Mi apartamento está en el segundo piso. En el piso de abajo vive una familia y la esposa tiene unos 60 años. No se lleva bien con los demás vecinos y a menudo discute con ellos por cosas sin importancia. La zona exterior de su piso es un espacio público, por lo que es normal que algunas personas dejen allí sus bicicletas, pero ella no lo permite. Si alguien deja una bicicleta allí, le grita.

La relación entre mi familia y la suya era bastante buena, porque mi hijo a menudo reparaba gratis el ordenador y la impresora de su familia. Después de que mi hijo se casó y se mudó, para ella era incómodo pedir ayuda a mi hijo, y pronto se volvió fría conmigo. Pensé: "Soy una practicante y debo actuar de acuerdo con los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia. No puedo comportarme como una persona común, así que me llevaré bien con ella como lo hice en el pasado".

Sin embargo, ocurrió algo inesperado que la enfureció. Mi esposo tiene atrofia cerebelosa y se confunde con facilidad, por lo que a menudo es torpe y no hace las cosas bien.

Una tarde fui a hacer las compras y le dejé solo en casa. Él cerró la puerta por dentro. Al regresar, no pude abrir la puerta con la llave y no respondía a mis llamadas. Tuve que buscar un cerrajero, pero el técnico me dijo que no había forma de abrir una puerta cerrada por dentro sin cortar la cerradura. No tuve más remedio que pedir ayuda a unos familiares. Uno de ellos intentó trepar por la ventana, pero la escalera no era lo bastante alta para alcanzar la ventana del segundo piso. Estaba oscureciendo y  estaba preocupada.

Alguien sugirió que llamáramos a los bomberos. Cuando llegaron, dijeron que solo podían subir al voladizo del primer piso de mi vecina y abrir mi ventana desde allí. Hablé con mi vecina, pero se negó a permitirlo, temiendo que pudieran dañar el voladizo de la puerta y hacer que la lluvia se filtrara al interior. Algunos curiosos comentaron que estaba complicando las cosas intencionadamente a alguien con problemas. En ese momento, no me preocupé demasiado y le dije: "¡No se preocupe! Si hay algún daño en su propiedad, ¡yo pagaré la reparación!". Aceptó de mala gana. Los bomberos subieron al voladizo de su puerta, se metieron por la ventana del segundo piso, abrieron mi puerta y el problema quedó resuelto.

Después de aquella situación, nos guardó rencor y a menudo nos echaba en cara su disgusto. Con frecuencia contaba a otros vecinos que mi esposo movía las cosas a mitad de la noche, perturbando su sueño, y decía que era una desgracia que fuéramos sus vecinos, entre otras cosas desagradables.

Un día nos encontramos en el patio de la comunidad. La saludé, pero me miró con frialdad y se dio la vuelta. Pensé: "Hemos tratado bien a su familia, pero desde aquel incidente se ha puesto en nuestra contra. Tenemos la mala suerte de ser sus vecinos".

No pude superarlo durante dos días y sentí que se me oprimía el corazón. Más tarde, a través de un intenso estudio del Fa, me di cuenta que ella me había estado ayudando a mejorar mi xinxing, lo cual era algo bueno. Entonces, ¿por qué iba a enfadarme? ¿No eran mi apego a guardar las apariencias y a la competitividad? Poco a poco abandoné mi resentimiento y me fui calmando.

A principios de año, los desagües del primer piso se atascaron. Esta vecina pagó para que arreglaran el problema y luego llamó a las puertas de los vecinos del piso de arriba para recaudar dinero para la reparación. Algunos de los residentes no le dieron nada y la regañaron. Otros le pagaron, pero también la insultaron. Yo no estaba en casa cuando llamó a mi puerta, así que llamó a mi hijo para explicarle por qué estaba recaudando dinero. Mi hijo me dijo por teléfono: "Usaré WeChat para pagar a la señora de abajo". Yo le contesté: "¡Sería mejor entregárselo personalmente! Podría haber algún malentendido, ¡así podré explicarle las cosas cuando la vea!".

Se sorprendió al verme. Le dije: "Vengo a pagarle por arreglar los desagües. No estaba en casa cuando tocó a la puerta la última vez. No puedo permitir que haga un segundo viaje, así que aquí estoy. No es fácil encargarse de los desagües. Muchas gracias".

Estaba contenta y su actitud cambió completamente. Me expresó su gratitud en varias ocasiones, diciendo que yo era bondadosa y considerada y que, en comparación con la gente común, los practicantes éramos diferentes.

Ahora me saluda alegremente cada vez que me ve, y su insatisfacción y resentimiento son cosas del pasado.

Mi vecina de arriba

Mi vecina de arriba y mi familia son vecinos desde hace 30 años y se llevan muy bien. Pero a menudo tienen goteras y mi piso se ha inundado más de una vez. O se les rompió la bañera, o la tubería de agua de la cisterna del inodoro no estaba bien instalada, o se les olvida cerrar el grifo. Normalmente les perdonaba las goteras y no dejaba que me indemnizaran por los daños causados por el agua.

Un día del año pasado, el quinto piso de nuestro edificio se inundó, y el agua bajó hasta mi apartamento del segundo piso. El vecino del tercer piso, por supuesto, también se inundó. Un poco avergonzada, la esposa me dijo: "Amiga mía, ¡te admiro de verdad! Ya hemos inundado tu piso varias veces. Ahora sé los problemas que causa. Pero siempre has mantenido la calma y nunca nos has pedido que te recompensemos".

Sonreí mientras respondía: "No hay problema. Practico Verdad, Benevolencia y Tolerancia y debo considerar primero a los demás y no causarles problemas". Ella asintió con la cabeza.

Hace unos días, el piso de mi vecino del tercer piso se volvió a inundar. Bajaron varias veces a mi piso para encontrar exactamente por dónde goteaba y lo arreglaron. Tuve que quedarme despierta hasta muy tarde esa noche. Estaban muy apenados e intentaron darme 200 yuanes como compensación, que no acepté. Les dije: "¿Quién no tiene problemas? Mientras presten más atención a su apartamento en el futuro, todo estará bien". Se sintieron avergonzados, pero una vez más percibieron la Tolerancia y generosidad de un practicante de Dafa.

Mis vecinos han sido testigos de la belleza de Dafa. Les he hablado de Dafa y han renunciado al Partido Comunista Chino (PCCh) y a sus organizaciones juveniles. Sé que todavía me separa una gran distancia con el nivel de Dafa. De ahora en adelante, seré más diligente, me cultivaré bien, haré las tres cosas y volveré a casa con Shifu.