(Minghui.org) Yun Ling y yo trabajábamos en la misma empresa antes de empezar a practicar Falun Dafa. Yo era extrovertida, impulsiva y sincera. Yun Ling era todo lo contrario. Era gentil, hablaba en voz baja, era amable y reflexionaba mucho sobre los asuntos mundiales. Ambas tenemos la suerte de practicar Falun Dafa.

Los practicantes de Falun Dafa empezaron a contrarrestar la persecución, a aclarar la verdad sobre Dafa y a salvar a los seres conscientes después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) iniciara la persecución contra Falun Dafa en julio de 1999. Yun Ling y yo hemos cooperado y aclarado la verdad a la gente juntas desde que nos mudamos al mismo complejo residencial a finales de 2016.

Yun Ling y yo solíamos trabajar en un hostal del condado. Secretarios del PCCh, directores y funcionarios del gobierno del condado de diferentes municipios y aldeas asistían a menudo a reuniones en el centro del condado. Se alojaban en el hostal, así que conocimos a muchos de ellos.

Yun Ling y yo nos jubilamos hace muchos años. La mayoría de los funcionarios que conocíamos también se habían jubilado. En realidad, no podíamos recordar a muchos de ellos, ya que había pasado mucho tiempo. Cuando nos cruzábamos con gente que nos resultaba familiar, nos acercábamos a ellos y les preguntábamos si eran tal o cual. Si decían que lo eran, les aclarábamos la verdad y les pedíamos que renunciasen al PCCh y a sus organizaciones juveniles. Si decían que no lo eran, les decíamos: "Nos resultas muy familiar. Te habremos visto en alguna parte". Entonces les aclarábamos la verdad. Les dábamos los  folletos, Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista y El propósito final del comunismo y les pedíamos que los leyeran detenidamente para que comprendieran realmente la naturaleza malvada del PCCh y por qué es importante renunciar.

Un día vimos a una persona de la calle sentada en la escalera de un edificio. Nos acercamos a hablar con él a pesar de que olía mal. Levantamos un poco la voz cuando vimos a otro hombre cerca para que pudiera oírnos. El hombre que olía mal dijo en voz alta: "La gente cree que soy estúpido. En realidad, tengo las cosas más claras que mucha gente. Creo totalmente lo que me acabas de decir". El otro hombre se acercó mientras hablábamos, y Yun Ling le ayudó a renunciar al PCCh.

Una noche, cuando pasamos por delante de la caseta de vigilancia del complejo residencial, un guardia nos reconoció y nos pidió que entráramos. En cuanto nos sentamos, entró un hombre de unos 70 años y gritó: "Ustedes son Falun Gong. No me digan nada. Tengo una pariente que falleció porque se negó a tomar medicinas". Yun Ling le dijo que no era cierto. Se puso más virulento y dijo cosas aún peores. Yun Ling le sonrió todo el tiempo. El hombre dio un portazo y se marchó. El otro hombre dijo: "Puede elegir escuchar o no. Del mismo modo, tú puedes elegir lo que le dices".

Incidentes que me ayudaron a deshacerme del miedo

Recuerdo claramente tres incidentes que me gustaría compartir.

Un día, un auto veloz se detuvo junto a nosotros mientras Yun Ling y yo estábamos colocando folletos de aclaración de la verdad en los autos estacionados. Un hombre salió del automóvil y me preguntó qué llevaba en la bolsa. Me acerqué la bolsa al pecho y el corazón me latió más deprisa. Intenté mantener la calma y le pregunté: "¿Qué quiere decir?". Me contestó: "¿Tienes un colgante para el automóvil?". Le dije que no tenía uno de esos, pero sí otros materiales. Aceptó encantado un folleto, me dio las gracias y se marchó.

En otra ocasión, Yun Ling y yo fuimos a los suburbios exteriores para aclarar la verdad. Vimos a unas personas trabajando en el campo. Uno de ellos clavó su pala en la tierra y nos gritó: "¡Hola! ¿Practican Falun Gong? Vengan aquí". Yun Ling y yo nos miramos sin saber qué quería decir. Nos acercamos a él y nos dijo: "Díganme qué hacen hoy aquí". Eso hizo que nos relajáramos un poco. Le pedimos a Shifu que nos diera sabiduría y nos fortaleciera y luego le contamos cómo el PCCh promovía el ateísmo después de llegar al poder, cómo ha perseguido al pueblo chino durante sus campañas políticas, cómo ha dañado la cultura tradicional y cómo persigue a Falun Gong (también llamado Falun Dafa). Les explicamos el significado de renunciar al PCCh. Uno de ellos dijo: "Ahora lo entiendo. Por favor, ayúdenme a renunciar a los Jóvenes Pioneros". Nos sorprendió que aquel día habláramos con tanta fluidez. Gracias, Shifu, por su fortalecimiento.

Yun Ling y yo estábamos un día poniendo un folleto en la manilla de un auto aparcado cuando la puerta se abrió de repente y nos asustó. El joven dijo con desprecio: "Soy de la estación de policía". Cuando intentamos aclararle la verdad, nos dijo: "¿Cómo te atreves a decirme esas cosas? Están en peligro". Le dije bromeando: "No estamos en peligro en absoluto". Cuando me preguntó por qué no, le dije: "Porque eres una buena persona. No perseguirías a la gente buena". Se rió y nos dijo que nos fuéramos.

¡Gracias, Shifu, por tu fortalecimiento! Siempre que había un incidente repentino, Shifu siempre reforzaba nuestros pensamientos rectos y nos daba sabiduría.

Obteniendo buenos resultados

Mi suegra estuvo enferma un tiempo y mi cuñada vino a cuidarla. Yo estaba muy ocupada y no tuve tiempo de salir con Yun Ling, así que fue ella sola. Se portó muy bien.

Yun Ling y yo cooperamos bien durante años. Tuvimos muchos conflictos de xinxing porque éramos muy diferentes, pero sabíamos que debíamos seguir el Fa y mirar en nuestro interior. Los conflictos se resolvieron rápidamente cada vez, y nuestro xinxing mejoró.

Yun Ling me contó que yo solía decirle: "Estamos en niveles diferentes. No me midas con tu estándar" y "Venimos de lugares diferentes. No te impondré nada". Me sentía avergonzada de mí misma. Fui tan arrogante y la herí. Fue un palo de advertencia para mí.

En el futuro, cultivaré mi xinxing y seguiré el Fa, cooperaré bien con los demás practicantes, aclararé la verdad y salvaré a más seres conscientes.