(Minghui.org) Soy una practicante de Dafa y trabajo en una granja. Este año cumpliré 61 años. Comencé a cultivar Falun Dafa para curar mis enfermedades. Después de años de limpiar mi cuerpo y atravesar distintas pruebas de vida y de muerte, acabé librándome de las enfermedades. Una y otra vez, el benevolente Shifu me salvó cuando estaba al borde de la muerte.

Aprendiendo a producir materiales de aclaración de la verdad

En 2015, con la sabiduría que adquirí siguiendo las enseñanzas de Shifu, comencé a aprender ciertas habilidades. Me ayudaron mis hijos y me motivaron los compañeros practicantes. A pesar de que al principio no sabía ni siquiera cómo usar el “ratón”, aprendí a utilizar las computadoras, conectarme a internet e imprimir materiales de aclaración de la verdad. Después de asimilar estas habilidades, comencé a hacer todo tipo de materiales para aclarar la verdad y a salir con los demás practicantes para ayudar a la gente a que comprenda qué es Falun Dafa y la persecución. Hacíamos cosas como repartir materiales cara a cara, hablar con la gente, pegar adhesivos y colgar pancartas con información sobre Dafa.

Durante aquel puñado de años, la gente que vivía lejos de nosotros también pudo ver nuestros materiales de aclaración de la verdad, pegatinas y pancartas. Más tarde, dedicaba mucho tiempo a elaborar los materiales de aclaración de la verdad, por lo que casi nunca salía. Los demás practicantes, mientras tanto, continuaron ayudando a salvar seres conscientes. Incluso cuando la pandemia se agravó durante los últimos dos años, hasta el punto que nuestro pueblo quedó aislado tras el cierre de las carreteras, estos practicantes no sólo no se desanimaron, sino que sintieron aún más lo valioso del tiempo que quedaba y cómo de urgente era ofrecerle la salvación a la gente.

Las impresoras se estropeaban a menudo al aumentar la demanda de materiales

En 2019, podía producir una cantidad limitada de materiales con mi impresora, un practicante de la ciudad me ayudó a comprar una nueva impresora. Los practicantes siguieron repartiendo materiales y mucha gente llegó a comprender la verdad, por lo que la demanda de materiales siguió aumentando, especialmente de los calendarios con información sobre Dafa. Con el fin de no retrasar la salvación de seres conscientes, en 2020 compré otra impresora. Pensé en usar una impresora para imprimir materiales y la otra para imprimir calendarios, para tener más tiempo para estudiar el Fa. No obstante, las cosas no fueron como las planeé.

El cabezal de la nueva impresora se estropeó nueve días después de comprarla. El practicante técnico vino y se la llevó, dejándome una vieja en su lugar. No pensé mucho en ello, ya que sentí que cualquier impresora que llegase a mi casa era para asistir a Shifu a salvar seres conscientes conmigo. Esta era su condición así que lo aprecié.

No obstante, al poco, ambas impresoras volvieron a tener problemas y el practicante técnico siguió ayudándome a repararlas hasta la primavera de este año. Aunque había gastado bastante dinero en reparar las dos impresoras, ambas dejaron de funcionar. Dejé ir mi apego de hacer cosas y comencé a estudiar el Fa con los pies en la tierra. A pesar de eso, los problemas siguieron. Los practicantes se apresuraban a salvar a seres conscientes. Mientras ellos hacían esa urgente y sagrada tarea yo dejé de hacer materiales, me sentí muy perdida.

Durante ese periodo de tiempo, un practicante veterano que solía coordinar este proyecto falleció debido a una enfermedad. Ese día, fui a la ciudad para intercambiar entendimientos con algunos practicantes. Un practicante enumeró varios defectos que tenía el coordinador que falleció, criticando y quejándose de la persona al mismo tiempo. Aunque detuve al practicante que estaba hablando mal, este incidente me perturbó mucho. Cuando regresé a casa comencé a cambiar mis nociones y a reflexionar sobre el camino de cultivación que había tomado en los últimos años mientras participaba en este proyecto de Dafa.

Apego a hacer cosas y a que los practicantes confíen en mí

Recordé que la primera vez que me uní al proyecto, hice cosas por gratitud y por el deseo de devolverle a Shifu el favor de haber salvado mi vida y también con una actitud pura de asistir a Shifu a salvar a seres. A medida que pasaba el tiempo y que la demanda de materiales de aclaración de la verdad aumentaba desarrollé el apego a hacer cosas. Esto ha sido especialmente cierto en los últimos años, cuando el practicante encargado de comprar la materia prima se fue a vivir lejos a casa de su hijo y me traspasó sus tareas.

Descubrí que otros practicantes desarrollaron gradualmente un apego a depender de mí. Usaban los problemas de seguridad y de que no sabían hacer algo como excusa para no hacerlo ellos, y luego decían abiertamente que yo era nueva, que les superaba y que esa era mi misión. Esto me preocupaba mucho y no sabía cómo resolver ese problema. Pensaba que todos ellos eran Dafa dizi que obtuvieron el Fa más de diez años antes que yo. ¿Cómo podían estar en tal estado de cultivación? Aunque tenga muchas cosas que hacer, tengo mis propias normas. No importa cuán ocupada este, si no hay situaciones excepcionales, persistiré en memorizar y estudiar el Fa cada mañana y en practicar las cinco series de ejercicios cada noche con los compañeros practicantes. A través del estudio del Fa aprendí que era el momento de mejorar mi xinxing.

Animando a los practicantes a producir materiales por sí mismos

Después de que paré de hacer materiales, dejé que los practicantes se fueran y que buscaran sus propias fuentes de producción de materiales para aclarar la verdad. Algunos practicantes chismorreaban, mientras que a otros no les hizo ninguna gracia. Me pareció injusto que durante todo este tiempo siempre hubiera ido a comprar la materia prima yo sola, y ahora que había dejado de hacer materiales, todos se sintieran de esta forma.

Sin embargo, la muerte del practicante veterano realmente me despertó. Me calmé para estudiar y memorizar el Fa y enviar pensamientos rectos para limpiar mi propio campo y mis pensamientos negativos que no estaban en el Fa. Me corregí basándome en Fa y comprendí que debía dejarme llevar. No debo intervenir en el camino de cultivación de cada practicante.

Esto ha sido especialmente cierto desde el comienzo de la pandemia. Realmente sentí la impotencia y la ansiedad de los practicantes que no podían conectarse a Internet, ni conseguir materiales para aclarar la verdad en ese entorno tan restringido. Le di a cada coordinador de cada pueblo el número de teléfono y la dirección del lugar donde compraba las materias primas y les animé a que fueran a comprarlos. Aunque algunos practicantes estaban muy descontentos por ello, no vacilé, porque todos los practicantes están bajo la vigilancia de Shifu, así que cada uno de nosotros puede hacerlo bien.

Después de desprenderme de esto, mi cuerpo cambió rápidamente. Durante muchos años, cuando hacía la postura de la flor de loto con la mano mientras enviaba pensamientos rectos no podía extender la mano derecha, a pesar de emplear toda mi fuerza en ello. Ahora, todos mis dedos podían abrirse a la vez y el dorso de mi mano, que solía dolerme debido al fuerte estiramiento, ya no me dolía. Durante mucho tiempo, no podía ver claramente los caracteres con mi ojo izquierdo mientras estudiaba el Fa. Ahora puedo verlos mucho más claramente con ese ojo. Sé que esto se debe a que me había corregido basándome en el Fa y así Shifu me ayudó a deshacerme del yeli. Con eso, continué soltando.

Ayudando a los practicantes a navegar por el sitio web de Minghui

Hace dos años, leí un artículo en internet acerca de un intercambio de cultivación que hablaba sobre cómo todo el mundo podía entrar en Minghui.org, me pareció increíble que los practicantes que hacen materiales pudieran dejar de depender de los practicantes técnicos. Esto era especialmente cierto para nuestro pueblo, ya que algunos practicantes tienen un nivel de estudios muy bajo, tanto es así que tardaron años en poder terminar de leer Zhuan Falun. Por lo tanto, era imposible alcanzar el estado de cultivación en el que todos pudieran entrar en Minghui.org.

Sin embargo, mis experiencias me hicieron empezar a cambiar mis nociones. Quería intentar realizar este proyecto. Con este pensamiento, Shifu me dio pistas en un sueño. Sin embargo, debido al nivel económico del pueblo, me preocupaba que los practicantes no gastaran dinero en comprar una computadora. Pero también me di cuenta de que ahora que Shifu me había iluminado, sin duda nos ayudaría. Un día pregunté a los practicantes si tenían computadoras viejas en casa que sus hijos ya no utilizaran. Les dije que, si era así, podíamos utilizarlos.

Después de oírlo, todos los practicantes que tenían una o dos computadoras en casa me los trajeron. Casualmente, mi hijo, que estudia informática y programación, también estaba en casa. Me ayudó a reparar esos ordenadores y a instalarles sistemas operativos para que los utilizaran. Pero no fue suficiente, así que mi hijo reparó un ordenador viejo que teníamos en casa y se lo dimos a un practicante. También vendí una computadora nueva a un tercio de su precio a una pareja de practicantes ancianos. Después de todo esto, seguíamos necesitando una computadora más. Fui a la ciudad a pedirle a un practicante que me ayudara a comprar otro.

Después de ir varias veces a la ciudad, todavía no había conseguido comprar una computadora nueva por muchas razones. Otro practicante de la ciudad, que participaba en otro proyecto de Dafa, se enteró de nuestra situación y pensó que debía hacer todo lo posible para que todos los practicantes pudieran entrar en Minghui.org, por lo que me apoyó mucho. Al ver que yo estaba pasando por tantos problemas por este asunto, decidió donarnos dos ordenadores. Sé que así fue como me ayudó Shifu, y no hay palabras para describir mi gratitud. Agradecí a ese practicante su ayuda desinteresada.

Después de unos meses de duro trabajo, de desprenderse de las nociones humanas, de deshacerse del apego a la pereza, del miedo a los problemas, y de deshacerse de la perturbación de la pandemia, bajo la vigilancia y protección del benévolo Shifu, dos practicantes dieron un paso al frente dispuestos a seguir enseñando a los demás practicantes cómo entrar en Minghui.org.

Ahora, aparte del practicante anciano que no tiene internet en casa, los nueve practicantes restantes de nuestro pueblo pueden conectarse a Minghui.org. También se han utilizado los viejos ordenadores de dos practicantes de un pueblo vecino. Durante la primavera, cuando la pandemia fue bastante grave, aunque la aldea y las carreteras estaban bloqueadas, los practicantes teníamos a Shifu vigilándonos y a Minghui.org para guiarnos y mantenernos al día con el progreso de la rectificación del Fa.

Además, ya no necesito imprimir el Minghui Semanal. Esto no sólo ha ahorrado recursos a Dafa, también tiempo. Cada vez que Minghui.org tiene alguna notificación, los practicantes se lo recuerdan unos a otros y tratan de hacerlo bien. No sólo me he corregido, sino que también ha mejorado el xinxing de otros practicantes. Al principio, no quería gastar más dinero en comprar equipos, pero el nuevo equipo que acababa de comprar para otro practicante, ya no lo necesitaba, así que se lo volví a comprar y ahora lo utilizo para imprimir materiales de aclaración de la verdad para los practicantes todos los días.

En el pasado otro practicante solía producir materiales de aclaración de la verdad, pero no lo había hecho en los últimos años por muchas razones. Ahora, después de entender los principios de Fa, compró un equipo y continuó en el camino de cultivación que Shifu ha arreglado para él. Otro practicante también empezó a producir materiales de aclaración de la verdad. Todos los practicantes se están corrigiendo basándose en el Fa y continuando en sus caminos de cultivación arreglados por Shifu, tratando de hacer lo mejor posible las tres cosas para devolverle la gratitud.

Ahora, los practicantes de las aldeas vecinas están maravillados cuando ven que incluso un practicante veterano de casi 80 años de nuestra aldea puede conectarse a Minghui.org. Muchos practicantes están cambiando sus ideas y están pidiendo a sus coordinadores locales que les ayuden a comprar una computadora para que también puedan conectarse a Minghui.org y recorrer el camino de cultivación que Shifu ha dispuesto para ellos.