​Una mujer detenida y torturada hasta quedar completamente ciega muere 22 años después tras soportar un acoso policial incesante

(Minghui.org)

Nombre: Cai Changzhen
Nombre en chino: 蔡常珍
Género: Femenino
Edad: 83 años
Ciudad: Wuhan
Provincia: Hubei
Profesión: Empleada de la Compañía de Aguas de Wuhan
Fecha de la muerte: Marzo de 2023
Fecha de la última detención: 19 de julio de 2008
Lugar de última detención: Centro de Lavado de Cerebro Etouwan.

Una residente de la ciudad de Wuhan, Provincia de Hubei, se quedó ciega en 2001 tras 14 meses de detención y tortura en un centro de lavado de cerebro por practicar Falun Gong. A pesar de su estado, la policía nunca dejó de acosar a la Sra. Cai Changzhen, haciéndola vivir en un miedo constante. Falleció en marzo de 2023, a la edad de 83 años.

La Sra. Cai trabajó para la Compañía de Aguas de Wuhan antes de jubilarse. Sufría graves problemas de cuello y espalda, reumatoide en los dedos, así como afecciones de estómago, riñón e hígado. Todas estas enfermedades desaparecieron cuando empezó a practicar Falun Gong en marzo de 1993.

Tres meses después de que el Partido Comunista Chino comenzara la persecución a Falun Dafa, en julio de 1999, la Sra. Cai fue a Beijing para apelar por su derecho a practicar Falun Gong. Fue detenida, trasladada a Wuhan y recluida en el Centro de Lavado de Cerebro Etouwan durante más de un mes.

La Sra. Cai fue detenida de nuevo a principios de agosto de 2000 por distribuir material de Falun Gong. La trasladaron al Centro de Lavado de Cerebro Etouwan, en donde fue sometida a constantes palizas y colgada de las muñecas. Quedó completamente ciega en enero de 2001 debido a las torturas, pero los guardias no la liberaron hasta septiembre de 2001.

Representación de la tortura: colgada.

En una ocasión, la Sra. Cai recordó cómo se quedó ciega mientras estuvo detenida: "Un agente de policía me interrogó sobre dónde había conseguido el material de Falun Gong. Como me negué a decirle nada, me dio un puñetazo en la cara que me hizo sangrar los ojos. Luego me empujó contra la rejilla de ventilación del aire acondicionado. Al mismo tiempo, había un ventilador de techo encima de mí y otro ventilador que me soplaba por detrás. No me dejaron dormir durante tres semanas. Unos días más tarde, la policía me colgó después de comer y siguió interrogándome sobre el origen de los materiales. Permanecí en silencio y luego me desmayé. Primero perdí la visión del ojo derecho debido a la herida de la paliza. Poco a poco, también perdí la visión del ojo izquierdo y me quedé completamente ciega".

Sólo un año después de que la Sra. Cai fuera puesta en libertad, la policía intentó detenerla de nuevo el 30 de septiembre de 2002. El hecho ocurrió cuando otro practicante se encontraba en su casa. Mientras los agentes golpeaban su puerta, todos los vecinos de su barrio se acercaron y condenaron a los agentes de policía por perseguir a una mujer ciega que sólo quería ser una buena persona. Los agentes desistieron de su intento de detención y se marcharon. Para evitar más persecuciones, la Sra. Cai se escondió durante más de un mes.

El 7 de enero de 2003, varios agentes de policía llamaron a su puerta. En cuanto abrió, entraron corriendo y la llevaron al Centro de Lavado de Cerebro Etouwan, donde permaneció detenida ocho días.

Semanas antes de los Juegos Olímpicos de Beijing, el 19 de julio de 2008, la policía volvió a detener a Cai, que entonces tenía casi 70 años, y la llevaron de nuevo al Centro de Lavado de Cerebro Etouwan. Ante la enérgica protesta de su hijo, la Sra. Cai fue puesta en libertad tres días después.

Varias personas llamaron a la puerta de la Sra. Cai a las 16:00 horas del 25 de abril de 2014, pidiendo comprobar su medidor de electricidad, a pesar de que dicho medidor no se encontraba dentro de su casa. La Sra. Cai se negó a abrir la puerta. La policía pasó una hora forzando las dos puertas, antes de entrar. En el allanamiento, confiscaron sus libros de Falun Gong, un MP3 y sus únicos ahorros, 35.700 yuanes (5.662,50 dólares). También, los agentes de policía intentaron detenerla, pero sus vecinos se lo impidieron. Tras una hora de forcejeo, se marcharon hacia las siete de la tarde.

Dos agentes acudieron de nuevo el 16 de junio de 2016 y engañaron a la Sra. Cai para que abriera la puerta, alegando que iban a comprobar su medidor de agua. En esta ocasión, volvieron a confiscar sus libros de Falun Gong, una foto del Fundador de Falun Gong, material informativo y un reproductor multimedia.

Este acoso incesante hizo que la Sra. Cai viviera atemorizada todos estos años. Su ceguera le hacía aún más difícil desenvolverse en la vida cuando vivía sola. Sucumbió a décadas de penurias y falleció en marzo de 2023.

Informe relacionado:

Petición de liberación para Cai Changzhen, anciana torturada hasta la ceguera (en inglés)