(Minghui.org) Un día, cuando estaba imprimiendo materiales de aclaración de la verdad, noté que algunos de los amuletos estaban borrosos y las imágenes estaban impresas dos veces (lo que se denomina efecto fantasma). No estaba feliz y comencé a quejarme y criticar.

Hace apenas unos días, cuando hablé con una mujer sobre la persecución a Falun Dafa, le di un amuleto. Ella lo miró y dijo: “Qué bonito es. ¿Cómo se puede hacer tan exquisitamente? Ella estaba elogiando la belleza del amuleto desde su corazón. Siento que es importante hacer materiales de aclaración de la verdad de buena calidad, por lo tanto, presto atención a cómo se ven los amuletos.

Cuando vi estos amuletos, me sentí infeliz por una razón egoísta. No podía distribuirlos a nadie porque se veían muy mal. Sin embargo, tampoco quería desperdiciarlos, ya que no quería acumular yeli (karma). Así que, comencé a quejarme y criticar al practicante: “¿Qué debo hacer? ¿Por qué la gente no es más responsable? No es respetar el Fa”. Justo cuando dije esto, vi que papel que salía de la impresora estaba en blanco. Me sorprendió y entendí que estaba equivocado al criticar el trabajo de otra persona.

Miré dentro y me di cuenta de que no debía quejarme de los compañeros practicantes, así que inmediatamente admití mi problema: “Shifu, cometí un error. No puedo quejarme de otro practicante”. La impresora dejó de imprimir páginas en blanco inmediatamente y comenzó a funcionar correctamente.

Nos cultivamos en Dafa y por eso no debemos ser egoístas. Además, los discípulos de Falun Dafa son un solo cuerpo y deben colaborar y ser compasivos entre sí.

Sentí que recibí una pista misericordiosa de Shifu, el Sr. Li Hongzhi, fundador y Maestro de Falun Dafa.

Un milagro ocurrió cuando mi bicicleta chocó con un taxi

Un invierno, mientras iba en bicicleta por la calle, un taxi salió de la nada y de repente se desvió hacia mí desde mi izquierda. Había un gran carámbano en mi lado derecho. Al moverse rápidamente, el taxi golpeó mi bici y su espejo lateral se rompió y se cayó. Mi moto, sin embargo, no sufrió daños y yo no resulté herido. ¡Qué milagro!

El conductor salió del auto y comenzó a maldecirme. Sabía que el accidente fue su culpa, pero la cultivación requiere anteponer las necesidades de los demás a las propias. Pensé para mis adentros: “Soy un practicante, así que no discutiré con él. Si no es razonable y me pide que pague por el espejo roto, le daré el dinero”.

Dijo en voz alta: "Te desviaste bruscamente hacia mi coche para evitar el carámbano". Sabía que era consciente de que se había equivocado, pero, para salvar las apariencias, se estaba mostrando terco y quería discutir. Le sonreí. Luego, forzándose a parecer tranquilo, dijo: "Ya puedes irte".

Echando la vista atrás, cuando me encontraba en aquella situación crítica, mantuve la calma y no sentí ningún miedo. Sin embargo, cuando llegué a casa y me senté en la cama, me flaquearon las piernas y todo mi cuerpo empezó a temblar sin control. La reacción de mi cuerpo me hizo sentir miedo. Tal vez mi lado conocedor vio lo peligrosa que había sido la situación y que Shifu me había rescatado.

Shifu me protegió y me salvó la vida, y por eso salí ileso. De lo contrario, no puedo imaginar lo que habría pasado. ¿Cómo pudo mi moto chocar contra el coche, romper su retrovisor y no resultar dañada? Sin la protección de Shifu, ¿cómo podía estar bien mi moto? Por un lado, había un coche y por el otro había hielo, y con la tremenda fuerza de la velocidad del coche, el retrovisor no era lo único que podía haberse roto. Le di las gracias a Shifu por protegerme.

Bajo la protección de Shifu me siento bendecido y feliz. Aunque continúa la brutal persecución del PCCh contra Falun Dafa, no tengo miedo porque tengo el Fa.