(Minghui.org) El año pasado tuve un accidente en la fábrica donde trabajaba. Mientras ayudaba a un compañero de trabajo, mi mano fue perforada por la máquina que estábamos operando, y mi dedo corazón fue aplastado.
Me miré el dedo. Estaba fracturado y aplastado. La uña se había caído y el hueso estaba al descubierto. Grité en mi corazón: "¡Shifu, ayúdame!". Y entonces empecé a recitar las frases "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Como practicante de Falun Dafa, me sentí protegido por Shifu y no sentí mucho dolor y permanecí tranquilo.
El supervisor se apresuró a conseguir vendas de gasa para vendarme el dedo y ordenó a otro trabajador que me llevara al hospital local. Al no poder arreglarme el dedo él mismo, el médico me cambió el vendaje y nos envió al hospital ortopédico de la ciudad.
El traumatólogo me dijo que tenía una fractura conminuta, es decir, varios huesos rotos. Tenía que fijar la fractura con clavos de acero y coser la carne aplastada. Me propuso operarme inmediatamente. Rechacé la operación y le pedí que me vendara la herida.
El médico pensó que la herida era tan grave que no se curaría bien sin cirugía, así que consultó con el jefe de su departamento para obtener otra opinión. El jefe también insistió en la importancia de operar enseguida, pues de lo contrario podría contraer una infección y perder el dedo. Aun así, me negué a la operación.
El hospital me pidió que firmara una "Declaración de responsabilidad por riesgo", en la que reconocía que yo sería responsable de las consecuencias de no operarme. Después de que el médico me pusiera el vendaje en el dedo, me pidió que volviera en tres días para un seguimiento.
Cuando volvimos a la fábrica, ya era de noche. El supervisor estaba preocupado y me preguntó si me dolía algo. Le dije que no. Se sorprendió, ya que su padre tuvo una lesión similar y no pudo dormir durante días por el dolor. El supervisor quería que descansara unos días en casa.
Planeé usar el tiempo en casa para estudiar el Fa y buscar seriamente las deficiencias en mi cultivación. Puse la mano sobre una almohada pequeña y me fui a dormir. Cuando me desperté al día siguiente, ¡la almohada estaba empapada de sangre! Pero no sentí ningún dolor y había dormido profundamente. Incluso una picadura de abeja dolería, ¡por no hablar de un dedo entero aplastado! Sabía que Shifu había soportado el dolor por mí. Gracias, Shifu.
Al tercer día, la gasa que me rodeaba el dedo se había secado por completo, pero estaba especialmente dura porque se había empapado de sangre. Le pedí a un compañero médico que me ayudara a cambiar la gasa.
Después de quedarme en casa dos semanas, volví a la fábrica y realicé algunos trabajos ligeros. Al cabo de dos meses, la carne de mi dedo volvió a crecer y los huesos se curaron. El médico me dijo que no me volvería a crecer la uña, pero tres meses después me volvió a crecer y el dedo quedó como nuevo. Todos mis compañeros de trabajo fueron testigos del poder curativo de Falun Dafa.
A principios de este año, otro compañero de trabajo tuvo un accidente y se lastimó el dedo. La máquina le golpeó el dedo, pero no le aplastó el hueso. Aunque el hueso no estaba lesionado, sufría un dolor insoportable y no podía dormir por la noche. Le recomendé que recitara las frases auspiciosas de Falun Dafa: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". También empezó a leer Zhuan Falun, el texto principal de Falun Dafa. Su dedo también se curó rápidamente.
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Categoría: El poder divino de Falun Dafa