(Minghui.org) ¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

He estado cultivando desde diciembre de 2001. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para informar a Shifu sobre mi experiencia en la cultivación.

Bendición traída por un accidente de coche

El 1 de enero de este año tuve un grave accidente en la autopista. No me di cuenta de que se acercaba un coche rápido mientras cambiaba de carril, y mi coche fue golpeado por detrás. El otro coche volcó. La rueda trasera y la puerta de mi coche quedaron completamente destrozadas, pero mi familiar no practicante y yo no resultamos heridos.

Me quedé completamente aturdido. Mi mente se quedó en blanco. ¿Cómo pudo pasar? Afortunadamente, los dos jóvenes del otro coche también salieron sin problemas. Tenían algunos rasguños y pequeñas contusiones, pero les dieron el alta rápidamente.

Me asusté al contar lo sucedido. La autopista estaba en buenas condiciones y no había mucho tráfico. Nuestros dos coches iban rápido. El otro coche volcó inmediatamente después de la colisión, pero salió despedido milagrosamente del carril más interior al carril lateral, y allí se detuvo perfectamente. Aunque mi rueda trasera estaba dañada, pude llevar mi coche también al carril lateral. Ninguno de nuestros coches fue golpeado por otro. Debí de disolver una enorme cantidad de yeli bajo la protección de Shifu.

Las pruebas de mi xinxing se pusieron en marcha cuando empecé a hacer frente a los daños. Tuve que eliminar mi apego a los intereses personales. Sólo las reparaciones de mi coche costaron 160.000 dólares taiwaneses (~5.100 dólares). El coste estimado de las reparaciones del otro coche superaba los 600.000 dólares taiwaneses (unos 19.000 dólares). Ambos teníamos seguro, pero aun así tuve que pagar una gran cantidad de mi bolsillo. Pensé que era mucho dinero, pero mi segundo pensamiento fue que tenía que pagar mis deudas, y un cultivador no debería hacer cálculos. Sin embargo, el informe policial me atribuyó el cien por cien de la responsabilidad. Mi mentalidad de luchador se agitó, pensando que era evidente que el otro coche había circulado con exceso de velocidad. ¿Cómo podían no tener ninguna responsabilidad? Mi tía, que resultó ser mi aseguradora, insistió en que debía solicitar una revaluación del accidente, cosa que hice. El informe determinó que yo no había mantenido la distancia de seguridad y que el otro conductor había circulado con exceso de velocidad.

Me pareció justo, pero debido a los repetidos consejos de mi tía, intenté disminuir mi responsabilidad recurriendo para poder pagar menos. En contra de nuestras expectativas, el resultado de mi recurso fue que yo debía ser el único responsable del accidente. Debido a que retrasé repetidamente las discusiones sobre la indemnización, la otra parte me demandó por negligencia. Mi mentalidad luchadora y mi apego a los intereses personales acabaron metiéndome en mayores problemas.

Mi tía pensaba que era importante luchar por lo que estaba bien y lo que estaba mal. Había perdido muchas noches de sueño a causa de mi caso, e incluso pensaba en cómo ganar para mí en sus sueños. Llegó a tener la tensión a 200, pero no se resintió. Mientras escribía este artículo, me llamó varias veces para recordarme cómo revisar mis respuestas a las preguntas.

Shifu nos ha iluminado:

“Cultivador practicante
Busca tú mismo los errores
Elimina todo tipo de corazones humanos
No te quedes atrás en grandes pruebas, pequeñas pruebas, no pienses en caer
El que tiene la razón es él
El que está equivocado soy yo
¿Por qué contienden?”
(Quién tiene razón, quien no, Hong Yin (III))

Al recordar mi reacción ante el accidente del primer día del año, mi primer pensamiento había sido: "¿Por qué tengo tanta mala suerte?". No me acordé de buscar mis defectos como cultivador.

Cuando empecé a mirar seriamente en mi interior, descubrí mi impaciencia al conducir, mi miedo a meterme en problemas y perder dinero, mi mentalidad luchadora de querer contender y mi excesiva confianza en la gente corriente. Habría sido difícil eliminar todos estos apegos sin el accidente. No tuve mala suerte. El accidente de coche fue algo bueno, incluso una bendición.

Degradación

La NTDTV atravesó una reestructuración en marzo de este año. Una mañana recibí una llamada en la que me comunicaban que dejaría de ser el director del Departamento de Noticias. Al principio pensé que podría aceptarlo con calma, porque sería estupendo para la NTDTV que un director más capaz tomara mi puesto. Sin embargo, la persona que ocupó mi puesto resultó ser uno de mis antiguos empleados, que se había enfrentado a mí delante de los demás.

Las cosas que había hecho se me venían a la cabeza y despertaban infelicidad en mi mente. No entendía por qué habían elegido a un compañero más joven y con menos experiencia para dirigir el departamento y yo tenía que trabajar para él. Me di cuenta de que mis pensamientos negativos no eran correctos, y me advertí que dejara de lado mis ideas sobre este compañero, pero no podía suprimir mis pensamientos negativos, incluso después de enviar pensamientos justos. Perdí el sueño por la noche. Después de hacer los ejercicios por la mañana, mi disgusto seguía molestándome.

Shifu debió ver mis difíciles intentos de salir adelante y me iluminó con la palabra "envidia" delante de mis ojos. Mientras tanto, me vino a la mente un párrafo de las enseñanzas de Shifu:

“Una persona malvada es dominada por el corazón de la envidia. A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente” (Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

Mi mente se aclaró enseguida. En mi mente dije que no quería tener envidia. En una fracción de segundo, sentí como si me elevara flotando lentamente desde el lugar en el que estaba sentado y me detuviera en un determinado nivel del universo.

Sabía que Shifu me había animado al dejarme experimentar la auténtica mejora que se produce al soltar. Siempre que estemos verdaderamente decididos a soltar nuestros apegos, Shifu puede ayudarnos a eliminar las sustancias negativas que han estado afectando a nuestra mente. En efecto, me enfrenté a este compañero con la mente tranquila y trabajé seriamente para cumplir sus requisitos. Sólo vi los puntos fuertes de este compañero, en lugar de sus defectos.

Mis reflexiones tras la muerte de compañeros practicantes

Este año han fallecido varios practicantes y he asistido personalmente a los funerales de un par de compañeros. Algunos de ellos habían cultivado durante más de diez años, o incluso más de veinte. Algunos fallecieron debido al yeli de enfermedad. Otros murieron en accidentes de coche. Sus muertes me llevaron a reflexionar sobre las razones.

Independientemente de las varias razones, sus muertes no sólo trajeron una pérdida enorme a nuestro cuerpo de cultivadores, sino también nos presentaron pruebas en el nivel de nuestra creencia, para ver si medimos los problemas con el Fa, o con las nociones humanas en los momentos críticos. Cualquier desliz momentáneo en un momento crítico distingue lo humano de lo divino. Si no nos tratamos como discípulos de Falun Dafa, Shifu no podrá protegernos, aunque quiera.

Un día, después de ir al baño, encontré mucha sangre en el retrete. Me quedé estupefacto, pensando que había vuelto una vieja enfermedad de años atrás. Aunque lo ignoré, sabiendo que se trataba de un proceso de disolución de yeli en lugar de una enfermedad, los síntomas persistieron durante varios días.

La hemorragia cesó durante unos días. Pensé que había superado la prueba, pero volvió, con una hemorragia peor. Duró semanas, pero no sentí ningún dolor. Ninguna de mis actividades cotidianas se vio afectada. Sin embargo, me asaltó un pensamiento negativo: "¿Es cáncer de colon? ¿Debería hacérmelo mirar?". Inmediatamente me di cuenta de que estos pensamientos eran erróneos. Era un proceso de disolución del yeli y de superación de una prueba. Como cultivador, primero debía mirar en mi interior y ver si algún apego me había estado impidiendo pasar la prueba.

Encontré mi miedo a la enfermedad, así como mi lujuria. Cuando veía mujeres jóvenes y guapas por la calle, no podía evitar mirarlas más. También perdía mucho tiempo viendo películas y siguiendo telenovelas, pero no había estudiado la Fa ni hecho los ejercicios con regularidad.

Después de trabajar para nuestros medios de comunicación durante tantos años, tenía muchos apegos y nociones ocultas. Por ejemplo, guardaba rencor a la alta dirección, temía a los conflictos cuando corregía los defectos de los compañeros practicantes, me quejaba de los compañeros que no me escuchaban y despreciaba a los compañeros que jugaban a videojuegos.

Mirar hacia dentro me hizo darme cuenta de lo mal que lo había hecho en la cultivación. Había albergado tantos apegos durante tanto tiempo, pero los había descartado como triviales. En realidad no hay nada trivial en la cultivación. Una pequeña negligencia puede convertirse en un gran problema.

La aparición del yeli de enfermedad resultó ser algo bueno, porque me ayudó a identificar mis defectos. Shifu debió de ver mi peligrosa situación y me iluminó para que mejorara rápidamente. Me propuse desprenderme de mis apegos y medir mis pensamientos de acuerdo con el Fa. Después de persistir en hacerlo, la grave hemorragia se detuvo antes de que me diera cuenta.

Me gustaría animar a mis compañeros practicantes con las palabras de Shifu:

“Dafa dizi que han pasado por este período histórico, los dioses incluso los respetan. También tienen que atesorarse a sí mismos por haber podido atravesar la persecución más perversa y sin precedentes. ¡Conviértete en un ser iluminado verdadero! ¡Esto es lo que Dios considera extraordinario!” (Mantente alejado del mal peligroso).

¡Gracias, Shifu! ¡Gracias, compañeros practicantes!

(Presentado en el Fahui de Taiwán 2023)