(Minghui.org) Ante otra oleada de brotes de virus en China, mucha gente está preocupada por las numerosas vacunas que se han lanzado recientemente. China es bien conocida por sus mercancías de baja calidad o falsificadas, y las vacunas no son una excepción. Por eso se ha producido un gran número de casos con efectos secundarios como leucemia, miocarditis y otros. Mis familiares, en cambio, no son tan temerosos.

Pero no fue así cuando empezó la pandemia hace varios años. Por aquel entonces, mis familiares no sabían qué hacer. Por un lado, les preocupaba infectarse sin vacunarse, pero también dudaban por la mala calidad del producto, como si fuera a servir de algo. Cuando me contaron sus preocupaciones, les hablé de mi experiencia practicando Falun Dafa. Haciendo cinco series de ejercicios y siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, he mejorado mucho tanto física como espiritualmente.

Dado que el Partido Comunista Chino (PCCh) ha estado suprimiendo los valores tradicionales como las enseñanzas de Falun Dafa, cualquier persona con conciencia que apoye la rectitud también sería bendecida. A menudo les digo a mis parientes: que la interacción de la mente y el cuerpo ha sido ampliamente aceptada en la comunidad científica, y hay muchos ejemplos en Minghui.org sobre personas que se han beneficiado recitando las frases "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Esto también se aplica a la pandemia, ya que la rectitud suprimiría la perversidad. Era como lo que estaba escrito en Huangdi Neijing (El clásico Interior del Emperador Amarillo), uno de los textos médicos chinos antiguos más conocidos: "Cuando una persona tiene qi (energía) recta residiendo en su interior, ninguna malignidad es capaz de invadirla".

Tras escuchar mis palabras, mis familiares se sintieron aliviados. Siguiendo mi consejo de recitar las frases auspiciosas de Falun Dafa, muy pocos de ellos se infectaron. Los que experimentaron algunos síntomas víricos se recuperaron en sólo uno o dos días. Sabían que eran afortunados porque la gente de su entorno se encontraba mucho peor. Una pariente me contó que habían muerto más de 40 jubilados de su lugar de trabajo. Si no se hubiera enterado ella misma de primera mano, no habría creído que la situación fuera tan grave.

Una situación preocupante fue la de Qiu Yongcai, profesor de 40 años de la Universidad Tecnológica del Sur de China. Antes de morir, el 3 de diciembre de 2023, envió un mensaje a sus amigos en las redes sociales sobre las vacunas chinas. En ese momento, esperaba en una sala avanzada de un hospital un trasplante de células madre hematopoyéticas. Como joven profesor y asesor de doctorado, tras buscar en la literatura, creyó que sufría efectos secundarios de la vacunación nacional contra el coronavirus. Más concretamente, algunas sustancias desconocidas en el virus inactivado causaron anemia aplásica. Esto provocó pancitopenia, es decir, niveles bajos de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Al ver el mensaje de Qiu, muchos usuarios de Internet coincidieron en que los efectos secundarios de estas vacunas chinas no se habían evaluado a fondo antes de lanzarlas al mercado.

El caso de Qiu no es el único. Otros ciudadanos chinos también han sido víctimas de estas vacunas, pero la mayoría de ellos fueron silenciados inmediatamente. Echando la vista atrás a estas últimas décadas, el PCCh nunca se preocupó por la vida de las personas e incluso mató a unos 80 millones de ciudadanos chinos durante numerosas campañas políticas. Entonces, ¿por qué el PCCh estaba impulsando fervientemente la vacunación de la gente en este momento? ¿Se trataba de propaganda política, de una herramienta para controlar a los ciudadanos (la tarjeta sanitaria está conectada a un documento de identidad y a un número de teléfono móvil) o de un método para proporcionar ingresos a los altos funcionarios?

El PCCh ha gobernado China durante más de 70 años y la persecución contra Falun Dafa también ha durado más de 24 años. Así, casi todo el pueblo chino ha sido envenenado por las doctrinas de odio, brutalidad y mentiras del PCCh. A menos que uno decida renunciar a su afiliación al PCCh, incluidas las organizaciones de la Liga de la Juventud y de los Jóvenes Pioneros, todos podrían enfrentarse a graves consecuencias en el futuro, a medida que al régimen se le responsabiliza de sus crímenes y sea eliminado por la historia.

Las mentes jóvenes de nuestros hijos han sufrido un lavado de cerebro a causa de la propaganda del PCCh y han perdido el discernimiento del "bien y el mal". Esto podría explicar probablemente por qué tantos niños enfermaron durante esta ola de infección y muchos de ellos perdieron la vida. Es importante seguir nuestra conciencia para apoyar la rectitud y apartarnos del régimen del PCCh. Esperamos sinceramente que más personas puedan reconocer esto y tomar la decisión correcta.